1 Y el Señor respondió y me dijo: «Con razón estás asombrado por la partida del hombre, pero no has juzgado bien los males que acontecen a los que pecan.
2 Y en cuanto a lo que has dicho, que los justos son raptados y los impíos prosperan,
3 Y en cuanto a lo que habéis dicho: «El hombre no conoce vuestro juicio», por eso oíd, y yo os hablaré, y escuchad, y os haré oír mis palabras.
4 [...]
5 El hombre no habría entendido correctamente mi juicio, si no hubiera aceptado la ley y yo le hubiera instruido en el entendimiento.
6 Pero ahora, por haber transgredido intencionadamente, sí, precisamente por el hecho de que lo sabe, será atormentado.
7 Y en cuanto a lo que dijiste acerca de los justos, que por causa de ellos ha llegado este mundo, así también vendrá por causa de ellos el que está por venir.
8 Porque este mundo es para ellos una contienda y un trabajo lleno de dificultades; y lo que está por venir, una corona de gran gloria.»