1 Por eso, hermanos míos, os he escrito para que os consoléis de la multitud de vuestras tribulaciones.
2 Porque sabed que nuestro Hacedor ciertamente nos vengará de todos nuestros enemigos, conforme a todo lo que nos han hecho, y que la consumación que el Altísimo hará está muy cerca, y Su misericordia que está por llegar, y la consumación de su juicio no está lejos.
3 ¡Para he aquí! Vemos ahora la multitud de la prosperidad de los gentiles,
Aunque actúen impíamente,
Pero serán como vapor:
4 Y contemplamos la multitud de su poder,
Aunque hagan lo malo,
Pero serán como una gota:
5 Y vemos la firmeza de su poder.
Aunque resistan cada hora al Poderoso,
Pero serán contados como saliva.
6 Y contemplamos la gloria de su grandeza,
Aunque no guarden los estatutos del Altísimo,
Pero desaparecerán como humo.
7 Y meditamos en la belleza de su gracia,
Aunque tienen que ver con contaminaciones,
Pero se marchitarán como hierba que se seca.
8 Y consideramos la fuerza de su crueldad,
Aunque no recuerdan el final (del mismo),
Pero serán quebrados como una ola que pasa.
9 Y observamos la jactancia de su poder,
Aunque nieguen la bondad de Dios, que se la dio,
Pero pasarán como una nube pasajera.