© 2011 Agnes Lazar
© 2011 Association Francophone des Lecteurs du Livre d'Urantia
Mi mente es el “útero” en el que tiene lugar el encuentro entre lo Divino y yo. Lugar de fecundación, implantación y gestación del producto de la Naturaleza de Dios y de la humanidad. Al final de esta gestación se espera un reajuste comportamental por mi parte. Esta acción justa satisface todo mi ser. Ya no siento ninguna carencia, saboreo la plenitud…
Como la mujer embarazada que estuve tres veces, muy rápidamente me doy cuenta de que un nuevo elemento ha penetrado en mi ser. Me puse en “estado de gestación”. Me pongo en cámara lenta (menos exterioridad y más capullo-interioridad). Me permito que esta cámara lenta y este estado de silencio interior acompañen este movimiento interno del que al principio no percibo mucho más que la certeza y la confianza de que algo diferente a mí, la humana Agnès, a quien he explorado, está a punto de tomar forma. Estoy atenta a los primeros movimientos de mi pensamiento, manteniendo un estilo de vida saludable que mantenga alejados todos los venenos mentales…, como mujer, estuve atenta a los primeros golpes contra la pared de mi útero. Y, en esta actitud de cámara lenta y silencio, las manifestaciones no duran mucho.
“Dios sabe antes que yo lo que necesito”, “La vida es más inteligente que yo” en términos de Sabiduría… entonces, cuando siento una pequeña perturbación, la no aceptación de una parte de mí al proceso de anidar dentro de mí ( como las molestias de una mujer embarazada al inicio del embarazo) Me repito estas afirmaciones que poco a poco me tranquilizan y me ponen en un estado de total receptividad.
Me dejé fecundar por Dios. Dejo que Dios transforme mis ideas en ideales cada vez más consistentes con Su verdadera Naturaleza y la mía. A partir de este trabajo de transformación, se espera que reajuste mis acciones. Es en mis acciones donde los efectos de Dios son visibles. Me entrego con total confianza a esta transformación de mi ser por la Naturaleza de Dios.
Entendí que Dios esperaba de mí una aceptación siempre renovada para impregnarme de Su Naturaleza. Mi personalidad le ofrece diariamente mi libre albedrío. Así es como voy de etapa en etapa de creciente invasión de Su mente en mi mente. Una expansión exquisita que nutre mi alma… hija de la relación y asociación entre mi Ajustador y yo. Mi mente es el lugar apropiado para esta síntesis.
Después de mi limpieza de discapacidades, un nuevo espacio mental quedó disponible. Se ofrece un nuevo espacio de recepción a mi Ajustador. Dios emerge en mi mente, tierra acogedora de un nuevo potencial equilibrio humano-Divino.
Nuevo comportamiento para mí:
Pasé del activismo a la acción. Mi deseo de hacer la voluntad de Dios, reiterado diariamente, atrae las energías necesarias para la realización de Su voluntad y la mía combinadas.
Observo lo que poco a poco va sucediendo en relación a una nueva situación que se me presenta. Observo sin tener prisa por actuar de inmediato. Mi primera acción es observar los hechos en relación con mi solicitud. No busco analizar, diseccionar, interpretar, sacar conclusiones prematuramente.
En esta nueva actitud de observación paciente, siento una organización celestial. Mi no prisa permite, gracias al factor tiempo, ir revelándome los elementos que necesito para actuar. En un momento, veo que la lógica toma forma, salta a la vista el hilo conductor, aparece la coherencia y con ella, esa sensación única de armonía “perfecta”…
La vida se me impone de manera tan evidente, ¡todo tiene sentido!
Todo lo que tengo que hacer es manipular las energías que se han vuelto evidentes.
Embarazo con Dios…
Primero, hay un pedido claro de mi parte de quedar embarazada, luego, me pongo en las condiciones favorables… Concentro toda mi energía en la idea del surgimiento de lo Divino en mi mente. Dios obra la transformación en mí y me ocupo de mantener las condiciones favorables (silencio, meditación, alejamiento de los venenos mentales, observación de los factores externos…) cuando las transformaciones han llegado al final de la gestación, me exteriorizo, bajo las directivas. de mi Ajustador, producto de esta transformación…
La ecuación de Dios y yo realizada una vez más se resuelve en mí con efectos visibles en el exterior…
Es absolutamente hermoso…
¡¡¡Me volví bulímica!!!
Agnes Lazar
Para mi “Esposa Actriz,… ¿qué flores?