© 2023 James Perry
© 2023 The Urantia Book Fellowship
por el Dr. James Perry
Actualmente soy vicepresidente de Virginia Carolina Readers y miembro del consejo de liderazgo de la Asociación Urantia Internacional (UAI). He observado los niveles de participación en todas las asociaciones de la Asociación Urantia de Estados Unidos, que actualmente comprenden sólo seis entidades activas, incluidos los Lectores de Virginia Carolina. En otras palabras, sólo hay seis asociaciones locales de la Asociación Urantia de Estados Unidos que participan actualmente en el Consejo de Vicepresidentes y Presidentes Locales.
Ha surgido un patrón que sugiere un desafío: la dificultad de desempeñar adecuadamente los roles necesarios dentro de estas asociaciones. Esto podría deberse a una perceptible falta de priorización entre los lectores.
Las organizaciones a menudo se fundan con inmenso entusiasmo y elevadas expectativas. Sin embargo, notamos una tendencia en la que, después de varios años, el liderazgo decae y el interés disminuye. El objetivo principal de estas asociaciones es establecer un entorno seguro para los buscadores de la verdad, proporcionando una plataforma para estudiar y explorar con personas de ideas afines.
El Libro de Urantia atrae a algunas personas debido a la belleza de su lenguaje y la naturaleza atractiva de sus temas. Los estudios de actualidad, como los de Adán y Eva, los ángeles y Juan Bautista, cautivan a muchos por sus referencias bíblicas. Sin embargo, los defensores a menudo encuentran resistencia al compartir estas enseñanzas, al darse cuenta de que la difusión no siempre provoca una respuesta receptiva.
Revelar la naturaleza y el carácter del Padre se extiende más allá del libro mismo. De hecho, sólo he compartido el libro con éxito con otras dos personas en mi vida: mi esposa, Marion, y mi hermana espiritual, Voyette. Es nuestra actitud hacia ser ciudadanos del universo y nuestros esfuerzos genuinos por encarnar las verdades que hemos descubierto lo que se convierte en el verdadero mensaje. Incluso para aquellos que no están interesados en El Libro de Urantia, vivirlo se convierte en un testamento y una revelación de sus enseñanzas, lo que potencialmente impulsa a estas personas a explorarlo más a fondo con el tiempo e interiorizar sus significados y valores.
Con el tiempo, incluso sin un reconocimiento consciente de El Libro de Urantia, los individuos pueden encarnar sus enseñanzas, transformándose a sí mismos y, por extensión, a otros a través de un proceso similar. Esto subraya que la esencia no reside sólo en el libro sino en que cada creyente desea manifestar la naturaleza y el carácter del Padre a través de su hijo Jesús. El texto sirve como guía para hacernos conscientes de que somos ciudadanos del universo y para ayudarnos a comprender cómo funciona el universo.
Es imperativo que todos reflexionemos sobre nuestras razones para comprometernos y estudiar esta revelación. Cuando abracemos sus verdades viviéndolas, desearemos ser útiles y se abordará el desafío de desempeñar funciones organizativas críticas. Hasta ese momento, seguiremos agobiados por unos pocos trabajadores espirituales mientras la cosecha siga siendo abundante.
Podéis hacer un trabajo importante si no os volvéis engreídos; podéis hacer diversas cosas tan fácilmente como una sola si dejáis fuera a vuestro yo. (LU 48:6.37)