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| El poema del gato | Le Lien Urantien — Número 103 — Septiembre 2023 | Resurrecciones Dispensacionales — Eras Planetarias |
«La creación evolutiva de esta alma inmortal resulta de tres factores, no de dos. Estos tres antecedentes del alma morontial humana son:
«1. La mente humana y todas las influencias cósmicas que la preceden y que actúan sobre ella.
«2. El espíritu divino que habita en esta mente humana y todos los potenciales inherentes a tal fragmento de espiritualidad absoluta, así como todas las influencias y factores espirituales asociados con él en la vida humana.
«3. La relación entre la mente material y el espíritu divino, que denota un valor y conlleva un significado que no se encuentra en ninguno de los dos factores de esta asociación. La realidad de esta relación única no es ni material ni espiritual, sino morontial. Es el alma.» LU 111:2.4-7
Para ilustrar esta idea de que nuestro desarrollo interior depende de un aporte superior a nuestra mente y a nuestra relación con ella, les ofrezco este cuento popular:
Había una vez un anciano que no quería que sus hijos, sus tres hijos, fueran víctimas permanentes del pensamiento limitado.
Entonces, cuando escribió su testamento, deliberadamente dejó a sus tres hijos una manada de 17 camellos con instrucciones de que el primer hijo debería tener la mitad de estos 17 camellos; el segundo hijo tendría un tercio del total de 17 camellos; y el tercero tendría una novena parte del total.
Por supuesto, cuando murió y los 17 camellos fueron presentados ante estos jóvenes, descubrieron que no podían cumplir la voluntad de su padre porque 17 no es divisible por 2, ni por 3, ni por 9.
Luego se preguntaron si debían vender los camellos, pero al hacerlo estarían violando los términos del testamento.
Pensaron que si cortaban los camellos en pedazos, no sólo violarían las intenciones de su padre sino que tampoco sería amable con los camellos.
Y así sólo les quedaba una cosa por hacer: encontrar un hombre sabio que pudiera aconsejarles.
Después de muchas dificultades, finalmente encontraron un hombre sabio y él consideró el problema, y en lugar de intentar dividir la herencia, dijo:
“Agrego uno de mis camellos a esta manada… haciendo un total de 18 camellos. Ahora podemos proceder con la ejecución del testamento de su padre. »
El sabio dijo: “La mitad de todos los camellos son para el primer hijo… hay 18 de ellos, por lo que son 9 camellos… Un tercio de la horda es para el segundo hijo… 18 por 3. … o 6 camellos. Y el tercer hijo recibe un noveno… es decir 2 camellos…
Para un total de 17 camellos, quedando un camello, que resulta ser el del sabio.
Así que lo llevó de regreso a su rebaño, habiendo cumplido los términos del testamento del anciano y habiendo enseñado a sus hijos algo que el padre siempre había querido.
(Extracto del documental The Dreamwalkers encontrado en YouTube)
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