© 1999 Meredith Sprunger
© 1999 La Christian Fellowship de Estudiantes de El libro de Urantia
Spiritual Fellowship Journal — Contenido del número, primavera de 1999 | Primavera 1999 — Índice | Ninguna teología creíble |
Las religiones suelen evolucionar en torno a personalidades carismáticas o proféticas. Cuando los sentimientos y prácticas religiosos logran la identidad del grupo indígena y su institucionalización en una sociedad, se convierten en parte permanente de esa cultura. La teología, la política y la práctica de una religión pueden sufrir cambios a lo largo de los años, pero mantienen su identidad histórica. Nunca un paradigma religioso nuevo y avanzado ha vencido la estructura de poder de las religiones más antiguas.
La historia de la religión tiene muchos ejemplos del fracaso de los movimientos reformistas a la hora de transformar las tradiciones religiosas más antiguas. El fundador del jainismo, Mahavira, y el creador del budismo, Gautama, comenzaron sus enseñanzas en un intento de reformar el hinduismo, no de iniciar una nueva religión. Nanak, el arquitecto del sijismo, hizo otro intento de reestructurar el hinduismo que incluiría también a los seguidores del Islam. Su mensaje fue: «No hay musulmanes ni hindúes». Las enseñanzas de Nanak atrajeron tanto a hindúes como a musulmanes.
Hay una encantadora leyenda sobre su muerte. Cuando Nanak estaba a punto de morir, sus seguidores hindúes y musulmanes tuvieron una disputa sobre cómo deshacerse de sus restos. Nanak, en un intento por resolver la controversia, pidió a cada grupo que colocara flores a su lado y el grupo cuyas flores aún estaban frescas podía deshacerse de su cuerpo. Cuando ambas facciones estuvieron de acuerdo, Nanak se cubrió con una sábana y durante la noche murió. A la mañana siguiente ambos conjuntos de flores estaban frescos, pero el cuerpo de Nanak ya no estaba. El resultado de los esfuerzos reformistas de Nanak es que ni el hinduismo ni el islam cambiaron, sino que nació una nueva religión.
Jesús intentó mejorar el judaísmo y sus seguidores comenzaron como una secta del judaísmo, pero para continuar enseñando su mensaje espiritual ampliado se vieron obligados a hacerlo como una organización separada que llegó a ser conocida como cristianismo. Bahaullah intentó reformas religiosas y sociales en el Islam pero fue encarcelado y ejecutado, lo que resultó en la formación de la religión bahá’í. Los intentos históricos de mejorar las religiones han fracasado. Es la naturaleza de la sociedad humana resistirse al cambio. Thomas S. Kuhn, en su libro clásico La estructura de las revoluciones científicas, observa que transcurre un tiempo considerable entre la ruptura de un paradigma científico y el surgimiento de una nueva orientación. Y, señala, los creadores del nuevo paradigma son muy jóvenes o muy nuevos en el campo donde se realizan los nuevos descubrimientos. El adoctrinamiento y la tradición parecen inhibir la innovación creativa.
Este fenómeno de resistencia al cambio se aplica a las revelaciones de época. Todas las revelaciones de época anteriores han encontrado obstáculos. La Quinta Revelación de Época está experimentando algunas de las mismas dificultades. Los Intermedios patrocinadores de La Vida y Enseñanzas de Jesús parecen estar intentando mejorar el cristianismo. Durante los últimos cuarenta años he intentado lograr que teólogos y ministros cristianos examinaran seriamente El Libro de Urantia, prácticamente sin éxito. Incluso aquellos ministros que reconocen su calidad y utilizan sus enseñanzas lo hacen de forma encubierta. Está claro que cualquier organización religiosa que surja de la Quinta Revelación de Época será una nueva organización religiosa. Obviamente habrá numerosas organizaciones de este tipo en los siglos venideros. Es de esperar que dichas organizaciones e instituciones en su teología, política y práctica se beneficien de la sabiduría espiritual de los Documentos de Urantia. Durante estos primeros años de desarrollo que preceden al advenimiento de nuevas organizaciones religiosas, la misión de esta Revista es Promover debates teológicos, filosóficos y políticos relacionados con un simbolismo y una expresión socioreligiosa apropiados de la Quinta Revelación de época. Con suerte, estas discusiones contribuirán a la sabiduría espiritual que estará disponible cuando aparezcan estas nuevas organizaciones religiosas.
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