© 1998 Robert Crickett
© 1998 La Christian Fellowship de Estudiantes de El libro de Urantia
Una introducción a la nueva misión de The Spiritual Fellowship Journal | Primavera 1998 — Índice | Afirmaciones espirituales para mejorar la vida religiosa |
Las expresiones espirituales y religiosas de la Quinta Revelación de Época están en su infancia, meros brotes que responden a las primeras corrientes cálidas de una Primavera completamente nueva. La aparición inicial de los Documentos de Urantia se produjo en una cultura cristiana. A medida que desarrollamos una experiencia espiritual en el contexto de la Quinta Revelación de Época, es útil darse cuenta de que los autores diseñaron sus enseñanzas para que descansaran en los fundamentos de las mejores ideas de la experiencia cristiana. Para comprender la Quinta Revelación de época en su relación histórica con la experiencia espiritual cristiana, uno debe darse cuenta de que el cristianismo se basa en las autoridades del Espíritu Santo, la Biblia y dos mil años de historia de la iglesia. Sin embargo, en la promoción de los Documentos de Urantia entre los cristianos, estas formidables autoridades no son fáciles de contrarrestar. Los Documentos de Urantia no tienen pedigrí ni autoridad excepto la dirección del Espíritu de Dios en los corazones y las mentes de los individuos. Dado que la mayoría de las personas necesitan el apoyo de sus compañeros en la experiencia religiosa, el crecimiento inicial de la revelación de época es siempre un movimiento lento y de base.
Los Documentos de Urantia no tienen pedigrí ni autoridad excepto la dirección del Espíritu de Dios en los corazones y las mentes de los individuos. Dado que la mayoría de las personas necesitan el apoyo de sus compañeros en la experiencia religiosa, el crecimiento inicial de la revelación de época es siempre un movimiento lento y de base.
Además, la difusión de la Quinta Revelación de Época difiere enormemente del evangelismo personal y lleno de fe de los primeros cristianos. La difusión de las enseñanzas de un libro a menudo tiende a ser intelectual en lugar de transmitir una experiencia espiritual que cambia la vida con un Dios personal lleno de gracia. La visión espiritual ampliada de los Documentos de Urantia tiene grandes potenciales transformadores del mundo; sin embargo, los heraldos de esta Buena Nueva deben exhibir el mismo entusiasmo espiritual inspirador que motivó a los primeros evangelistas cristianos.
Desde la perspectiva de los Documentos de Urantia, nos encontramos en un momento único de la historia, un momento de superposición entre revelaciones. Se parece a la época en la que Juan Bautista todavía predicaba pero Jesús ya había sido bautizado. La antigua herencia de Melquisedec todavía era poderosa, pero el nuevo poder del Padre en Miguel había surgido de su crisálida y rápidamente estaba secando sus alas. Ahora surgen preguntas acerca de que los Documentos de Urantia suplanten la autoridad de la Biblia que habría surgido entonces, tales como: «¿Qué será de Juan y sus seguidores y las costumbres de los antiguos profetas? ¿Y qué surgirá entre los seguidores de Jesús?»
Hoy, el cristianismo tiene poco testimonio de la nueva espiritualidad que surgirá de los potenciales espirituales y del liderazgo inspirados por la Quinta Revelación de Época.
Juan está, por así decirlo, todavía predicando, y Jesús recién ahora ha partido hacia las colinas de Perea y su tiempo de planificación.
Hoy en día, toda la cristiandad parece estar esperando el regreso de Cristo o alguna expresión de renovación espiritual. El mundo cristiano siente la inmanencia de un renacimiento espiritual. Su atención se centra en la única opción proporcionada por sus líderes: el regreso de Cristo o la renovación espiritual dentro de los parámetros de la tradición. Dentro de la iglesia, los cristianos no tienen evidencia de nada más que desafíe efectivamente sus propios estándares y expectativas experienciales.
Pero seguramente, como en los días de Juan y Jesús, los discípulos de las viejas costumbres están siendo expuestos a una verdad nueva y ampliada que en gran medida es ignorada o rechazada. Y la gravedad espiritual siempre predominante hacia los propósitos de crecimiento del Padre está dando aumento a lo nuevo y provocando una decadencia de lo viejo. Así como la evolución espiritual guió el predominio de la Cuarta Revelación de Época, espero que prevalezca el mismo proceso entre las enseñanzas ampliadas de los Documentos de Urantia y las tradiciones bíblicas.
La lucha por sembrar los Documentos de Urantia en todo nuestro mundo es un esfuerzo por ganar alianzas espirituales influyentes. Las lealtades espirituales cristianas buscarán durante mucho tiempo una supuesta autoridad bíblica y no cederán ante una escritura «impostora»; es decir, a menos que se les proporcione un testimonio espiritual auténtico de su propio Jesucristo en el contexto de esa nueva escritura. Cuando estén efectivamente expuestos a esta vida ampliada y a las enseñanzas de Jesús, la verdad de sus propias convicciones los impulsará a correr hacia este Cristo al que han adorado durante mucho tiempo.
Creo que el movimiento Urantia tiene la obligación de ser proactivo en el desarrollo de vocaciones religiosas para que la revelación no sólo sea difundida sino también evangelizada por testigos espirituales vivos.
La difusión espiritual de los Documentos de Urantia depende de hombres y mujeres que conocen personalmente y se atreverán a defender al Cristo Miguel de la Quinta Revelación de Época frente a la religión comprometida sobre el Jesús del cristianismo. En este plan universal para la propagación de los Documentos de Urantia en la Tierra, podemos esperar que las fuerzas espirituales de Nebadón proporcionen vocaciones religiosas para que se levanten nuevos ministros que desarrollen nuevos grupos religiosos como testimonio de Cristo Miguel y el Padre Universal, en «poder espiritual de lo alto».
En el tiempo de superposición, si bien la obtención de lealtades cristianas puede tardar en llegar, los nuevos grupos religiosos, con sus ministros inspirados por Miguel, también ganarán a personas de otras religiones para una comprensión más plena del reino. Pero, ya sea que los cristianos mejorados acudan a ella o no, la familia de Dios ciertamente crecerá espiritualmente a través del poder de la Quinta Revelación de Época.
Creo que el movimiento Urantia tiene la obligación de ser proactivo en el desarrollo de vocaciones religiosas para que la revelación no sólo se difunda sino también evangelizada por testigos espirituales vivos. Si eso se puede lograr en algún grado en el clima político actual, o con miembros de la actual generación de lectores que parecen en gran medida indispuestos a una demostración de religiosidad pública, ofrece una especulación interesante. Sin embargo, el estudio de los Documentos de Urantia inevitablemente saldrá del salón y se trasladará a los salones públicos de inspiración y adoración. Y, en última instancia, deben surgir seres humanos, guiados totalmente por la vida inspiradora de Jesús y su magnífico evangelio, y por el empoderamiento espiritual de lo alto. Las fuerzas predominantes buscarán la institucionalización de la Quinta Revelación de Época. Atraerán a sus heraldos a la gran diversidad de vocaciones religiosas que existen actualmente en el mundo. Las iglesias y los grupos religiosos comenzarán como expresiones sociorreligiosas pequeñas, personalizadas pero efectivas de la Quinta Revelación de Época.
Robert Crickett conoció El Libro de Urantia en 1972. Esto mejoró su vocación como monje budista y fue influyente en su trabajo en el campo del tratamiento del abuso de sustancias. Actualmente asiste en la Iglesia de Cristo Miguel en Melbourne, Australia.
«La religión necesita nuevos dirigentes, hombres y mujeres espirituales que se atrevan a depender únicamente de Jesús y de sus enseñanzas incomparables. Si el cristianismo insiste en olvidar su misión espiritual mientras continúa ocupándose de los problemas sociales y materiales, el renacimiento espiritual tendrá que esperar la llegada de esos nuevos instructores de la religión de Jesús que se consagrarán exclusivamente a la regeneración espiritual de los hombres. Entonces, esas almas nacidas del espíritu proporcionarán rápidamente la dirección y la inspiración necesarias para la reorganización social, moral, económica y política del mundo.» (LU 195:9.4)
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