© 1999 K. Richard Keeler
© 1999 Fundación Urantia
Algunos eventos se habían estado tramando a lo largo del año pasado y finalmente han culminado con una acción tomada por uno de los lectores de El libro de Urantia. Este individuo ha impreso toda la parte IV de El libro de Urantia excepto su primer capítulo. Lo ha intitulado Jesús - A New Revelation [Jesús - una nueva revelación] y tiene en la cubierta una pintura de El Cristo de San Juan de la Cruz por Salvador Dalí.
Dedicamos esta edición especial del URANTIAN News para volver a narrar la historia de la Fundación Urantia, para explicar su función, para informarlos de los eventos recientes y para explicar la posición de la Fundación enfrente de estos eventos.
El objetivo primario de la Fundación Urantia siempre ha sido la protección del texto inviolable de El libro de Urantia y ver que éste sea entregado al mundo y a las generaciones venideras en su integridad y como nos fue entregado a nosotros.
En adición a hacer que el libro sea ampliamente disponible, la Fundación en los años recientes a otorgado a individuos permisos generosos para usar el texto como parte de sus esfuerzos de diseminación y el empleo de las marcas registradas para uso religioso y personal. Puede ser obtenida una copia de las nuevas normas sobre el copyright y las marcas registradas de la Fundación Urantia o pueden ser vistas en nuestro sitio web en www.urantia.org
Si ustedes tuvieran preguntas o desearan mayor información, tengan la gentileza de contactarnos.
por K. Richard Keeler
Conjuntamente con otros tres fideicomisarios, recientemente estuve en Vancouver, Canadá, atendiendo a la conferencia internacional de la Fellowship (IC99). Esta vez desde el lado de los participantes, experimenté lo que yo llamaría un sentimiento general de apoyo a la unidad y a la sanación de nuestro joven movimiento. Muchos miembros de la Asociación Internacional Urantia (AIU), así como de la Fellowship, participaron de la conferencia; los miembros locales de ambas organizaciones trabajaron conjuntamente preparando la conferencia. Pareciera que tales expresiones de cooperación local estuvieran creciendo. Esto es muy gratificante.
Los fideicomisarios fueron invitados a conversar sobre el trabajo de la Fundación Urantia. Mo Siegel habló sobre la distribución del libro y sugirió que «deberíamos pescar ahí en donde más peces hubiera», esto es, de traducir primero el libro a los idiomas hablados por las mayorías. Kwan Choi habló sobre el mandato de difundir las enseñanzas de Jesús alrededor del mundo y se refirió a la experiencia de los albores de la comunidad cristiana. También se refirió al trabajo de las traducciones de la Fundación y a la gran importancia del trabajo en equipo. Gard Jameson habló sobre el compromiso de la Fundación de publicar un texto inviolado y a la necesidad de cooperación en nuestros esfuerzos por diseminar el libro y sus enseñanzas. Yo compartí el compromiso de la Fundación de ir hacia la sanación y unificación de nuestro movimiento. Enfaticé la necesidad de comunicarnos, apoyarnos y amarnos los unos a los otros, y orar por cada otro. Debemos aprender a amar y a perdonar.
Como otros lectores, los fideicomisarios han experimentado la fuerza de las enseñanzas del libro para impulsarnos a alcanzar metas más altas y profundas. Sabemos que la revelación en su conjunto es de lejos más grande que la suma de sus partes, que de una manera misteriosa existe el verdadero poder de la revelación como un patrón o estructura que mantiene juntas las palabras, conceptos y enseñanzas en una unidad de verdad, permitiéndole a la revelación vivir y respirar en nuestro corazón, mente y alma.
Por estas y por otras razones, es que nos dedicamos a la preservación del texto en su forma total inviolada, de modo que las generaciones futuras tengan la misma oportunidad que nosotros tuvimos al ser tocados en nuestra mente y alma tan profundamente por la nueva verdad. Como fideicomisarios, nuestro camino particular de servicio puede ser el servicio a través de la Fundación Urantia, pero todos los hijos e hijas de fe de Dios beben del mismo pozo -el pozo de la verdad revelada, dada en la confianza de todos los recipiendarios, quienes en su momento la otorgarán esta verdad así como la bondad y el amor envuelta a sus semejantes.
Oramos porque cada uno de los lectores que haya sido tocado por esta revelación se una a nosotros en el trabajo por preservar el texto original para aquellos que nos sigan, mientras que al mismo tiempo expresen sus verdades en formas únicamente creativas y personales que ayudan a otros a experimentar su poder transformador.
Todos estamos al tanto que algunos lectores no están de acuerdo con el método con que la Fundación preserva el texto. Ya que no deseamos pedir a nadie que abandone sus expresiones de disentimiento, les pediríamos en el espiritu de la revelación y en el espiritu del Maestro, que todos nosotros como miembros de la comunidad de lectores, elevemos la calidad de nuestro diálogo y de nuestras relaciones interpersonales a un nivel inspirado por nuestro propósito de unidad y restringido por el mutuo respeto y amor de los unos con los otros. Hay una gran tarea por delante para aquellos que están deseando vivir estas enseñanzas. Con la unidad de propósitos, apoyada por un espíritu de trabajo en equipo, y teniendo a Dios como nuestro socio, cosas muy grandes sucederán. En donde haya amor, siempre habrá milagros. Sabemos que estamos apoyados en nuestros esfuerzos de diseminación por los ángeles de supervisión a medida que completemos el sincero deseo de Jesús que todos nosotros seamos uno, así como él y su Padre en los cielos son uno. Por siempre podríamos recordar las palabras del Maestro:
«… Quisiera que realizarais unos actos de amor aún más grandes en el reino de la fraternidad de los creyentes. Y por eso os doy este nuevo mandamiento: Que os améis los unos a los otros como yo os he amado. De esta manera, si os amáis así los unos a los otros, todos los hombres sabrán que sois mis discipulos» (The URANTIA Book, LU 180:1.1)
«Y cuando el mundo vea estos sarmientos fructiferos - mis amigos que se aman los unos a los otros, como yo los he amado- todos los hombres sabrán que sois realmente mis discipulos.» (LU 180:2.1)
Sentimos tristeza al tener que informar que Harry McMullan III, uno de los miembros del consejo general, un miembro del comité ejecutivo y el tesorero de la Fellowship, ha decidido imprimir la parte IV de El libro de Urantia (excluyendo el capítulo 120, «La donación de Miguel en Urantia»). Dos de los fideicomisarios, viejos amigos del Sr. McMullan, así como otros numerosos individuos, repetidamente han apelado a él a no continuar con esta indeseable acción, esta publicación ilegal y desautorizada.
Hemos visto al Sr. McMullan publicando la parte IV separada de las partes I, II y III, como un proceso contraproducente por las siguientes razones:
En LU 19:1.4-5, un Consejero Divino de Uversa nos advierte:
[S]iempre existe el grave peligro de sucumbir al error de un punto de vista circunscrito, al mal inherente de una concepción fragmentaria de la realidad y la divinidad.
Por ejemplo: La mente humana ordinariamente anhela acercarse la filosofía cósmica que se manifiesta en estas revelaciones procediendo de lo simple y lo finito a lo complejo e infinito, de los origenes humanos a los destinos divinos. Pero ese camino no conduce a la sabiduría espiritual. Dicho método es la senda más fácil para alcanzar cierta forma de conocimiento genético, que en el mejor de casos tan sólo puede revelar el origen del hombre; poco o nada revela sobre su destino divino. (LU 19:1.4-5)
Los fideicomisarios y el personal de la Fundación Urantia, el liderazgo de la Asociación Internacional Urantia, y muchos miembros de la Fellowship vigorosamente en pensamiento, en palabras y obras, han promovido y perseguido una política de unidad y cooperación entre los lectores y los grupos de lectores. Actuando por cuenta propia, sin la aprobación del consejo general de la Fellowship, el Sr. McMullan, tesorero de la Fellowship y el propietario y el presidente de la Alliance Steel, ha impreso ilegalmente 15.000 copias de la parte IV de El libro de Urantia. Haciéndolo, él ha causado controversia y divisionismo entre la comunidad de lectores.
Fuentes cercanas al Sr. McMullan nos informaron que él invitaría a un litigio con la Fundación, y que gastaría millones de su fortuna personal para lograr quebrar el derecho de propiedad de la Fundación sobre el copyright y por lo tanto lo llevaría al dominio público. Al expresar tales sentimientos, él manifiesta su determinación de destruir a la Fundación Urantia.
Un grupo de lectores independientes, quienes se llamaron a sí mismos el «Comité de la Iniciativa del Milenio», se reunieron recientemente para explorar las formas en que se puedan fomentar mejor las relaciones dentro de la comunidad de lectores de El libro de Urantia. Este comité estuvo conformado por un grupo de voluntarios quienes están o han estado activos en cualquiera, la Fellowship o la Asociación Internacional Urantia.
El comité expresó a los lectores que los objetivos de la Fellowship y de la Asociación Internacional Urantia (AIU) son impresionantemente similares. Ahora las relaciones entre estos dos grupos de lectores se han forzado, ocasionando que cantidades sustanciales de tiempo y energía se hallan apartado de los verdaderos objetivos y propósitos de ambas organizaciones.
Los participantes presentaron una recomendación a la AIU y a la Fellowship de que ellos formarían una alianza de trabajo en razón de continuar con el proceso de unificación. Su intento fue impulsar a iniciar un diálogo a ambas organizaciones en razón de alcanzar un nivel más alto, más significativo de armonía y cooperación con unidad de espíritu, dentro de la comunidad de lectores.
Ahora, estas iniciativas se han visto perturbadas por la publicación ilegal de la IV parte de El libro de Urantia.
Los estatutos de la AIU declaran que la AIU apoya al copyright y a las marcas de la Fundación y trabaja en cooperación con la Fundación en la diseminación. Los miembros de la AIU consideran que la preservación del texto inviolado de El libro de Urantia es un importante aspecto para la diseminación exitosa de la revelación alrededor del mundo.
Vuestro planeta forma parte de un cosmos enorme; vosotros pertenecéis a una familia casi infinita de mundos, pero vuestra esfera es administrada con igual precisión y se fomenta con igual amor como si fuera el único mundo habitado en toda la existencia. (LU 19:1.4)
En la turbulenta historia de nuestro planeta, hemos sido bendecidos con cinco revelaciones epocales de verdad, como parte del plan celestial de evolución. El estudio de El libro de Urantia nos revela los planes y estrategias desarrollados por los supervisores celestiales para la implementación y administración de cada una de las revelaciones epocales.
I. Al Príncipe Planetario y su estado mayor de cien les fue confiada la tarea de implementar la primera revelación epocal en nuestro planeta. Su plan estuvo dirigido a la mejora de la cultura de la humanidad, primero atrayendo y luego entrenando a los mejores individuos en la cultura de Dalamatia. Fuimos informados que la guía del Ajustador dirigió a la gente hacia el Príncipe y su estado mayor.
Cada una de las diez comisiones planetarias abordó lenta y naturalmente el fomento de los intereses que se les había encomendado. Su plan consistió en atraer a los mejores intelectos de las tribus circundantes y, tras haberles preparado, enviarles de vuelta a su pueblo respectivo como emisarios de la elevación social. (LU 66:6.4)
II. Después de que Van y sus voluntarios escogieron la ubicación para la donación adámica, Adán y Eva, y su progenie, fueron encomendados con la tarea de implementar la segunda revelación epocal, y recibieron cuidadosas instrucciones de sus superiores:
Las instrucciones dadas por los Melquisedec a Adán, implicaron que habría de establecer sedes raciales, continentales y divisionales que estarian a cargo de sus hijos inmediatos, en tanto que él y Eva habrian de repartir su tiempo entre estas distintas capitales mundiales en carácter de asesores y coordinadores del ministerio mundial de la elevación biológica, el progreso intelectual y la rehabilitación moral. (LU 73:7.4)
III. Una vez que la orden de los Melquisedec recibió de las autoridades de Salvington la autorización de embarcarse en su plan de la tercera revelación epocal, las familias humanas, que habían adquirido potencial de liderazgo, fueron puestas en observación, antes de que Maquiventa Melquisedec escogiera el lugar para su donación. Él fue personalmente encargado de cumplir tareas muy específicas:
Vino para llevar a cabo dos tareas: Mantener viva en la tierra la verdad del Dios único y preparar el camino para la donación en forma mortal subsigniente de un Hijo Paradisiaco de ese Padre Universal. (LU 93:4.15)
IV. Miguel de Nebadón, habiendo decidido que Urantia, este planeta trastornado por las luchas, había de ser la escena de su séptima y última donación, encargó a Gabriel con una tarea, y él escogió a María y José de Nazaret para que sean los padres terrestres de Jesús. Jesús fue cariñosamente instruido por su hermano Emanuel que su única responsabilidad era revelarle la verdadera naturaleza y carácter de Dios a la humanidad.
«En tus relaciones con el orden social te aconsejamos que limites tus esfuerzos principalmente a la regeneración espiritual y a la emancipación intelectual. Evita todo enredo con la estructura económica y los compromisos politicos de tu época. Conságrate en especial a vivir la vida religiosa ideal en Urantia.» (LU 120:3.4)
V. Y finalmente nuestro mundo ha sido bendecido con la quinta revelación epocal, El libro de Urantia. Aunque difiere de las revelaciones previas en la forma, sabemos que los reveladores tienen un plan, han dado instrucciones y han confiado la administración de la diseminación del libro y sus enseñanzas a una institución hecha por el hombre, la Fundación Urantia. (Por favor lean el artículo de este número «El registro del copyright en El libro de Urantia» que contiene un extracto de la Declaración de fideicomiso creando la Fundación Urantia.)
En los inicios del siglo XX, un pequeño número de hombres y mujeres de Chicago, conocidos como la comisión de contacto fue el grupo usado como destinatarios cuando se materializó el texto de los documentos Urantia. Los miembros del grupo tuvieron que jurar que no darían detalles sobre estas transacciones en razón de prevenir que las generaciones futuras veneraran a los participantes. Fue considerado muy importante que ningún individuo fuera exaltado a través de su asociación con El libro de Urantia. Debido a su naturaleza revelatoria, el libro se sostenía por su propio mérito, naturaleza y contenido.
Mientras los documentos Urantia fueron transcritos, se leyeron a un grupo grande que se había estado reuniendo regularmente en la casa de uno de los miembros de la comisión de contacto. Éste era un grupo de discusión informal que se había estado reuniendo para conversar temas de actualidad populares. Los miembros del grupo fueron invitados a estudiar los documentos y poner preguntas. Las respuestas a las múltiples preguntas aparecieron en la versión expandida y final de los documentos — El libro de Urantia. Estos lectores tempranos conformaron el primer grupo de creyentes en la revelación, y adoptaron la tarea de llevar las enseñanzas de El libro de Urantia a toda la humanidad.
La comisión de contacto fue instruida de manera que el libro fuera entregado a la humanidad mucho antes de que el mundo estuviera listo para recepcionar sus enseñanzas. El plan fue dar tiempo suficiente para «entrenar líderes y profesores» y formar grupos de estudio alrededor del mundo. También fue necesario un tiempo para traducir el libro a los principales idiomas del mundo. Para mantener el texto seguro, mientras la lectoría crecía y se fortalecía, los reveladores resaltaron la importancia de la protección del texto para evitar distorsiones y cambios. Los comisionados de contacto fueron impulsados a asegurar los derechos internacionales del copyright del libro para cumplir con su protección.
Después de haberse completado los documentos, los comisionados de contacto tomaron las disposiciones para formar la Fundación Urantia y presentarla con las planchas para la primera impresión de El libro de Urantia en 1955, la Fundación Urantia fue fundada el 11 de enero de 1950. Su propósito es ser el custodio del texto inviolado de El libro de Urantia y asegurar que las enseñanzas del libro sean difundidas a toda la gente con la ayuda de los lectores y de las organizaciones fraternales. La Fundación es una organización sin fines de lucro y está dirigida por una junta de cinco fideicomisarios, quienes son designados de por vida. Los deberes y responsabilidades de los fideicomisarios están definidos en la Declaración de fideicomiso creando la Fundación Urantia. Para un ejemplar, por favor visiten nuestro sitio web en www.urantia.org o contáctense con la Fundación.
En la breve historia, desde la recepción inicial y subsecuente publicación de los documentos Urantia, un tema consistentemente ha atraído la atención de muchos lectores. Tal tema es en donde las motivaciones comerciales humanas podrían exceder la sabiduría espiritual de los reveladores, quienes encargaron estos documentos al cuidado humano. Aún antes de que los documentos fueran publicados, unos pocos lectores abogaron por técnicas modernas de mercadeo para realizar una rápida y amplia diseminación del libro. Aún hoy día abogan por este método pero contrasta con la aproximación personal recomendada por los líderes tempranos y apoyada por la actual junta y todas las juntas anteriores de fideicomisarios.
Los documentos Urantia, presentados en su integridad, son un trabajo de arte lingüistico, que han requerido las habilidades de muchos quienes no han sido mencionados como autores. Son ellos quienes emprendieron la tarea de organizarlos en un texto unificado, los diferentes trabajos de un vasto ensamblaje de seres de diferentes rangos de la ciudadanía universal. Aún el secuenciamiento de los documentos fue una tarea de amor. Revelando aquello que es infinito, eterno y divino en las primeras partes del libro, los reveladores nos conducen en el camino de la sabiduría espiritual. (LU 2:7.5). La aproximación humana más natural al estudio de la realidad es precisamente lo contrario. Ésta es la dirección que frecuentemente toman las personas, 0 recomiendan que otros tomen, la lectura cuidadosa del libro empezando con la hermosa narración de la vida terrestre del Maestro y de sus enseñanzas. Éste podría ser el camino humano, el sendero del conocimiento genético, tal como el libro lo describe, pero no es el camino hacia la sabiduría espiritual. La posición de la Fundación es que la publicación de la parte IV como un volumen separado está cargado con el grave peligro de sucumbir al error de un punto de vista circunscrito, al mal inherente de una concepción fragmentaria de la realidad y la divinidad [LU 19:1.4] para no mencionar «la falacia de la abstracción». (LU 2:7.5).
Aceptamos que la sapiencia comercial convencional probablemente podría sustentar la publicación de la parte IV como un volumen separado y como una forma de vender más libros. Pero la tarea de meramente vender mayores cantidades de libros no es aquella a la que primariamente fuimos convocados. Esto es un proceso mecánico, en donde la experiencia de la transformación personal por la verdad revelada en el libro es nuestra tarea espiritual primaria. Aquí, como siempre, si primero buscáramos el objetivo más grande, frecuentemente ahí encontraremos los más pequeños.
Siempre existe una manera mejor y recta de hacer las cosas . . . (LU 25:4.17) que implica que hay otra manera de hacerlas. Creemos que la «mejor y recta manera» de poner el libro a disposición de todos es como un todo, no fragmentado en sus partes o aún en unidades más pequeñas. Los fideicomisarios creen, piensan y sienten que es su sagrado deber mantener el texto inviolado, lo que, para ellos significa que las partes I, II, III y IV deben permanecer juntas como una unidad. Estamos hablando sobre la sabia y paciente introducción de la revelación epocal a almas hambrientas, a los hijos de Dios.
Los autores y patrocinadores de los documentos Urantia le han dado a la gente de este planeta un trabajo de un arte que ilumina las realidades más altas del universo. Ellos la aseguraron contra su fragmentación y distorsión asignándosela a la comisión de contacto y a su sucesor, la Fundación Urantia, la obtención de los derechos internacionales del copyright.
La protección por el copyright y la paciente diseminación, persona a persona, permite a la revelación lentamente sembrar sus raíces en la alma, la mente y el corazón de aquellos quienes tienen hambre y sed del amor y de la fuente del amor verdadero, Dios mismo. Tal método podría no ser el camino del mundo, pero es el camino de nuestros predecesores, y creemos, de los reveladores.
La Fundación Urantia fue establecida como una herramienta y le fue confiada la responsabilidad de proteger y diseminar la revelación. La distribución del libro, la cosa fisica, es administrada por la Fundación Urantia, mientras que la diseminación de las enseñanzas pertenece al reino del ministerio personal realizado por individuos y grupos fraternales. Una es una función comercial, la otra es personal y espiritual. El discernimiento de esta importante distinción evita el conflicto que de otra manera seguiría sobre la elevación del hecho material de esta revelación sobre la verdad que ella revela. Tal desatino podría resultar en una mera religión sobre el libro, con la fe de aquellos devotos que se medirían por la cantidad de ejemplares que cada uno haya vendido (o entregado).
La promesa de esta dispensación requiere que nuestro movimiento marche espiritualmente a aguas más profundas. Cada uno de nosotros debe escoger: ¿Traicionaremos u honraremos la confianza y la fe depositada en nosotros por la comisión de seres medianos? ¿Pondremos mayor confianza en nuestra propia lógica comercial que en la sabiduría de aquellos que nos confiaron los documentos?.
Tenemos confianza de que honraremos esta obligación. Tenemos confianza de que abandonemos los métodos de nuestra natural inclinación, que podrían hacernos similares a todos aquellos que proclaman con entusiasmo sus particulares revelaciones, mientras se olvidan de la verdad revelada de que las relaciones interpersonales, de que la amistad con Dios y con otros, es la única meta real, y que todo lo demás es tan sólo una herramienta temporal.
A través de los años, lectores de El libro de Urantia han discutido sobre el tema del copyright, (derecho de autor). Para entender la posición de la Fundación Urantia del por qué el copyright es usado «para preservar a perpetuidad el texto inviolado de El libro de Urantia», y de por qué es éste el «primer deber» de los fideicomisarios, según ha sido establecido en la Declaración de Fideicomiso, es que les ofrecemos lo siguiente:
El concepto mismo de «autoría» es puramente comercial y legal, derivando esta forma moderna de la época anterior a la era de la imprenta, cientos de años atrás. De hecho, esta moderna ley de copyright tiene su ancestro en una decisión tomada por un monarca. El caso involucraba a dos monasterios, en uno se había copiado un manuscrito que estaba en su posesión, pero que era propiedad del otro. El siguiente conflicto fue la acusación de «peligro espiritual», pero afortunadamente cabezas más frías, entendieron de otra forma, y que éste era realmente un dilema legítimo y puramente humano. Se otorgó la decisión que garantizaba derechos definitivos, aunque limitados, al dueño del «original». También prohibía al «infractor» realizar copias, pero reconocía la dificultad en poder evitar que alguien realizara una copia de su memoria, para uso personal. Así nació la noción de copyright, restringido por uso razonable. Claramente, sabían los reveladores de la dificultad que le asistiría a un novedoso y audaz experimento de una revelación trascendental en forma de texto.
Consideren por un instante que «autoría» es un intento de los seres humanos por identificar un lugar de «origen». Cuando traemos a consideración el origen de los documentos de Urantia, debemos en principio, tener en cuenta varios factores:
Todo buen misionero os dirá que al entrar en otra cultura para compartir los valores propios, primero hay que sumergirse en dicha cultura. Luego el éxito será proporcional a la profundidad de apreciación obtenida del lenguaje y hábitos de aquellos con quienes el contacto es deseado. Esto no es posible sin un contacto real y extenso.
La comisión de contacto y el forum, fueron probablemente reunidos con este propósito, y el proceso resultante a través de una cantidad de años fue la presentación del texto para ser comentado. El que fue muchas veces revisado para realizar los cambios necesarios y nuevamente presentado, hasta que hubo confianza en que el «original» había sido traducido tan eficientemente como se suponía, dada la profunda limitación del escogido idioma inglés. De esta manera, los partícipes humanos en este proceso, dieron forma, inevitablemente, a la versión inglesa, y aún la angustia de la comisión reveladora por distorsiones, es evidente a lo largo del texto. Este proceso no es exclusivo a una revelación, en especial, sino que es un hecho bien conocido al realizar cualquiera traducción.
Ahora se hace evidente que el «sujeto humano» fue una parte menor de este vasto proyecto, ni siquiera una parte crítica. En este contexto, sería absurdo que el directamente involucrado o cualquier otro, reclame la categoría de «auton». Para evitar el culto a la personalidad que seguramente le rodearía, y para darnos a nosotros una lección no escrita, de que nuestra fascinación por los «autores», está cercanamente relacionada con la superstición, y el «sujeto humano» se despojó de todo interés que de otra forma le hubiese legalmente correspondido a través del copyright. Ésta es, ciertamente, la posición más noble, y es por comparación con los modelos predominantes, una práctica muy idealista.
A raíz de que habitamos en una cultura egoísta y materialista, conducida mayormente por intereses comerciales, las mentes pragmáticas reconocen la necesidad de asegurar este texto, admirablemente no reclamado por sus «autores», contra otros que posteriormente no serían tan modestos. Poner al texto de los documentos de Urantia bajo un copyright, fue por lo tanto esencial y de acuerdo con las convenciones prevalecientes entonces y ahora, para ofrecer un trabajo escrito a la venta pública. Desde que un «autor» fue requerido para obtener un copyright, la Fundación Urantia, siendo la institución resultante y sucesora del componente humano de la «autorí», incluyendo al «sujeto humano», fue legítimamente nombrada como el «autor» para los propósitos legales necesarios para obtener la protección del copyright. En efecto los documentos se convirtieron en la propiedad corporativa de la Fundación, con el único propósito de evitar que otros los usen para sus propias ganancias. Hasta este punto, el mandato para estas acciones provenía de la comisión que inicialmente auspició los documentos a nivel superuniverso, más allá de este punto, fue dejado totalmente bajo la conducción de seres humanos, según acontece en la actualidad.
Parecería desafortunado el hecho de que seres humanos estuviesen comprometidos en la materialización y procesamiento de los documentos de Urantia, y que eso sea un escollo para tanta gente. Este pensamiento parecería pasar por alto la real contribución humana realizada a la sabiduría evolutiva del Supremo. El hecho de que los documentos fuesen explícitamente comenzados por personalidades «no-humanas», afirma en sí mismo la unión sin costuras que entreteje lo finito con lo infinito, y resuelve en una expresión llena de arte, tanto linguísticamente como de otras formas, lo humano y lo divino. Bajo esta luz, la revelación se convierte simplemente en un fenómeno que significa que se ha incluido en una discusión del nivel alto la discusión del nivel más bajo, y esto es algo que ocurre constantemente, aunque muchas veces de manera no reconocida.
Es un hecho no apreciado que los «autores no humanos» no se identifican a sí mismos por sus nombres. Demuestran para el reconocimiento universal, que solo el Padre es original. Sólo él comienza todas las cosas que son verdaderas, bellas y buenas, y por su palabra y acción nos invita a todos a participar en una envolvente melodía de conversaciones, que identifica la cultura del cosmos. Los documentos de Urantia son evidencia de esta cultura y de su naturaleza corporativa, pidiendo prestado, aún a expresiones «humanas». Si la propiedad personal fuese irrestricta, reflejaría una cultura que dejó de presentar sus respetos al Original, el que precede la emergencia de lo personal, una cultura que entonces habría sucumbido a la oscuridad del caos y aislamiento.
Nuestros archivos muestran que la idea de obtener un registro de copy-right para El libro de Urantia, data del principio de la década de los años 30 , cuando los comisionados de contacto hicieron sus primeras preguntas a la Oficina de Copyright. El Dr. Sadler, el líder de la comisión de contacto, escribió una historia que nunca publicó, pero que compartió con los primeros lectores. En esa historia dice:
«Los comisionados [de contacto] fueron los custodios de los manuscritos de Urantia, conservando las copias de la trascripción mecanografiada en una caja fuerte a prueba de fuego. También les fue encargada la total responsabilidad de supervisar todos los detalles relacionados con la publicación del libro, asegurando los derechos internacionales de copyright, etc.»
A los comisionados de contacto les fue pedido por los reveladores que obtuviesen un copyright sobre El libro de Urantia. La Declaración de Fideicomiso creando la Fundación Urantia, es el documento que define claramente el propósito para el cual fue establecida dicha Fundación y explica los deberes de los fideicomisarios. Es el instrumento por medio del cual la responsabilidad sobre los documentos de Urantia fue pasada de la comisión de contacto a la Fundación Urantia. Entendemos que estos asuntos fueron discutidos con los reveladores ya en los años 30 .
Los fideicomisarios, pasados y presentes, creen firmemente que la creación de la Fundación Urantia, con los deberes e instrucciones entregados por medio de la Declaración de Fideicomiso es consistente con los métodos de nuestros supervisores planetarios y con las pasadas revelaciones trascendentales que han tenido instrucciones definitivas en cuanto a la forma en que debieron ser implementadas, dirigidas y organizadas.
El siguiente es un extracto de la Declaración de Fideicomiso que define los propósitos de la Fundación y las responsabilidades de los fideicomisarios. Este documento estableció el rumbo para la Fundación Urantia y seguirá siendo su carta orgánica:
ARTÍCULO II
OBJETOS
2.1. OBJETO PRINCIPAL: El objeto por el cual se crea esta Fundación es la promoción, mejora y expansión entre los pueblos del mundo del entendimiento y la comprensión de la cosmología y la relación del planeta en que vivimos con el universo, del génesis y el destino del hombre y su relación con Dios, y de las verdaderas enseñanzas de Jesucristo; y para la educación y el fomento de la comprensión y apreciación de la Paternidad de Dios y de la fraternidad del hombre - para así aumentar y realzar la comodidad, felicidad y el bienestar del hombre, como individuo y como miembro de la sociedad, por medio de la promoción de una religión, una filosofía y una cosmología que son equiparables con el desarrollo intelectual y cultural del hombre.
2.2. OBJETOS CONCORDANTES: Los objetos concordantes para los cuales se crea la Fundación son de preservar intacto en perpetuidad el texto de EL LIBRO DE URANTIA y de diseminar los principios, las enseñanzas y las doctrinas de EL LIBRO DE URANTIA.
ARTÍCULO III
DEBERES DE LOS FIDEICOMISARIOS
3.1. PRESERVACIÓN DEL TEXTO DE EL LIBRO DE URANTIA: Será el deber principal de los fideicomisarios de preservar intacto en perpetuidad el texto de EL LIBRO DE URANTIA, y los fideicomisarios emplearán los medios, métodos y facilidades, y aplicarán y gastarán la proporción del patrimonio del fideicomiso que a juicio de los fideicomisarios sea necesaria, propia, o apropiada, para la preservación y custodia de copias del texto original de EL LIBRO DE URANTIA, debidamente autenticadas por los fideicomisarios, de pérdida, daño o destrucción, y de modificación, revisión o cambio de cualquier manera o en cualquier particular.
3.2. REALIZAR EL OBJETO PRINCIPAL: Será el deber de los fideicomisarios de usar y emplear los medios y métodos que de vez en cuando elaborarán, y de desarrollar y aplicar y dedicar el patrimonio del fideicomiso para fomentar y efectuar el propósito general contenido en el párrafo 2.1 .
3.3. PRESERVACIÓN Y CONTROL DE REPRODUCCIÓN DE EL LIBRO DE URANTIA: Será el deber de los fideicomisarios de retener control absoluto e incondicional de las láminas y de otros medios de comunicación para la impresión y reproducción de EL LIBRO DE URANTIA y de cualquier traducción de éste, de hacer o causar que se hagan las láminas y otros medios de comunicación que de vez en cuando se requieran para imprimir y reproducir EL LIBRO DE URANTIA y cualquier traducción de éste, de retener el control absoluto e incondicional de la posesión, la custodia, el uso y la disposición de todas las láminas y otros medios de comunicación para la impresión y reproducción de EL LIBRO DE URANTIA y cualquier traducción de éste, y de aplicar y usar el patrimonio del fideicomiso para este propósito.
3.4. DIFUSIÓN DE LAS ENSEÑANZAS DE EL LIBRO DE URANTIA: Será el deber de los fideicomisarios de difundir las enseñanzas y doctrinas de EL LIBRO DE URANTIA y de elaborar, desarrollar y efectuar medios y métodos para tal difusión, y de aplicar y usar el patrimonio del fideicomiso para el logro de este propósito.
Se nos alienta a través de El libro de Urantia a trabajar juntos en equipo. Se nos dice que el trabajo en equipo y de colaboración mutua, es el método del universo, es el camino de Cristo Miguel, y que la revelación nos es dada con un plan. Cuando los individuos eligen desviarse del plan, cuando el compromiso con las propias opiniones toma precedencia sobre la cooperación y el trabajo en equipo, confusión y caos son inevitables.
Esta pregunta se hace frecuentemente. Es importante diferenciar entre «revelación» y el libro físico, el medio material a través del cual la revelación es entregada.
El libro de Urantia es en sí mismo un objeto físico «una cosa material». En contraste, la quinta revelación trascendental, es una verdad viva, experimentada en el corazón, la mente y el alma de los individuos que abrazan las enseñanzas de El libro de Urantia, y las aplican en la vida cotidiana. No puede haber copyright sobre una verdad, no puede haber copyright sobre un significado. La verdad es una realidad empírica, viviente e intangible. Solamente algo que es material, tal como un libro o un trabajo compuesto, goza de la protección del copyright y es elegible para obtener un registro.
Al poseer un registro de copyright sobre El libro de Urantia, la Fundación se asegura que las palabras sean conservadas invioladas, de tal manera que generaciones futuras, en toda cultura, en toda traducción, puedan tenerlas tal como nos fueran presentadas y no en formas fragmentadas, distorsionadas 0 desmembradas.
El copyright sobre el texto original en inglés de El libro de Urantia es crucial para la difusión de las enseñanzas por todo el mundo a través de traducciones precisas, fidedignas y fluidas. Es muy importante que no distribuyamos múltiples versiones de traducciones en los países en los que no se hable inglés. Sin un copyright sobre El libro de Urantia la gente estaría libre de introducir múltiples traducciones sub-estándar de la totalidad del libro o partes del mismo.
La verdad es una realidad empírica, viviente e intangible. Solamente algo que es material, tal como un libro o un trabajo compuesto, goza de la protección del copyright y es elegible para obtener un registro.
Sería irresponsable e injusto infligir a nuestros hermanos y hermanas que no hablan inglés confusión en sus grupos de estudio, dándoles distintos textos que estudiar.
Todas las oportunidades les son dadas a los lectores para que participen en el mejoramiento y revisión de las traducciones, pero un sistema ordenado es requerido para garantizar que la traducción permanezca fidedigna a la versión inglesa original, y que el libro traducido no esté fracturado o desarmado por las acciones ignorantes de los mortales.
Sabemos que a algunas personas les gustaría cambiar palabras de El libro de Urantia. Por ejemplo:
Tom Kendall, un antiguo fideicomisario y presidente de la Fundación Urantia, dijo lo siguiente:
«No descarten con liviandad la importancia del copyright. Los comisionados de contacto fueron advertidos que el mayor peligro para la revelación estaría entre los primeros 50 a 100 años. Si el copyright se perdiese y el libro fuese a estar en el dominio público, el libro podría ser desmembrado; podría ser cortado en 197 panfletos, partes «embarazosas» extirpadas; «partes dificiles» omitidas; desactualizado material cientifico ser actualizado con nuevas teorías; se podrian insertar expresiones de arte, notas a pie de página; una introducción y comentarios podrian ser incluidos al texto. Versiones simplificadas podrian proliferar. Nada de esto fue intención de los reveladores, y de hecho, algunos fueron especificamente prohibidos. La intención fue que el libro sea un todo integrado, publicado sin invenciones que distraigan.»
Si la Fundación no tuviese e impusiere un copyright, no habría forma alguna de proteger al libro de las acciones anteriormente descritas. La gente estaría libre de distorsionar y desmembrar el texto original antes que tenga oportunidad de tener una presencia significativa en el mundo.
Ninguno de nosotros está calificado para cuestionar los motivos de los reveladores al usar las palabras que usaron. Ninguno de nosotros tiene el derecho de independientemente tomar el curso futuro de la revelación en nuestras propias manos, según nuestras propias ideas y cambiar las palabras del texto, 0 entregarlas en forma parcial 0 desmembrada.
El error de Eva debería servirnos de lección en esta clase de errores:
Pero Eva escuchó la insidiosa propaganda de la libertad personal y la libertad de acción planetaria. Se le indujo a experimentar con el plasma vital de la orden material de la filiación por cuanto permitió que esta encomienda de vida se mezclara prematuramente con la de la orden ya mezclada de la concepción original de los Portadores de Vida…
Jamás en tu ascenso al Paraíso, te ganarás nada intentando impacientemente eludir el designio divino establecido mediante atajos, invenciones personales u otros artificios para facilitar el avance en el camino de la perfección, para la perfección y hacia la perfección eterna. (LU 75:8.4-5)
La Fundación Urantia registró las palabras «URANTIA», «URANTIAN» y el símbolo de los círculos concéntricos como marcas de servicio, comerciales y de membrecía colectiva. Luego que el copyright sobre El libro deUrantia expire, podrán haber muchos editores de El libro de Urantia. Al-gunos podrán publicar algo distinto del texto inviolado. Pero el texto invio-lado publicado por la Fundación Urantia, será identificable porque sólo élllevará el nombre de Fundación Urantia y el símbolo de los círculos concéntricos.
La Fundación Urantia ha usado el símbolo de los círculos concéntricos como una marca registrada desde 1950. Las marcas son usadas para identificar
Si estos símbolos no estuviesen registrados por la Fundación Urantia, o estuviesen en el dominio público, podrían ser usados para dar credibilidad a publicaciones, actividades y organizaciones que promocionen interpretaciones distorsionadas de El libro de Urantia y que incluso tengan poco o nada que ver con sus enseñanzas.
Hoy en el mundo hay un pequeño entendimiento de lo que estos símbolos y palabras significan, por lo que es importante que su significado sea protegido y preservado hasta que exista en una mayor población del mundo una más amplia comprensión de sus enseñanzas.
La Fundación considera que las marcas registradas son apropiadas, y los símbolos se ajustan para identificar la quinta revelación trascendental. Las recientemente anunciadas Normas sobre el copyright y de marcas registradas de la Fundación, les otorga a los individuos la libertad de usar el texto y las marcas en sus esfuerzos de enseñanza y diseminación. Estas normas se pueden obtener en la página web de la Fundación: www.urantia.org y por pedido.
Los fideicomisarios y el personal de la Fundación Urantia se dirigen a ustedes y les piden sus oraciones y apoyo. Estamos acostumbrados a los retos a nuestros esfuerzos para proteger y mantener disponible la quinta revelación epocal al mundo. Sin su ayuda ni la de Dios, no podremos tener éxito. Con su asistencia, no podremos fallar en mantener esta revelación intacta en el próximo siglo para nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos.
Tenemos el agrado de anunciarles que nuevas ediciones de The Urantia Book y de El libro de Urantia están disponibles para su compra desde finales de octubre de 1999. Todas las nuevas ediciones miden 21cm de largo por 14cm de ancho, ligeramente más grandes que las ediciones de tapa blanda actuales. Los libros en inglés están disponibles en una versión de tapas de papel, de cubierta pequeña rígida, y las ediciones de cuero en caja de obsequio. Estas últimas están encuadernadas con un cuero azul o en burgundí con páginas doradas y están embalados en una caja embozada de dos partes.
Las ediciones en español, también miden 21cm de largo 14cm de ancho, están disponibles en una edición de tapas de papel y en una nueva edición de tapas duras.
Todas las nuevas ediciones tendrán un nuevo diseño de cubierta. Esperamos que estas ediciones serán más reconocibles y atraigan más la atención en los anaqueles de las librerías, esperándose que nuevos lectores estén al tanto de sus enseñanzas.
Por favor refiéranse al formulario de pedido para los nuevos precios. Si usted deseara colocar una orden para las ediciones en caja de obsequio (disponible en cantidades limitadas), por favor indique claramente el color de su preferencia en el formulario.
Proyecto de las bibliotecas universitarias — La Fundación Urantia se complace en anunciar que estamos iniciando el proyecto de colocación de libros en las bibliotecas universitarias. Esperamos proveer a cada una de las bibliotecas de las universidades y colleges de todo alrededor del mundo con un libro de tapa dura de la edición en inglés de El libro de Urantia. En el pasado ya hemos desarrollado extensos proyectos para proveer de libros a las bibliotecas públicas alrededor del mundo e incluso a las bibliotecas de todas las prisiones de los Estados Unidos, Australia y Nueva Zelandia.
Esperamos eventualmente proveer con copias complementarias de El Libro de Urantia a todas las más altas instituciones de aprendizaje para incrementar la capacidad de acceso de sus alumnos a tan grandes enseñanzas.
Si usted conociera de alguna biblioteca universitaria que podría beneficiarse con esta contribución, o si, usted podría o le agradaría asistirnos en este o en otros proyectos, por favor tenga la bondad de contactar a nuestro Departamento de Libros.
Ejemplares de referencia de El Libro de Urantia para grupos de estudio y asociaciones locales — La Fundación Urantia le agradaría poner a disposición de los grupos de estudio y de las asociaciones Urantia un ejemplar de referencia de El libro de Urantia en inglés, 11 edición (en tapa dura de 20cm \times 25cm ) y del Urantia Book Concordance.
Muchos grupos han manifestado interés en tener a su dispoción un ejemplar de referencia del Libro para aquellos miembros que no puedan costear el valor de una copia. Además así también tendrían a mano una copia si alguno de los miembros olvidara la suya. Cada grupo también podría ofrecerla a nuevos lectorres o visitantes a sus sesiones de estudio. Las asociaciones Urantia podrían también beneficiarse de este programa, teniendo una copia para préstamo. Cada ejemplar de referencia sería remitida a los grupos a un costo nominal de US \ 12.00 de manera que nos permita cubrir los costos de envío. Para solicitar una copia para su grupo o asociación, o si tuvieran alguna pregunta sobre los nuevos programas, tengan la gentileza de conatactar a nuestro Departamento de Libros.
Feria Internacional del Libro en Buenos Aires, Argentina — La Fundación Urantia tiene el gran placer de comunicarles que entre el 25 y el 29 de abril del presente año participaremos en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, la misma que será atendida por nuestra Directora Ejecutiva Sra. Tonia Baney el Sr. Roberto Solone, ambos de la oficina central de la Fundación Urantia en Chicago, y por los Representantes de la Fundación Urantia Ana Beatriz García de México y Carlos Rubinsky de Argentina, así como por los lectores y amigos de Buenos Aires. Como participantes, estaremos presentando El libro de Urantia a las distribuidoras, librerías y al gran público lector bonaerense.
Primer encuentro de lectores de la Asociación Urantia del Cono Sur — Los días 10 y 11 de junio del presente año se llevará a cabo en la Casa de Ejercicios Ignacio de Loyola, ubicada en Padre Hurtado, Santiago de Chile, el primer encuentro de lectores de El libro de Urantia organizado por la Asociación Urantia del Cono Sur, al cual están cordialmente invitados a participar. La temática estará referida al Padre Universal, la Trinidad del Paraíso y la religión en la experiencia humana. El costo para cada participante será de solo 34.00 dólares el mismo que incluirá el alojamiento y la alimentación.
La Fundación Urantia Inauguró un Foro Escuela Virtual en América Latina — Este espacio ha sido organizado de una manera tal que permite la participación a lectores con diferentes niveles de avance en el estudio de El libro de Urantia, visitelo en http://www.urantialatina.org ahí ustedes podrán inscribirse gratuitamente como alumnos o como moderadores.
«Le expreso que recientemente he consultado el texto de El libro de Urantia, y me he sentido fascinado con el maravilloso sentido y su conocimiento cósmico para el desarrollo de toda la humanidad. Considero realmente que representa un ideal real y muy importante para nuestra civilización que pretende ser moderna y universal.» ~ Cuba
«En un viaje reciente a la capital de mi país me encontré con El libro de Urantia. Fue un descubrimiento que ha cambiado mi vida. Leí los primeros 10 capítulos y quedé absolutamente impresionado y cautivado por las revelaciones manifestadas a través de tan noble manuscrito.» ~ Colombia
«Es muy gratificante estar en contacto contigo por lo menos una vez cada tanto y saber que tienes aquí personas que te apoyarán en todo lo que necesites respecto de la divulgación de esta extraordinaria revelación de Dios.» ~ Uruguay