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LIBRO XXXIII. FÛ WAN O SUJETOS PARA INTERROGAR SOBRE EL VESTIDO DE LUTO[1].
1. El Directorio de Luto dice: «Hay casos en que las partes visten de luto profundo, mientras que quienes, debido a su relación con quienes lo presumen, visten de luto ligero». Tal es el luto que guarda la esposa del hijo de un gobernante (con una concubina) por la madre de su esposo[2].
2. «Hay casos en que las partes visten de luto ligero, mientras que quienes, por su relación con quienes lo presumen, visten de luto profundo». Tal es el luto de un esposo por el padre o la madre de su esposa[3].
3. ‘Hay casos en que las partes visten de luto, mientras que quienes, por su parentesco con el difunto, no lo llevan’. Tal es el caso de la esposa del hijo de un gobernante con las primas de su marido por parte femenina[1:1].
4. Hay casos en que las partes no llevan luto, mientras que quienes, por su relación con el difunto, sí lo llevan. Tal es el caso del hijo de un gobernante con respecto al padre y la madre de su esposa.
5. El Directorio de Luto dice: «Cuando su madre se ha divorciado, el hijo guarda luto por los parientes de la esposa que su padre haya tomado en su lugar». Cuando su madre fallece[2:1] (sin divorciarse), el hijo guarda luto por sus parientes. Aunque guarda luto por los parientes de su madre, no lo hace por los de su madrastra, a quien su padre haya tomado en su lugar.
6. Tras el sacrificio del primer año, durante los ritos de tres años y tras el entierro, durante los de un año (que se celebran simultáneamente), el doliente se pone la faja antigua de tela de dolychos y la diadema del luto de un año, vistiendo simultáneamente el cilicio de luto durante nueve meses.
7. Lo mismo se hace (después del entierro) durante los nueve meses de luto.
8. No se realiza ningún cambio (después del entierro) durante los cinco meses de luto.
9. Donde llevaban la faja con raíces de cáñamo labradas en la tela[1:2], la cambiaron por la tela dolychos de los tres años de luto[2:2].
10. Después del sacrificio al final del año, si se presentaba la ocasión de usar la faja de cáñamo con las raíces cortadas, el doliente se ponía la banda correspondiente junto con el cíngulo superior. Cuando ya no se usaba el cíngulo, se quitaba la banda. Cuando era apropiado usar la banda, la regla era usarla; y cuando la ocasión para ello terminaba, se la quitaba[3:1].
11. Durante el luto de cinco meses, no cambiaban el gorro usado para el sacrificio al final del año. Si era necesario usar el cíngulo, usaban la banda propia del luto de tres o cinco meses, conservando la primera faja de dolychos. El lino de los tres meses de luto no obligaba a cambiar la tela de dolychos de los cinco meses; ni el lino de los cinco meses a cambiar la tela de dolychos de los nueve meses. Donde las raíces estaban entretejidas con la tela, hacían un cambio.
12. En ocasión del duelo por un menor, si este era de grado superior o medio, cambiaban el lienzo de luto de los tres años, poniéndolo al completarse los meses de estos ritos intermedios. Esto se hacía no por el valor asignado al lienzo, sino porque no se hacía ningún cambio al concluir el duelo. No observaban esta regla en caso de fallecimiento de un menor de tercer grado o inferior.
13. El gobernante de un estado guardó luto por el hijo del Cielo durante tres años. Su esposa observó la regla de una dama de la casa de su esposo que había regresado a su casa de luto por el gobernante[1:3].
14. El heredero de un gobernante no llevaba luto por el hijo del Cielo[2:3].
15. Un gobernante actuaba como presidente del duelo en los ritos de duelo por su esposa, su hijo mayor y la esposa de este.
16. El hijo mayor de un gran oficial, con su esposa, vestía el luto de un oficial ordinario por el gobernante, por la esposa del gobernante y por su hijo mayor.
17. Cuando la madre de un gobernante no era la esposa (del gobernante anterior)[3:2], el cuerpo de los ministros no llevaba luto (por su muerte). Solo los oficiales del harén, el auriga y el hombre de armas que se sentaba a la izquierda seguían el ejemplo del gobernante, vistiendo el mismo luto que él.
18. Para un alto ministro o un gran oficial, (durante los ritos de duelo por él), el gobernante vestía en su lugar el lino grueso y glaseado, y también cuando salía (por asuntos no relacionados con los ritos). Si se trataba de asuntos relacionados con ellos, también usaba la cofia y la banda alrededor. Los grandes oficiales se vestían de la misma manera entre sí. En los ritos de duelo por sus esposas, usaban la misma vestimenta cuando iban a asistir a dichos ritos; si salían (por otros asuntos), no la usaban.
19. En todos los casos en que iba a visitar a otros, el visitante (de luto por sus padres) no se quitaba la diadema. Incluso cuando iba a la corte del gobernante, no se la quitaba; solo en la puerta del gobernante (en ciertas circunstancias) se quitaba el cilicio. El Directorio del Luto dice: «Un hombre superior no privará a otros de sus ritos de luto»; por lo tanto, se consideraba incorrecto aplazar este luto.
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