Metatrón es idéntico a Enoc, quien fue trasladado al cielo en el momento del Diluvio
1 R. Ismael dijo: Le pregunté a Metatrón y le dije: «¿Por qué te llaman con el nombre de tu Creador, con setenta nombres? Tú eres mayor que todos los príncipes, más alto que todos los ángeles, más amado que todos los siervos, más honrado que todos los poderosos en realeza, grandeza y gloria: ¿por qué te llaman «Joven» en las alturas?
2 Él respondió y me dijo; «Porque yo soy Enoc, el hijo de Jared.
3 Porque cuando la generación del diluvio pecó y se confundió en sus obras, diciendo a Dios: «Apártate de nosotros, porque no deseamos el conocimiento de tus caminos», entonces el Santo, bendito sea, me sacó de su medio para ser testigo contra ellos en las alturas de los cielos, a todos los habitantes del mundo, para que no digan: «El Misericordioso es cruel».
4 [ADEL:] ¿Qué pecaron todas esas multitudes, sus esposas, sus hijos y sus hijas, sus caballos, sus mulas y su ganado y sus propiedades, y todas las aves del mundo, todas las cuales el Santo, bendito sea? , destruidos del mundo junto con ellos en las aguas del diluvio? Tampoco puede decir: «¿Y si la generación del diluvio pecó? las bestias y las aves, ¿qué habían pecado para perecer con ellas?» [BC:] «¿Qué pecados habían cometido todas esas multitudes? O si pecaron, ¿qué pecaron sus hijos y sus hijas, sus mulas y sus ganados? ¿Y también todos los animales, domésticos y salvajes, y las aves del mundo que Dios destruyó del mundo?»
5 Por lo tanto, el Santo, bendito sea, me levantó durante su vida ante sus ojos para ser un testigo contra ellos en el mundo futuro. Y el Santo, bendito sea, me asignó como príncipe y gobernante entre los ángeles ministradores.
6 En esa hora, tres de los ángeles ministradores, 'uzza, 'azza y 'azzael, vinieron y presentaron acusaciones contra mí en las alturas de los cielos, diciendo ante el Santo, bendito sea: «¿No dijeron los Ancianos (primero Unos) justamente ante Ti: «¡No creéis al hombre!», el Santo, bendito sea, respondió y les dijo: «Yo he hecho y llevaré, sí, llevaré y entregaré».
7 Tan pronto como me vieron, dijeron delante de Él: «¡Señor del universo! ¿Qué es éste que debe ascender a lo alto de las alturas? ¿No es él uno de entre los hijos de [los hijos de] los que perecieron en los días del Diluvio? «¿Qué hace en la Raqia»?
8 Nuevamente el Santo, bendito sea, respondió y les dijo: «¿Qué sois para que entréis y habléis en mi presencia? Me deleito en éste más que en todos vosotros, y por eso será príncipe y gobernante sobre vosotros en las alturas.
9 Inmediatamente todos se levantaron y salieron a mi encuentro, se postraron ante mí y dijeron: «Feliz tú y feliz tu padre porque tu Creador te favorece».
10 Y como soy pequeño y joven entre ellos de días, meses y años, por eso me llaman «Joven» (Na'ar).