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Vivir el evangelio y proclamarlo con poder en el siglo XXI | Journal — Noviembre 2020 — Índice | Comprensión: avanzar en la brillantez desde la visión interior |
(Nota de la redacción: Este artículo se basa en una presentación dada en la Conferencia de la Asociación Urantia Internacional 2018 en los Países Bajos)
Todo el mundo conoce la futilidad de predicar sobre lo que es deseable, pero la impotencia general en esta situación es tan grande y la necesidad tan grave que preferimos repetir el viejo error en lugar de devanarnos los sesos con un problema subjetivo. Además, siempre se trata de tratar a un solo individuo y no a diez mil, en el que el problema tendría ostensiblemente resultados más impresionantes, aunque sabemos bastante bien que nada ha ocurrido a menos que el individuo cambie.
El efecto sobre todos los individuos que nos gustaría ver materializado puede no establecerse en cientos de años, ya que la transformación espiritual de la humanidad sigue la lenta trayectoria de los siglos y no puede ser apresurada ni impuesta por ningún proceso racional de reflexión, por no hablar de llevarla a buen término en una generación. -Carl Gustav Jung, The Undiscovered Self, 1958
El psiquiatra suizo y padre de la psicología analítica, Carl Jung, nos recuerda que el mundo necesita menos predicadores y mejores maestros.
Los estudiantes de El libro de Urantia saben también que la masa de la humanidad progresa una persona a la vez, no enseñándoles en masa sino a medida que están listos para crecer.
Los jóvenes no suelen ser habilidosos a la hora de enseñar toda la verdad que han adquirido pero que aún no han vivido.
Mi experiencia al encontrarme con El libro de Urantia en Canadá es un ejemplo de ello. Podría haber evitado más dolor si hubiera entendido que incluso las buenas palabras pueden caer en oídos sordos, especialmente cuando la experiencia no está ahí para respaldarlas.
Por supuesto, mi entusiasmo por la nueva verdad me había puesto en modo trampa para osos, listo para atrapar a cualquier blanco insospechado que proyectara el menor interés en las cosas espirituales. Esto sería como mover a la reina del tablero de ajedrez en los primeros movimientos o patear el balón de fútbol hacia la meta desde el otro extremo del campo. Las «soluciones» instantáneas rara vez tienen éxito.
Enseñar no es predicar. Reconocemos la diferencia fácilmente. En lo segundo se nos dice lo que es cierto en virtud de una supuesta autoridad. En lo primero, en su mejor forma, se nos presenta la oportunidad de aprender a través de la autoridad de la experiencia, mejor aún, de nuestra propia experiencia, y por lo tanto nos convertimos en autores de nuestra propia vida.
¿Fuiste uno de los pocos privilegiados que experimentó al menos una vez en la vida a un maestro magistral? ¿Qué hizo que sintieras admiración por ese maestro? ¿Qué palabras y acciones de ese maestro llevas adelante día a día? ¿Qué hizo que su enseñanza fuera memorable, vivible, digna de emular?
Consideremos que gran parte del amor de Miguel de Nebadón por ti se manifiesta como enseñanza. ¿Por qué la docencia magistral de Jesús resuena en nosotros? En comunión adoradora con su Padre celestial, ¿no estaba siempre hablando de sus problemas? El comportamiento de Jesús nos ha concedido el privilegio de presenciar en El libro de Urantia el nacimiento de la vida humana y la vida religiosa solo porque el crecimiento del carácter de Jesús nunca se vio obstaculizado por una voluntad egocéntrica.
En su vida exterior, Jesús prestó gran atención al mundo en que vivía y a su pueblo. Desarrolló una maestría en cada tarea que emprendió para poder ser más capaz de servir. Gracias a esas habilidades y a la adquisición del carácter se estableció su credibilidad para quienes la evaluaron con honradez.
La revelación de que la comunión ininterrumpida de Jesús le llevó a progresar sin cesar en hacer la voluntad del Padre del cielo es una llave de oro para vivir la vida. Cultivamos nuestras almas compartiendo nuestra vida interior con Dios como hizo Jesús. El Maestro sabía que vivir en presencia de Dios con fe es vivir presente en la realidad. Solo nos damos cuenta de que estamos viviendo en la presencia de nuestro Padre si actuamos como si estuviéramos en presencia de Dios.
Hacer la voluntad de Dios es ni más ni menos que una manifestación de la buena voluntad de la criatura por compartir su vida interior con Dios… [LU 111:5.1] … e imitar a Dios es la clave de la perfección … [LU 111:5.2]
A diferencia del Maestro, debido a las relaciones con nuestro Padre Divino, rotas muchas veces de manera involuntaria y a veces deliberada, nos deben mostrar lo que nos estamos perdiendo si vivimos temporalmente en el aislamiento espiritual que sigue.
… a veces vuestros desengaños más decepcionantes se han convertido en vuestras mayores bendiciones. Cuando se planta una semilla, a veces se necesita que muera, que mueran vuestras esperanzas más apreciadas, antes de que pueda renacer para producir los frutos de una vida nueva y de nuevas oportunidades. [LU 48:6.36]
La vida del Maestro ilustra ampliamente que, si bien hacer la voluntad de Dios en la vida humana conduce a la alegría, también conduce a más desilusiones del tipo correcto; las que se vuelven instructivas, que llevan a las soluciones más creativas a los obstáculos que encontramos al tratar de vivir una buena vida.
Josué ben José pasó por sus numerosas pruebas en presencia de Dios. Su moralidaddinámica se centró en la apreciación positiva de la voluntad de su Padre. Su adaptación a cada nueva oportunidad de servicio o problema aumentó la sabiduría derivada de la experiencia de la vida exterior que llevó a su vida interior. Para enseñarle eso a los demás, debemos esforzarnos por alcanzar ese mismo equilibrio creativo entre la adoración y el servicio en la vida.
¿No tendremos también un mayor efecto en cada persona con la que cultivamos una relación personal, una amistad de conocimiento recíproco creciente y amor hacia el otro? Jesús permitió que su influencia se desarrollara a través de la amistad de un maestro con sus estudiantes bien dispuestos, ya fueran apóstoles o recaudadores de impuestos.
¿Podemos tomar el enfoque de Jesús en la enseñanza y la predicación y aplicarlo a nuestras circunstancias actuales? Nos dicen que:
… en el momento de su nacimiento, Urantia estaba pasando por una reactivación del pensamiento espiritual y de la vida religiosa como no se había conocido en toda su historia anterior desde Adán, ni se ha repetido en ninguna época posterior. [LU 121:1.1]
En nuestro mundo, pocos recibirán el mensaje del evangelio de Jesús de cualquier manera directa. Cómo atraer a la gente a la verdad viva es el problema que cada cultura debe resolver, pues es diferente en cada sociedad. Lo que funciona en una no tiene por qué funcionar en otra. Si nuestro mundo va a…
…ver a Jesús viviendo de nuevo en la Tierra en la experiencia de los mortales nacidos del espíritu que revelan el Maestro eficazmente a todos los hombres. [LU 195:10.1]
entonces mujeres y hombres deben estar decididos a experimentar la condición humana como él lo hizo.
Dejadme expresar enérgicamente esta verdad eterna: Si gracias a vuestra coordinación con la verdad, aprendéis a manifestar en vuestra vida esta hermosa integridad de la rectitud, entonces vuestros semejantes os buscarán para conseguir lo que habéis adquirido así. La cantidad de buscadores de la verdad que se sentirán atraídos hacia vosotros representa la medida de vuestra dotación de la verdad, de vuestra rectitud. La cantidad de mensaje que tenéis que llevar a la gente es, en cierto modo, la medida de vuestro fracaso en vivir la vida plena o recta, la vida coordinada con la verdad. [LU 155:1.5]
Sean cuales sean los pasos que des para alcanzar todo su potencial de servicio humano, el siguiente paso está delante de ti. ¿No nos los están mostrando continuamente, si tuviéramos ojos para ver? ¿No podríamos ser los únicos que marquen la diferencia necesaria en nuestra pequeña parte de este desordenado mundo? Si no eres tú, ¿quién?
¡Se necesitan maestros verdaderos y buenos!
(Consideremos que esta revelación necesita maestros y líderes y que la naciente Escuela de El libro de Urantia en Internet, el Urantia University Institute y el International Center for Urantia Studies tienen interés en los estudiantes y en quiénes les enseñarían).
Los que nos guiarían de manera paciente y personal son escasos en comparación con los que esperan que aceptemos lo que digan sin condiciones o sin ningún tipo de reflexión crítica. Si bien los grandes maestros deben ser capacitados y enseñar para adquirir la experiencia necesaria a fin de lograr el dominio, también deben crecer_, en asociación con Dios, de dentro a fuera._ Jung entendió la naturaleza inconsciente de ese crecimiento personal y su sutil influencia en los demás:
Lo que sí está a nuestro alcance, sin embargo, es el cambio en los individuos que tienen, o crean, una oportunidad para influir a otros de mentalidad parecida en su círculo de conocidos. No me refiero a persuadir o predicar, más bien pienso en el hecho bien conocido de que cualquiera que comprenda profundamente sus propias acciones y por lo tanto haya encontrado acceso al inconsciente ejerce una influencia involuntaria en su entorno. … Es una influencia no intencional en el inconsciente de los demás, una especie de prestigio inconsciente, y su efecto dura solo mientras no sea perturbado por la intención consciente.
Carl Jung, The Undiscovered Self
Yuxtapuesto a nuestra revelación:
La dulzura es el aroma de la amistad que emana de un alma saturada de amor. [LU 171:7.1]
Nuestro amor por Dios y el deseo compasivo de servir y enseñar a nuestros hermanos y hermanas se sumergirán en las profundidades de nuestra creatividad única, dada por Dios. El estimulante desafío de tratar de entender y amar a nuestros compañeros es un impulso al servicio magistral de la humanidad. Empieza agarrando la mano fuerte y cariñosa de nuestro Padre y dando un paso más hacia lo siguiente que hay que hacer. ¿Quién sabe a dónde llevará?
Uno de los miembros originales del Foro, Clyde Bedell, tenía un simple dicho: «Las grandes cosas empiezan siendo pequeñas».
No hay más que ver los campos que hay fuera de esta sala para ver el éxito de la primera plantación de tulipanes de Carolus Clusius en Leiden hace 425 años, o el interior de estas paredes para ver los resultados de la traducción al holandés de Henry, Bauk y Nienke Begemann, Het Urantia Boek, hace más de cincuenta años. ¿Quién hubiera podido imaginar en aquel entonces estos frutos, esta conferencia inspiradora?
Las buenas y abundantes cosechas resultan de las elecciones buenas y simples que perseguimos con cariño.
¿Qué dará comienzo a partir de tu siguiente paso?
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