Este texto representa un resumen de las orientaciones u observaciones formuladas por los reveladores en beneficio de los miembros del Foro, que Christie transmitió meticulosamente a los miembros de la Fraternidad Urantia. Curiosamente, varias de estas declaraciones también aparecen en los Términos de Referencia de la Publicación. Siguen siendo relevantes en nuestros tiempos y sería prudente tenerlos en cuenta.
Por E. L. (Christy) Christensen
27 de enero de 1963
De todos los cuerpos de emergencia mortales seleccionados en Urantia, ninguno tiene una obligación más solemne que vuestro grupo.
Vosotros que escucháis este mensaje sois los hombres y mujeres que habéis sido llamados a dar los primeros pasos para ofrecer nueva luz a una iglesia frustrada y a un mundo distraído. Sois la sal de la revelación de Urantia, la primera luz que ilumina el camino hacia la liberación del caos, la confusión y la oscuridad del actual dilema planetario.
Como urantianos individuales, cada uno de ustedes tiene su papel que desempeñar en la reorganización inmediata de la sociedad humana. Como grupo os corresponde una gran y única responsabilidad: la custodia, salvaguardia y difusión del Libro de Urantia.
Alabo vuestra lealtad, pero me sorprende un poco vuestra relativa indiferencia ante la importancia de la misión que se ha confiado a vuestras manos. Le recomiendo que esté siempre atento a la importancia de la extraordinaria confianza que se ha depositado en usted.
Tú que has dedicado tu vida al servicio de la revelación Urantia y a la hermandad de hombres de Urantia que de ella resulta, apenas te das cuenta de la importancia de tu acto. Viviréis y moriréis sin daros cuenta plenamente de que estáis participando en el nacimiento de una nueva era de religión en Urantia.
Sois un grupo de pioneros; sois precursores.
Y que todos vosotros os convirtáis en valientes soldados de los círculos, alistados de todo corazón en las fuertes filas de los mortales que se lanzarán a esta próxima batalla por la verdad contra el error, bajo el liderazgo inquebrantable de los poderosos serafines del progreso.
Una de las primeras lecciones que debes aprender es la confiabilidad: la capacidad de confidencialidad. La capacidad de llevarse secretos, si es necesario, a la tumba. Jesús reprendió muchas veces a sus apóstoles: «Tengan cuidado de no decírselo a nadie.»
Vuestra responsabilidad es absorber las verdades fragantes de esta revelación hasta el punto de que todos los que entren en contacto con vosotros se sientan amantes de la verdad y exploradores espirituales, que sois ciudadanos cósmicos comprometidos en aventuras fascinantes en la búsqueda de ella. Dios y dedicado a la pasión suprema de cumplir Su divina voluntad.
Estáis llamados a una gran obra y tenéis el privilegio trascendental de presentar esta revelación a la gente de nuestro mundo desgarrado por los conflictos.
El buen humor y la sonrisa de felicidad se encuentran entre los activos humanos más poderosos e influyentes de la propagación religiosa.
Las enseñanzas del Maestro algún día prevalecerán. La hermandad del hombre algún día comenzará. En nuestro futuro esfuerzo por salvar a Estados Unidos, estoy seguro de que ven el lugar para El Libro de Urantia.
La religión puede impregnar los cuatro niveles de la comprensión de los valores y del disfrute de la fraternidad universal: el nivel físico o material de la preservación de sí mismo; el nivel social o emocional de la fraternidad; el nivel moral de la razón o del deber; y el nivel espiritual de la conciencia de la fraternidad universal mediante la adoración divina. (LU 5:5.2)
Y como esta fraternidad es universal, es una relación de totalidad. Cuando la fraternidad es universal, no revela la relación con cadauno, sino la relación con todos. (LU 12:7.10)