© 2016 Ginés Avilés y José Manuel Duarte
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La carrera de ascensión a vista de pájaro | Luz y Vida — Núm. 44 — Junio 2016 — Índice | La supervivencia de la personalidad |
de Ginés Aviles
Defino ayudas internas como las formas de contacto con el Espíritu en la mente, y como tales las encuadro en la carrera de ascensión. Llegar al Padre requiere querer ser como el Padre o, lo que es lo mismo, cumplir Su voluntad. Y para ser como Él y realizar esa voluntad en la Tierra, considero que tanto las ayudas internas como el servicio al prójimo en sentido amplio resultan complementarios y esenciales. Como bien dice El Libro de Urantia, es una combinación de ejercicio espiritual con las ayudas internas y de alimento espiritual con el servicio.
Especialmente, son determinantes para el cumplimiento de nuestra misión, no ya en la eternidad sino en este planeta de Urantia. Aquí, tener conciencia de Dios en la mente y alcanzar la fusión con el Ajustador son las metas alcanzables dentro de nuestra carrera al Paraíso. Se trata de ayudarnos de ellas para aumentar nuestra consciencia hasta tocar la superconsciencia donde reside el Ajustador y descubrirlo.
Como el lector ya habrá podido imaginar, por ayudas internas entendemos aquí la oración, la meditación y la adoración, y no hablamos de otras formas de contacto que, pasando en la tradición por lo mismo, no lo son. Como ejemplo podemos citar la meditación mística o los bailes desenfrenados practicados aún hoy día en varias culturas, que nos llevan más bien a bajar de la consciencia a la subconsciencia, en vez de elevarnos hacia el Ajustador que habita en la superconsciencia.
He clasificado dichas formas de contacto en función de su calidad, atendiendo claro está a citas de El Libro de Urantia. En este «ranking» hacia la conciencia de Dios, la adoración resurge como la manera de contacto espiritual de mayor calidad y por ende, aquellas formas de oración y de meditación que incluyan las características de la adoración son mejores o más ideales como el propio libro las refiere.
La adoración se entiende como una especie de admiración exaltada y puede ser referida tanto al mismo Dios como a sus valores o características divinas. Nuestra distancia del Padre es tan grande que la adoración es igual de válida si es dirigida a nuestro querido Jesús. Creo, además, que reconocer y admirar esos mismos valores divinos en nuestros hermanos también produce de manera segura las mismas consecuencias. Y eso es lo importante, no tanto lo que significa adorar, sino más bien qué efecto produce en la persona que adora. El adorador por medio de esta técnica se transforma más y más en la persona a la que adora o adquiere para sí la cualidad divina que adora transformando su ser.
Adoración
DEFINICIONES:
- Adorar = Admirar, poner en alta estima o grado alyún valor/-es divinos de Dios o Jesús LU 143:7.3 LU 143:7.7 LU 143:7.8
- Reacción natural y espontanea ante el reconocimiento de la personalidad del Padre y de su naturaleza de amor y sus atributos dignos de veneración. LU 5:3.3
- Perseguir los valores divinos y amar al Dador de esos Valores LU 16:8.14
- Contemplación de lo espiritual LU 143:7.3
Esta técnica hace posible la religión del espíritu que Jesús nos enseña, donde lo importante es Ser frente a la religión tradicional o de la mente donde, independientemente de cómo uno sea, lo importante es Hacer. El dinamismo intelectual frente al asentamiento intelectual, las cadenas a las que se refería Jesús.
Adoración:
¿qué pasa cuando adoramos?
- Al adorar ponemos en alto valor una o varias características divinas y eso nos induce naturalmente, consciente o inconscientemente, a transformarnos a nosotros mismos como personas más cercanas a ese ideal, a identificarnos a nosotros mismos con ello. LU 143:7.5; LU 143:7.6; LU 92:0.4; LU 5:4.5 LU 36:5.17 LU 160:5.3; LU 91:5.1; LU 196:3.22; LU 102:4.5; LU 146:2.17 Jesús enseñó que la adoración hace al adorador cada vez más semejante al ser que adora ( FE ??)
- Capacidad distintiva respecto animales, de ser un corredor de la
- Evita el male impide el pecado + Acción salvadora de los peligros del materialismo
Adoración
Otras notas
- Libre albedrío: nada nos impide adorar y realizarde alguna forma los ideales divinos
- Pto de inicio antes de adorar: relajación + cualquier otro contacto con el espiritu LU 103:4.1; LU 160:3.1
- La iniquidad corta esta y otras formas de contacto con el espíritu LU 146:2.2
- Cuanto más y mejor lo conocemos a Él, más calidad tiene la adoración LU 27:7.1; LU 144:3.23
- Visión Amplia: Adoramos a Dios cuando hacemos su Voluntad LU 131:5.3; LU 131:10.5
Hay otras formas de contacto con el espíritu en la mente relacionadas con la adoración. En primer lugar, la oración de acción de gracias es presentada como la oración ideal u otra forma de adoración, igualándola con ésta. Y por último, tenemos la meditación reflexiva adoradora.
Rodán de Alejandría hace en el documento 160 una reflexión sobre las mejores técnicas para resolver los problemas del vivir. Por su propio razonamiento expone su técnica de resolución pero luego deriva otra, complementaria con la primera, de la observación de la actuación del Maestro Jesús: la meditación reflexiva adoradora.
Con un cuerpo normal y una salud razonablemente buena y ayudándonos de un poco de reposo o relajación (para aumentar nuestra receptividad de lo espiritual) podemos comenzar a realizar una encuesta solitaria de los problemas del vivir. Una vez obtenido el análisis del problema, nos disponemos a buscarle una solución, y esa solución es más ideal cuánto más de los ideales divinos apliquemos sobre ella. Es decir, buscamos solucionar el problema tal y como es voluntad de Dios.
Atendiendo a una cita de El Libro de Urantia, estas técnicas (la adoración, la oración de acción de gracias y la meditación reflexiva adoradora) deberían convertirse en hábitos que van a impulsar el crecimiento de la consciencia más y más hacia la superconsciencia donde, como hemos comentado, habita nuestro Ajustador para tener consciencia de Dios.
He aquí algunas citas de donde las ideas han sido obtenidas, así como las búsquedas de términos en inglés realizadas en el texto de El Libro de Urantia.
Oración de Acción de Gracias
- La oración de acción de gracias es igual a la adoración. LU 131:1.8
- La adoración es el rezo ideal. LU 144:2.2
Meditación Reflexiva Adoradora
- Necesitamos un cuerpo normal y una salud razonablemente buena
- Reposo o relajación (determina la capacidad de receptividad espiritual)
- Mejor a solas LU 160:1.10 LU 160:3.1
- Meditación pone en contacto mente con espiritu. (Sensación de contacto íntimo y de paz mental)
- Dirección u Objetivo
- Meditación Reflexiva=encuesta solitaria de los problemas del vivir
- Meditación Reflexiva y más allá Adoradora. En mi opinión resolver los conflictos en la base de adorar (=realizar) a Dios o las características que lo definen (valores divinos = atracciones que despierten las durmientes fuerzas espirituales del hombre)
- Hacerla un hábito de crecimiento espiritual (junto con la devoción religiosa) LU 100:1.8
En conclusión, el objetivo general de la presentación fue resaltar algunas guías que nos da el libro y que nos sirven para crecer y avanzar en la carrera ascendente, nuestra auténtica misión y objetivo espiritual en la eternidad. Pero advertencia a navengantes: No puede haber paz en el corazón ni progreso en la mente, a menos que os enamoréis de todo corazón de la verdad, de los ideales de las realidades eternas (LU 157:2.2). El amor a la Verdad es la energía que nos lleva hacia el Padre, ¿amamos suficientemente la Verdad para realizar este gratificante pero tortuoso camino?
de José Manual Duarte
A lo largo de la carrera ascendente de los mortales evolutivos se disponen de numerosas ayudas físicas y materiales, como por ejemplo las situaciones que dan origen a las inevitabilidades o el mismo Libro de Urantia. De igual manera, otras ayudas benefician al conjunto de la humanidad porque hacen progresar la civilización, como el mejoramiento biológico originado por las luchas tribales y raciales del hombre primitivo que eliminaban los linajes anormales y defectuosos.
Sin embargo, cuando nos referimos a las ayudas materiales en la carrera de ascensión lo más destacable es el sistema educativo. Fomentar el programa de la progresión de los mortales parece ser una de las ocupaciones principales del actual universo organizado, y la mayoría de las innumerables órdenes de inteligencias creadas están ocupadas, directa o indirectamente, en hacer avanzar alguna fase de este plan progresivo de perfección.
Todo el universo es una inmensa escuela destinada a formar la mente y a educar el espíritu de las criaturas ascendentes. La mente y el espíritu reciben oportunidades semejantes para formarse y avanzar. Los universos del espacio son como enormes escuelas formativas, unas escuelas donde los peregrinos del tiempo avanzan de vida en vida y de mundo en mundo, hasta que son enviados con amor desde las fronteras de su universo de origen hacia el régimen educativo superior del superuniverso, y desde allí hacia los mundos de formación espiritual de Havona, y finalmente hacia el Paraíso y el elevado destino de los finalitarios - la asignación eterna a misiones aún no reveladas a los universos del tiempo y del espacio.
Esta formación de la mente y esta educación del espíritu se llevan a cabo desde los mundos de origen humano, pasando por los mundos de las mansiones del sistema y las otras esferas de progreso asociadas a Jerusem, hasta los setenta reinos de vida social vinculados a Edentia y las cuatrocientas noventa esferas de progreso espiritual que rodean a Salvington.
La piedra angular de todo el sistema educativo es la adquisición del carácter mediante una experiencia iluminada. Los educadores aportan la iluminación; el lugar que se ocupa en el universo y el estatus del ascendente proporcionan la oportunidad de experimentar; la sabia utilización de estos dos factores acrecienta el carácter.
El plan de educación divino asegura la íntima asociación entre el trabajo y la enseñanza. Se nos encarga una tarea determinada a realizar, y al mismo tiempo se nos proporcionan los educadores cualificados para enseñarnos el mejor método de ejecutar nuestro trabajo
Existe un propósito determinado y divino en todo este programa morontial, y posteriormente espiritual, para la progresión de los mortales, en esta detallada escuela de formación universal para las criaturas ascendentes.
En los mundos evolutivos destacan las escuelas del Príncipe Planetario y las del jardín del Edén. Las primeras se ocupan principalmente de la filosofía, la religión, la moral y las realizaciones intelectuales y artísticas superiores.
Las escuelas del jardín de Adán y Eva se dedican habitualmente a las artes prácticas, la formación intelectual básica, la cultura social, el desarrollo económico, las relaciones comerciales, la eficacia física y el gobierno civil.
Con la llegada del Príncipe Planetario, su estado mayor corpóreo organiza las escuelas planetarias de formación y de cultura, donde se instruye a la flor y nata de las razas evolutivas, y luego se les envía para que enseñen estas mejores costumbres a sus pueblos. Estas escuelas del Príncipe están situadas en la sede material del planeta.
El tiempo está dividido casi por igual entre las ocupaciones siguientes:
Por su parte, los Jardines del Edén son magníficos centros culturales que funcionan como modelos sociales de conducta y de costumbres planetarias. Sus escuelas reciben a los candidatos apropiados procedentes de las razas del mundo, mientras que los desarrollos industriales del jardín abren nuevos canales de relaciones comerciales.
Así es como los Adanes y las Evas y su progenie contribuyen a la expansión repentina de la cultura y al rápido mejoramiento de las razas evolutivas de sus mundos. La amalgamación de las razas evolutivas con los hijos de Adán acrecienta y sella todas estas relaciones, teniendo como resultado el mejoramiento inmediato del estado biológico, la estimulación del potencial intelectual y el aumento de la receptividad espiritual.
En los mundos normales, la sede jardín de la raza violeta se convierte en el segundo centro de la cultura mundial y, junto con la ciudad sede del Príncipe Planetario, marca la pauta del desarrollo de la civilización. Las escuelas de la ciudad sede del Príncipe Planetario y las escuelas del jardín de Adán y Eva son contemporáneas durante siglos. Generalmente no están muy alejadas, y trabajan juntas en una cooperación armoniosa. Estos centros mundiales se amalgaman finalmente, pero esta asociación efectiva a veces no se produce hasta la época del primer Hijo Magistral.
Aquellas cosas que podríamos haber aprendido en la Tierra, pero que no logramos aprender, deben ser adquiridas en las escuelas de la vida morontial. En los mundos de las mansiones los supervivientes mortales resucitados reanudan la educación intelectual y el desarrollo espiritual en el nivel exacto en que fue interrumpido cuando les sorprendió la muerte.
Las escuelas están organizadas en los mundos de las mansiones en tres grupos generales de cien divisiones cada uno: las escuelas de pensamiento, las escuelas de sentimiento y las escuelas de acción. Cuando llegamos a la constelación se añaden las escuelas de ética, las escuelas de administración y las escuelas de adaptación social. En los mundos sede del universo entramos en las escuelas de filosofía, de divinidad y de espiritualidad pura.
Uno de los objetivos de la carrera morontial consiste en erradicar de manera permanente en los supervivientes mortales aquellas características rudimentarias animales tales como la postergación, la ambigüedad, la falta de sinceridad, el eludir los problemas, la injusticia y la búsqueda de la facilidad.
Ningún mortal ascendente puede eludir la experiencia de criar hijos - los suyos o los de otros - ya sea en los mundos materiales, o bien posteriormente en el mundo finalitario o en Jerusem. Los padres deben pasar por esta experiencia esencial tan ciertamente como las madres. La relación entre padres e hijos es fundamental para comprender el concepto esencial del Padre Universal y sus hijos del universo. Por eso esta experiencia es indispensable en la formación experiencial de todos los ascendentes.
Los Melquisedeks son los directores de ese numeroso cuerpo de instructores - criaturas volitivas y otras, parcialmente espiritualizadas - que ejercen su actividad de manera tan aceptable en Jerusem y en sus mundos asociados, pero especialmente en los siete mundos de las mansiones.
En el mundo de las mansiones número uno casi toda la experiencia está relacionada con la corrección de las deficiencias. Los supervivientes que llegan a esta primera esfera de detención presentan tantos y tan variados defectos en su carácter como criaturas, y tantas deficiencias en su experiencia humana, que las actividades principales del reino consisten en corregir y curar estos múltiples legados de la vida en la carne. Se compensan las deficiencias biológicas. Los defectos de la experiencia planetaria relacionados con la vida sexual, la asociación familiar y la función parental son corregidos, o bien se hacen proyectos para su rectificación futura dentro de las familias de los Hijos materiales en Jerusem.
En el mundo de las mansiones número dos empiezan a funcionar los grupos de trabajo y las organizaciones sociales, y se asegura la eliminación de todos los conflictos intelectuales y la curación de la falta de armonía mental. Se continúa con el esfuerzo por dominar el significado de la mota morontial.
La tercera mansonia es un mundo de grandes logros personales y sociales y empieza un trabajo educativo más positivo, en contraste con la formación de los dos primeros mundos, que es más negativa en el sentido de compensar deficiencias, completar la experiencia de la vida en la carne. Los supervivientes empiezan realmente su cultura morontial progresiva.
El propósito principal de esta educación consiste en aumentar la comprensión de la correlación entre la mota morontial y la lógica de los mortales, la coordinación de la mota morontial con la filosofía humana. Los mortales llegan a comprender bien en la práctica la verdadera metafísica. Es la introducción a la comprensión de los significados cósmicos y de las interrelaciones universales.
En la cuarta mansonia, el ascendente individual encuentra más apropiadamente su lugar en el trabajo de grupo y en las actividades de clase de la vida morontial. Los ascendentes desarrollan aquí una mayor apreciación de las transmisiones y de otras fases de la cultura y del progreso del universo local. Los mortales ascendentes son iniciados realmente por primera vez en las exigencias y los encantos de la verdadera vida social de las criaturas morontiales, que no están basadas ni en el engrandecimiento personal ni en la conquista egoísta. El nuevo orden social está basado en la simpatía comprensiva del aprecio mutuo, el amor desinteresado de servirse mutuamente y la motivación dominante de llevar a cabo un destino común y supremo - la meta paradisiaca de la perfección adoradora y divina.
El quinto mundo de las mansiones representa un enorme paso hacia adelante en la vida de un progresor morontial, una verdadera anticipación de la vida en Jerusem. Una vez dominado el idioma del universo local antes de dejar el cuarto mundo de las mansiones, ahora se dedica más tiempo a perfeccionar la lengua de Uversa, hasta ser bilingüe cuando se alcanza la ciudadanía de Jerusem, y hasta Havona.
En el sexto mundo mansión se reciben las primeras lecciones relacionadas con la carrera espiritual futura que empieza inmediatamente después de graduarse en la educación morontial del universo local. Empieza la instrucción inicial en la técnica de la administración del universo. Ahora se imparten las primeras lecciones que abarcan los asuntos de un universo entero. Es una era brillante para los mortales ascendentes, la cual presencia generalmente la fusión perfecta entre la mente humana y el Ajustador divino. Esta fusión puede haberse producido en potencia anteriormente, pero muchas veces la identidad válida real no se consigue hasta el momento en que se reside en el quinto mundo de las mansiones o incluso en el sexto.
En el séptimo mundo recibiremos la enseñanza de muchos educadores, y todos cooperarán en la tarea de prepararnos para residir en Jerusem. Los últimos restos de la «marca de la bestia» son erradicados aquí.
Llegados a Jerusem las actividades son de tres tipos distintos: trabajo, progreso y entretenimiento. Dicho de otra manera: servicio, estudio y distracción. Las actividades compuestas consisten en relaciones sociales, diversiones colectivas y adoración divina. El hecho de mezclarse con grupos distintos de personalidades, con órdenes muy diferentes a la de uno mismo, tiene un gran valor educativo.
Los supervivientes mortales pasan una gran parte de su tiempo libre en la capital del sistema observando y estudiando los hábitos de vida y la conducta de los Hijos e Hijas Materiales. Todos los supervivientes mortales que no han experimentado la paternidad en los mundos evolutivos deben adquirir esta formación necesaria mientras residen en los hogares de los Hijos Materiales de Jerusem como asociados parentales de estos magníficos padres y madres. Esto es así, salvo en la medida en que dichos mortales hayan sido capaces de compensar sus deficiencias en la guardería infantil del sistema, situada en el primer mundo de cultura de transición de Jerusem.
Los Hijos Melquisedeks dirigen más de treinta centros educativos diferentes en Jerusem. Estas escuelas formativas empiezan con el colegio de la autoevaluación y terminan con las escuelas de la ciudadanía en Jerusem, donde los Hijos y las Hijas Materiales se unen a los Melquisedeks y a otros seres en su esfuerzo supremo por capacitar a los supervivientes mortales para que asuman las altas responsabilidades del gobierno representativo. Todo el universo está organizado y administrado en el plano representativo. Entre los seres no perfectos, el gobierno representativo es el ideal divino del gobierno autónomo. Todos los representantes u otros delegados son elegidos por el consejo de los mil electores, y deben ser diplomados de la escuela superior del Colegio de Administración Melquisedek.
Bajo la supervisión de los Melquisedeks, los Hijos Materiales se encargan de los mortales ascendentes, especialmente de aquellos que son lentos en unificar su personalidad en los nuevos niveles morontiales, y les proporcionan una formación intensiva destinada a rectificar dichas deficiencias. Ningún mortal ascendente deja la sede del sistema para emprender la carrera más extensa y variada de adaptación a la vida social en la constelación hasta que estos Hijos Materiales no han certificado los logros conseguidos en mota por su personalidad - una individualidad que combina la existencia humana consumada en asociación experiencial con la carrera morontial en ciernes, y las dos están debidamente armonizadas gracias al supercontrol espiritual del Ajustador del Pensamiento.
Los Melquisedeks también mantienen dos colegios especiales en Edentia. Uno, la escuela de urgencia, se consagra al estudio de los problemas derivados de la rebelión de Satania. Y el otro, la escuela de la donación, se dedica a dominar los nuevos problemas resultantes del hecho de que Miguel efectuó su donación final en uno de los mundos de Norlatiadek. Este último colegio se estableció hace casi cuarenta mil años, inmediatamente después de que Miguel anunciara que Urantia había sido elegida como mundo para su donación final.
Los univitatias, que son los ciudadanos permanentes de Edentia y de sus mundos asociados, presiden las escuelas educativas y culturales especiales de adaptación progresiva, ocupacional o práctica, a la vida social en uno de los diez satélites que giran alrededor de cada uno de los mundos principales de Edentia. Estos setecientos mundos menores son esferas técnicas de educación práctica en el funcionamiento de todo el universo local, y están abiertas a todas las clases de seres inteligentes. Estas escuelas donde se enseñan habilidades especiales y conocimientos técnicos no están organizadas exclusivamente para los mortales ascendentes, aunque los estudiantes morontiales constituyen con mucho el grupo más numeroso de todos los que asisten a estos cursos de formación.
Nuestra estancia en Edentia y en sus esferas asociadas se dedicará principalmente a dominar la ética colectiva, el secreto de las relaciones agradables y beneficiosas entre las diversas órdenes universales y superuniversales de personalidades inteligentes. En los mundos de las mansiones terminamos de unificar la personalidad humana en evolución; en la capital del sistema alcanzamos la ciudadanía de Jerusem y consentimos en someter nuestro yo a las disciplinas de las actividades colectivas y de las empresas coordinadas; pero ahora, en los mundos formativos de la constelación, tenemos que conseguir hacer realmente sociable nuestra personalidad morontial evolutiva. Esta adquisición cultural celestial consiste en aprender a:
Los Melquisedeks ocupan un mundo propio cerca de Salvington, la sede del universo. Esta esfera, llamada Melquisedek, es el mundo piloto del circuito de setenta esferas primarias de Salvington, cada una de las cuales está rodeada por seis esferas tributarias dedicadas a actividades especializadas. A estas esferas maravillosas - setenta primarias y 420 tributarias se les llama a menudo la Universidad Melquisedek. Los mortales ascendentes de todas las constelaciones de Nebadon pasan por la formación de estos 490 mundos para adquirir el estado residencial en Salvington. Pero la educación de los ascendentes no es más que una fase de las múltiples actividades que tienen lugar en el grupo de esferas arquitectónicas de Salvington.
Todos los mortales evolutivos que han terminado su formación en las constelaciones están destinados a aterrizar en el mundo Melquisedek, donde son iniciados en el régimen de las disciplinas y de la progresión espiritual del sistema educativo de Salvington.
Los mortales ascendentes residen en el mundo Melquisedek mientras continúan su formación en los seis planetas circundantes de educación especializada. Y este mismo método se aplica durante toda la estancia en los setenta mundos culturales, las esferas primarias del circuito de Salvington.
Muchas actividades diversas ocupan el tiempo de los numerosos seres que residen en los seis mundos tributarios de la esfera Melquisedek, pero en lo que se refiere a los mortales ascendentes, estos satélites se dedican a las fases especiales de estudio siguientes:
En la Facultad Melquisedek de Dotación Espiritual, todas las órdenes de Hijos de Dios, incluidas las del Paraíso, cooperan con los Melquisedeks y los educadores seráficos para formar a las multitudes de evángeles del destino que salen a proclamar la libertad espiritual y la fíliación divina incluso hasta los mundos lejanos del universo.
Esta facultad particular de la Universidad Melquisedek es una institución exclusiva del universo; los visitantes estudiantiles procedentes de otros reinos no son admitidos aquí.
El curso de formación más elevado en administración universal es impartido por los Melquisedeks en su mundo nativo. Esta Facultad de Ética Superior está presidida por el Padre Melquisedek original. Es a estas facultades donde los diversos universos envían sus estudiantes de intercambio.
Aunque el joven universo de Nebadon se encuentra en un bajo nivel en la escala de los universos en cuanto a los logros espirituales y a un desarrollo ético elevado, sin embargo, nuestros problemas administrativos han convertido de tal manera a todo el universo en una inmensa clínica para otras creaciones cercanas, que las facultades Melquisedeks están atestadas de visitantes estudiantiles y de observadores de otros reinos.
Además del inmenso grupo de inscritos locales, siempre hay más de cien mil estudiantes extranjeros que asisten a las escuelas Melquisedeks, porque la orden de los Melquisedeks de Nebadon es famosa en todo Splandon.
Saliendo del universo local, nos encontramos con el sector menor de Ensa, que está compuesto de cien universos locales y tiene una capital llamada Umenor la tercera. Este sector menor es el número tres del sector mayor de Splandon. Splandon está compuesto de cien sectores menores y tiene un mundo sede llamado Umayor la quinta. Es el quinto sector mayor del superuniverso de Orvonton, el séptimo segmento del gran universo.
Los mundos sede de los sectores menores son los grandes puntos de reunión de los Controladores Físicos Maestros. Estos mundos sede están rodeados por siete esferas de instrucción que forman las escuelas de admisión al superuniverso, y son los centros donde se enseña el conocimiento físico y administrativo relacionado con el universo de universos. Es decir, son esferas dedicadas a los estudios físicos superiores de la vida ascendente.
Los setenta satélites de Umayor la quinta están dedicados a nuestra formación y desarrollo intelectuales de tipo superuniversal, es decir, a la formación intelectual avanzada del superuniverso. Aquí se reúnen desde todo Orvonton los seres sabios que trabajan incansablemente para preparar a los mortales del tiempo con vistas a su progreso ulterior hacia la carrera de la eternidad. La mayor parte de esta formación de los mortales ascendentes se lleva a cabo en los setenta mundos de estudio.
Uversa, la sede de Orvonton, nuestro superuniverso, está rodeada directamente por las siete universidades superiores de enseñanza espiritual avanzada para las criaturas volitivas ascendentes. Cada uno de estos siete grupos de esferas maravillosas está compuesto de setenta mundos especializados que contienen miles y miles de instituciones y de organizaciones repletas dedicadas a la educación universal y a la cultura espiritual, donde los peregrinos del tiempo son reeducados y examinados de nuevo con miras a su largo viaje hacia Havona.
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