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La majestad de poder elegir: el libre albedrío | Luz y Vida — Núm. 45 — Septiembre 2016 — Índice | Cuestionario urantiano: Miguel Bustos |
Hace ahora un año, en el Luz y Vida nº 41, recordábamos la importancia a nivel social y de evolución en el ser humano que ha tenido la agricultura, y cómo la ciencia ha ido encontrando rastros de ella en épocas cada vez más próximas a las actividades de Adán y Eva de hace 38000 años.
Los diferentes hallazgos científicos nos deberían llevar incluso más lejos en el tiempo, acercándonos a la llegada del Príncipe Planetario hace 500000 años. Pero hemos de dar tiempo a nuestros investigadores.
Liderados por la Universidad de Harvard y en colaboración con el Instituto de Biología Evolutiva, que es un centro mixto de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y el CSIC, han realizado el primer análisis a gran escala del genoma de antiguos restos humanos procedentes de Oriente próximo, y con este análisis han podido arrojar luz sobre las identidades genéticas y las migraciones de los primeros agricultores detectados en nuestro planeta. (Estudio publicado en la revista «Nature» el 25 Julio de 2016).
Genomic analysis of Andamanese provides insights into ancient human migration into Asia and adaptation
http://www.nature.com/ng/journal/v48/n9/full/ng.3621.html
En este estudio, han encontrado tres poblaciones de agricultores genéticamente diferentes que vivieron en la zona del Cercano Oriente (Irán, Turquía, y la zona de Israel y Jordania) en épocas de entre hace 14 000 y 3400 años.
Los estudiosos del tema han quedado perplejos y no encuentran cómo explicar el hecho de que parece que lo que se compartió fue el conocimiento de la agricultura por diferentes áreas, y sin embargo no hubo mezcla de individuos. Esperaban que el conocimiento de la técnica avanzada de la agricultura se hubiera logrado en el seno de una comunidad y con el tiempo, a medida que los individuos se fueran mezclando con otros de otras zonas, se fuera expandiendo el conocimiento a la vez que se fuera dando la mezcla racial.
Esto que ha desconcertado a los estudiosos del tema a nosotros no nos extraña, puesto que tras la lectura del documento 68, más concretamente LU 68:5.9, nos indican que tanto el Príncipe Planetario, nuestro controvertido Caligastía, como Adán y Eva se esforzaron enormemente por enseñar las técnicas superiores relacionadas con esta actividad, entre otras muchas cosas.
El Libro de Urantia nos explica que la enseñanza de la agricultura no solo no fue inventada por los autóctonos del planeta, sino que fueron técnicas superiores enseñadas poco a poco tanto por el séquito del Príncipe Planetario como por Adán y Eva. Además nos comenta el método de diseminación de la enseñanza, que consistía en preparar a los diferentes grupos humanos. Para ello se preparaba a los individuos más adecuados para enviarlos luego de nuevo a sus lugares de origen, lo que propicia y explica precisamente lo que mantiene sorprendidos a nuestros investigadores actuales, pues de esta manera el conocimiento de difunde por los diferentes grupos antes de que los grupos en sí mismos se mezclen biológicamente.
En esta ocasión, El Libro de Urantia da una explicación lógica a lo encontrado por nuestros investigadores. Otra cuestión es que los investigadores puedan asumir como lógico lo indicado en El Libro de Urantia.
La majestad de poder elegir: el libre albedrío | Luz y Vida — Núm. 45 — Septiembre 2016 — Índice | Cuestionario urantiano: Miguel Bustos |