© 1998 La Christian Fellowship de Estudiantes de El libro de Urantia
Himnos tradicionales revisados para reflejar los valores de la Quinta Revelación de Época.
Gracia asombrosa
Gracia asombrosa, qué grande el amor,
¡Eso salvó un alma como yo!
Una vez estuve ciego, pero ahora veo,
¡Estaba atado pero ahora soy libre!
Fue la gracia la que enseñó a mi corazón a amar,
y gracia la que recibe el amor de Dios;
Cuán preciosa parece esa gracia
a mi alma aliviada del miedo.
En los peligros, fatigas y trampas,
Ya he venido;
Esta gracia me ha salvado hasta ahora,
Y la gracia me llevará a casa.
Es la gracia la que me lleva al bien,
La verdad de Dios asegura mi vida;
La perfección de Dios será mi estándar,
mientras la vida dure.
Y cuando lleguemos al paraíso
y se gana la vida eterna,
No tenemos menos tiempo para cantar las alabanzas de Dios
que cuando empezamos.
«El mundo necesita más que nada una religión de primera mano. Incluso el cristianismo —la mejor religión del siglo veinte— no es solamente una religión acerca de Jesús, sino que es una religión que los hombres experimentan ampliamente de segunda mano.» (LU 195:9.8)