© 2013 Fundación Urantia
Nota de la dirección: El autor de este artículo desea permanecer en el anonimato. Algún día, este mundo conocerá la libertad religiosa, y rezamos por el día en que todos sus habitantes tengan la posibilidad de expresarse libremente.
Soy el traductor de El libro de Urantia al idioma parsi (persa). En 1990, descubrí El libro de Urantia en la oficina de un doctor iraní. En aquel tiempo, me consideraba un pensador musulmán progresista y practicaba el islam, la religión de mis padres. Había leído el Corán y la Biblia. Aunque encontré algo de inspiración en estos dos libros, no respondían a mis preguntas fundamentales sobre la vida, el universo, Dios, el más allá y la historia de la Tierra. La Biblia y el Corán no saciaban mi sed intelectual y espiritual, y sus respuestas a mis preguntas no atraían a mi mente científica ni a mi alma. Me parecía que el creador del universo debía ser mucho más incluyente, universal y amoroso que el retrato que la Biblia y el Corán hacen de Dios. Además, pensaba que no podíamos haber sido colocados en la Tierra sólo para vivir una corta vida y para acabar después en el cielo o en el infierno, dependiendo de nuestra conformidad con cierto sistema de creencias.
Mientras me esforzaba por obtener respuestas, comencé a leer El libro de Urantia con una curiosidad tremenda. Pronto me resultó obvio que había encontrado un tesoro que no era de este mundo. Su atractivo intelectual y la sabiduría de sus autores sobrepasaban todo lo que había leído hasta entonces. Las preguntas de toda una vida encontraron respuestas satisfactorias que atraían a mi ser interior. ¡Qué Dios tan magnífico tenemos! ¡En qué universo tan glorioso vivimos! Ahora espero con ilusión una carrera en el universo de crecimiento y descubrimientos. Me pregunté a mí mismo: ¿cómo puedo compartir mi felicidad y mis pensamientos avanzados con otras almas hambrientas, especialmente con aquellos que hablan parsi?
Comencé a traducir algunos pasajes del libro y a compartirlos con amigos. Luego decidí traducir el libro. He traducido casi la mitad. Estoy seguro de que, cuando la traducción esté terminada y el libro se publique en parsi, transformará el pensamiento y la filosofía de los iranís y de otros hablantes de parsi en todo el mundo.
Qué dicha y qué honor es ser traductor de El libro de Urantia cuando, como se afirma en el libro: «Toda Urantia está esperando la proclamación del mensaje ennoblecedor de Miguel, sin las trabas de las doctrinas y los dogmas acumulados durante diecinueve siglos de contacto con las religiones de origen evolutivo. Ha llegado la hora de presentar al budismo, al cristianismo, al hinduismo, e incluso a los pueblos de todas las religiones, no el evangelio acerca de Jesús, sino la realidad viviente y espiritual del evangelio de Jesús». LU 94:12.7