© 1959 William S. Sadler
© 1961 Fundación Urantia
Proposición. Jesús dijo que era mejor dejar a sus seguidores en la carne, para poder estar más plenamente con ellos en espíritu.
«Jesús continuó enseñando, diciendo: «Cuando yo haya ido al Padre, y después de que él haya aceptado plenamente la obra que he hecho por vosotros en la tierra, y después de que haya recibido la soberanía final de mi propio dominio, le diré a mi Padre: Habiendo dejado a mis hijos solos en la tierra, es de acuerdo con mi promesa de enviarles a otro maestro. Y cuando el Padre apruebe, derramaré el Espíritu de la Verdad sobre toda la carne. Ya el espíritu de mi Padre está en vuestro corazón, y cuando llegue este día, también me tendréis a mí con vosotros aun como tenéis ahora al Padre. Este nuevo don es el espíritu de la verdad viva. Los descreídos no escucharán al principio las enseñanzas de este espíritu, pero los hijos de la luz lo recibirán con regocijo y de todo corazón. Y conoceréis a este espíritu cuando llegue, aun como me habéis conocido a mí, y recibiréis este don en vuestro corazón, y él permanecerá con vosotros. Así pues percibís que no os dejaré sin ayuda ni guía. No os dejaré desolados. Hoy tan sólo puedo estar con vosotros en persona. En los tiempos venideros estaré con vosotros y con todos los demás hombres que deseen mi presencia, donde sea que estaréis, y con cada uno de vosotros al mismo tiempo. ¿Acaso no discernís que es mejor para mí que me vaya; que os deje en la carne, para poder estar con vosotros mejor y más plenamente en el espíritu?» LU 180:4.1
Proposición. Este nuevo instructor es la convicción viva de la verdad.
«El nuevo ayudante que Jesús prometió enviar al corazón de los creyentes, para esparcirlo sobre toda la carne, es el Espíritu de la Verdad. Este don divino no es la letra ni la ley de la verdad, tampoco ha de funcionar como una forma o expresión de la verdad. El nuevo maestro es la convicción de la verdad, la conciencia y certeza de los verdaderos significados de los niveles espirituales reales. Y este nuevo maestro es el espíritu de la verdad viva y creciente, que se expande, se despliega, y se adapta.» LU 180:5.1
Proposición. No es extraño que estos hombres infundidos de espíritu se sintieran trasladados a un nuevo mundo de alegría y poder.
«No es extraño que estos hombres infusos por el espíritu se aferraran de esta oportunidad para expresar su sentimiento de triunfo sobre las fuerzas que habían tratado de destruir a su Maestro y poner fin a la influencia de sus enseñanzas. En un momento como éste, era más fácil recordar la asociación personal con Jesús y entusiasmarse con la certeza de que el Maestro aún vivía, que su amistad no había terminado y que en efecto el espíritu había descendido sobre ellos como él había prometido.
«Estos creyentes se sentían de pronto trasladados a otro mundo, a una nueva existencia de gozo, poder y gloria. El Maestro les había dicho que el reino vendría con poder, y algunos de ellos pensaron que comenzaban a discernir lo que él quería decir.» LU 194:0.5
Proposición. Es fácil comprender cómo comenzaron a predicar un nuevo evangelio acerca de Jesús.
«Cuando se toma todo esto en consideración, no es difícil comprender como estos hombres llegaron a predicar un nuevo evangelio sobre Jesús en lugar de su mensaje anterior de la paternidad de Dios y de la fraternidad de los hombres.» LU 194:0.7
Proposición. El nuevo mensaje acerca de Jesús convirtió a dos mil almas.
«Eran aproximadamente las dos cuando Pedro se puso de pie, en el mismo lugar en que su Maestro había enseñado por última vez en el templo, y pronunció ese llamado apasionado que resultó en la ganancia para el reino de más de dos mil almas. El Maestro ya no estaba, pero de pronto ellos descubrieron que el relato sobre él ejercía gran poder sobre el pueblo. No es de extrañar que fueron llevados a la proclamación ulterior de lo que reinvidicaba su previa devoción a Jesús y al mismo tiempo, tan fuertemente instaba a los hombres a creer en él. Seis de los apóstoles participaron en esta reunión: Pedro, Andrés, Santiago, Juan, Felipe y Mateo. Hablaron más de una hora y media y pronunciaron mensajes en griego, hebreo y aramaico, así como también algunas pocas palabras en otras lenguas de las que tenían un ligero conocimiento.» LU 194:1.2
Proposition. El trabajo de este espíritu es personalizar la verdad y destruir todo sentimiento de orfandad.
«La primera misión de este espíritu es, por supuesto, fomentar y personalizar la verdad, puesto que la comprensión de la verdad es lo que constituye la forma más elevada de libertad humana. En segundo lugar es propósito de este espíritu destruir la sensación de orfandad del creyente. Siendo que Jesús estuvo entre los hombres, todos los creyentes experimentarían una sensación de soledad de no ser por el advenimiento del Espíritu de la Verdad, destinado a morar en el corazón de los hombres.» LU 194:2.2
Proposición. El otorgamiento del espíritu del Hijo preparar a las mentes normales para recibir a los Ajustadores.
«Este otorgamiento del espíritu del Hijo preparó eficazmente la mente de todos los hombres normales para el otorgamiento universal subsiguiente del espíritu del Padre (el Ajustador) sobre toda la humanidad. En cierto sentido, este Espíritu de la Verdad es el espíritu tanto del Padre Universal como del Hijo Creador.» LU 194:2.3
Proposición. El espíritu lleva a toda la verdad y realza las realidades de las enseñanzas de Jesús.
«También, el Espíritu de la Verdad vino para ayudar al creyente a atestiguar las realidades de las enseñanzas de Jesús y de su vida tal como la vivió en la carne, y tal como él ahora nuevamente la vive otra vez en cada creyente de cada generación de hijos de Dios llenados del espíritu.
«Así pues es evidente que el Espíritu de la Verdad viene en realidad para conducir a todos los creyentes a toda la verdad, al conocimiento cada vez más amplio de la experiencia de la conciencia espiritual viva y creciente de la realidad de la filiación con Dios eterna y ascendente.» LU 194:2.6
Proposición. El Espíritu de la Verdad completa el séptuplo otorgamiento de espíritu.
«En cierto modo, la humanidad está sujeta a la doble influencia del llamado séptuplo de las influencias espirituales del universo. Las primeras razas evolucionarias de los mortales están sometidas al contacto progresivo de los siete espíritus ayudantes de la mente del Espíritu Materno del universo local. A medida que el hombre progresa hacia arriba en la escala de la inteligencia y de la percepción espiritual, ulteriormente llegan a él y moran en él las siete influencias de los espíritus superiores. Y estos siete espíritus de los mundos en avance son:
«1. El espíritu otorgado por el Padre universal —los Ajustadores del Pensamiento.
«2. La presencia espiritual del Hijo Eterno —la gravedad espiritual del universo de los universos y el canal certero de toda comunión espiritual.
«3. La presencia espiritual del Espíritu Infinito —el espíritumente universal de toda la creación, la fuente espiritual del parentesco intelectual de todas las inteligencias progresivas.
«4. El espíritu del Padre Universal y del Hijo Creador —el Espíritu de la Verdad, generalmente considerado el espíritu del Hijo del Universo.
«5. El espíritu del Espíritu Infinito y del Espíritu Materno del Universo —el Espíritu Santo, generalmente considerado el espíritu del Espíritu del Universo.
«6. El espíritu de mente del Espíritu Materno del Universo —los siete espíritus ayudantes de la mente en el universo local.
«7. El espíritu del Padre, los Hijos y los Espíritus —el espíritu de nuevo nombre de los mortales ascendentes de los reinos después de la fusión del alma mortal nacida del espíritu con el Ajustador del Pensamiento del Paraíso, y después del subsiguiente alcance de la divinidad y la glorificación del estado del Cuerpo de Finalistas del Paraíso.» LU 194:2.12
Proposición. En Pentecostés, la religión de Jesús rompió todas las restricciones nacinales y las trabas raciales.
«El día de Pentecostés la religión de Jesús rompió todas las restricciones nacionales y las cadenas raciales. Es para siempre verdad que «donde se encuentra el espíritu del Señor, se encuentra la libertad». En este día, el Espíritu de la Verdad se tornó el don personal del Maestro para cada mortal. Este espíritu fue otorgado con el propósito de calificar a los creyentes para que prediquen más eficazmente el evangelio del reino, pero ellos confundieron la experiencia de recibir el espíritu derramado, con una parte del nuevo evangelio que inconscientemente estaban formulando.» LU 194:3.5
Proposición. Pentecostés disoció para siempre la idea de experiencia espiritual de la noción de entornos especialmente favorables.
«El otorgamiento del Espíritu de la Verdad aconteció independientemente de toda forma, ceremonia, lugar sagrado y conducta especial por parte de los que recibieron la plenitud de su manifestación. Cuando el espíritu descendió sobre los que se encontraban en el aposento superior, ellos simplemente estaban sentados allí, después de haber orado en silencio. El espíritu descendió tanto en el campo como en la ciudad. No fue necesario que los apóstoles se retiraran a un lugar aislado y que pasaran años de meditación solitaria para recibir el espíritu. Para siempre, Pentecostés disocia la idea de la experiencia espiritual del concepto de un medio ambiente particularmente favorable.» LU 194:3.10
Proposición. Pentecostés dotó al hombre del poder de desafiar los males del odio y la ira mediante los actos valerosos de amor y paciencia.
«Pentecostés dotó al hombre mortal con el poder para perdonar las injurias personales, para mantenerse dulce en medio de las injusticias más graves, para permanecer inamovible frente al peligro más tremendo, y para desafiar los males del odio y de la ira mediante actos audaces de amor y paciencia. Urantia ha pasado por la destrucción de tremendas guerras a través de su historia. Todos los participantes de estas grandes luchas fueron derrotados. Tan sólo hubo un vencedor. Tan sólo uno salió de estas luchas amargas con una mejor reputación elevada —ese fue Jesús de Nazaret y su evangelio de sobrecoger el mal con el bien. El secreto de una civilización mejor está encerrado en las enseñanzas del Maestro sobre la buena voluntad del amor y la confianza mutua.» LU 194:3.12
Proposición. La humanidad solo puede unificarse mediante un enfoque espiritual.
«Pentecostés tuvo el propósito de aminorar la presunción de individuos, grupos, naciones y razas. Este espíritu de presunción es lo que tanto aumenta las tensiones que periódicamente estallan en guerras destructivas. La humanidad tan sólo puede unificarse mediante el enfoque espiritual, y el Espíritu de la Verdad es una influencia mundial que influye uniformemente.» LU 194:3.18
Proposición. Pentecostés significa que el Jesús de la historia se ha convertido en el Hijo divino de la experiencia viva.
«La llegada del Espíritu de la Verdad purifica el corazón humano y conduce al que lo recibe a formular un propósito de vida dedicado exclusivamente a hacer la voluntad de Dios y promover el bienestar de los hombres. El espíritu material del egoísmo ha sido neutralizado en este nuevo otorgamiento espiritual de altruismo. Pentecostés, entonces y ahora, significa que el Jesús de la historia se ha tornado en el Hijo divino de la experiencia viviente. La felicidad de este espíritu derramado, cuando se experimenta conscientemente en la vida humana, es tónico para la salud, estímulo para la mente, y energía infalible para el alma.» LU 194:3.19
Proposición. La influencia del Espíritu de la Verdad continúa a través del universo local.
«Así pues ocurre en los circuitos espirituales: el hombre los utiliza en su ascensión a través de los universos pero nunca los posee como parte de su personalidad eterna. Pero estos circuitos de ministerio espiritual, sean ellos el Espíritu de la Verdad, el Espíritu Santo u otras presencias espirituales superuniversales, son receptivos y reactivos a los valores nacientes en la personalidad ascendente, y estos valores son trasmitidos fielmente a través del Séptuple al Supremo.» LU 117:5.8