Se dispusieron once cortinas de pelo de cabra, cada una de treinta codos de largo, como se dice: «Harás cortinas de pelo de cabra para cubrir el tabernáculo: once cortinas harás. El largo de cada cortina será de treinta codos». [^706] Se unían en dos velos, uno de cinco y otro de seis, como se dice: «Unirás cinco cortinas por separado, y seis cortinas por separado». [^707] Se unían con cincuenta lazadas, como se dice: «Hizo cincuenta lazadas en el borde exterior de la cortina, en la unión, y cincuenta lazadas en el borde de la cortina que une la segunda». [^708] Las lazadas se unían a cincuenta corchetes de bronce, como se dice: «Harás cincuenta corchetes de bronce, los meterás en las lazadas y unirás la tienda para que sea una sola». [^709] La longitud de las cortinas era de treinta codos. Si se les restan diez codos de ancho, quedarán diez codos de un lado y diez codos del otro, mientras colgaban y cubrían las tablas y las basas. La anchura de las cortinas era de cuarenta y cuatro codos, como se dice: «Y la anchura de una cortina, cuatro codos; y las once cortinas serán todas de una misma medida». [^710] Se restan treinta codos de largo para el tabernáculo y diez codos por detrás del tabernáculo; son cuarenta. Allí quedó una cortina que fue doblada delante de la tienda, como está dicho, «y doblarás la sexta cortina en la parte delantera del tabernáculo.» [^711] El rabino Judah dijo, «la mitad fue doblada en la parte delantera del tabernáculo, y la otra mitad colgaba detrás del tabernáculo,» como está dicho, «Y el remanente que queda de las cortinas de la tienda, la media cortina que queda colgará sobre la parte trasera del tabernáculo.» [^712] También se proporcionó una gran cubierta de pieles de carnero teñidas de rojo, su largo de treinta codos, y su ancho de diez codos; con ella vistieron la tienda sobre el tabernáculo de este a oeste, como está dicho, «Y harás una cubierta para la tienda de pieles de carnero teñidas de rojo, y una cubierta encima de pieles de tejones,» [1] y fue hecha «como un remiendo.» [2] Palabras del rabino Nehemías. El rabino Judah dijo: «Había dos cubiertas: la inferior de pieles de carnero teñidas de rojo, y la superior de pieles de tejón», como se dice, «su cubierta y la cubierta de pieles de tejón que está encima». [3]