En los planetas como el nuestro, la forma más elevada de vida es reproducida por un haz portador de vida que posee veinticuatro unidades modelo. En Urantia hay cuarenta y ocho unidades de control arquetípico —de determinadores de las características— en las células sexuales de la reproducción humana. [1] El personal del Príncipe Planetario tuvo unos cromosomas reorganizados mediante los circuitos vitales del sistema de Satania. [2]