1 Y el Señor me dijo:
«Esta ciudad será entregada por un tiempo,
Y el pueblo será castigado durante un tiempo,
Y el mundo no caerá en el olvido.
La Jerusalén celestial
2 [¿Crees que ésta es aquella ciudad de la cual dije: «En las palmas de mis manos te tengo grabada»?
3 Este edificio que ahora se construye entre vosotros no es el que me ha sido revelado, el que preparé aquí de antemano desde el momento en que decidí construir el Paraíso y mostré a Adán antes de que pecara, pero cuando transgredió el mandamiento, fue quitado de él, como también el Paraíso.
4 Y después de esto se lo mostré a mi siervo Abraham, de noche, entre las porciones de las víctimas.
5 Y también se lo mostré a Moisés en el monte Sinaí, cuando le mostré la figura del tabernáculo y todos sus utensilios.
6 Y ahora, he aquí, está guardado conmigo como el Paraíso.
7 Ve, pues, y haz lo que yo te mando.»]