EL APOCALIPSIS DEL MESÍAS
La Visión de la Nube con Aguas blancas y negras
1 Y habiendo dicho estas cosas, me quedé allí dormido, y tuve una visión, ¡y he aquí! (una nube subía de un mar muy grande, y yo seguía mirando hacia ella) y ¡he aquí! estaba lleno de aguas blancas y negras, y había muchos colores en aquellas mismas aguas, y como se veía en su cima como la semejanza de un gran relámpago.
2 Y vi la nube que pasaba rápidamente y cubría toda la tierra.
3 Y aconteció que después de estas cosas aquella nube comenzó a derramar sobre la tierra las aguas que había en ella.
4 Y vi que no había una misma semejanza en las aguas que descendían de él.
5 Porque en el primer principio eran negras y muchas.O un tiempo, y después vi que las aguas se volvían brillantes, pero no eran muchas, y después de estas cosas volví a ver negras (aguas), y después de estas cosas de nuevo brillante, y de nuevo negro y de nuevo brillante.
6 Ahora bien, esto se hizo doce veces, pero los negros siempre eran más numerosos que los brillantes.
7 Y aconteció que al final de la nube, ¡he aquí! llovieron aguas negras, y eran más oscuras que todas aquellas aguas que habían sido antes, y el fuego se mezcló con ellas, y donde esas aguas descendieron, provocaron devastación y destrucción.
8 Y después de esto vi cómo el relámpago que había visto en la cima de la nube, la agarró y la arrojó a la tierra.
9 Ahora bien, el relámpago brilló con tanta intensidad que iluminó toda la tierra y sanó aquellas regiones donde las últimas aguas habían descendido y habían causado devastación.
10 Y se apoderó de toda la tierra y tuvo dominio sobre ella.
11 Y vi después de estas cosas, y ¡he aquí! doce ríos subían del mar, y comenzaron a rodear aquel relámpago y a sujetarse a él.
12 Y a causa de mi miedo me desperté.