1 Y aconteció que mientras hablaba así a mi padre Taré en el patio de mi casa, descendió la voz de un Poderoso del cielo en una nube de fuego, diciendo y clamando: «¡Abraham, Abraham!» Y dije: «Aquí estoy». Y dijo: «Buscas en el entendimiento de tu corazón al Dios de los dioses y al Creador: Yo soy. Sal de tu padre Taré, y sal de casa, para que tú también no seas asesinado en los pecados de la casa de tu padre». Y salí. Y aconteció que cuando salí, antes que lograra salir delante de la puerta del atrio, se oyó un trueno y lo quemó a él y a su casa y todo lo que había en su casa, hasta abajo, hasta el suelo, cuarenta codos.