Se describe la Torre en la que vive Asenath.
1 Pero Asenat menospreciaba y despreciaba a todos, siendo jactanciosa y altiva, y nunca nadie la había visto, ya que Pentefres tenía en su casa una torre contigua, grande y muy alta,
2 y encima de la torre había un loft que contenía diez cámaras.
3 Y la primera cámara era grande y muy hermosa, y estaba pavimentada con piedras de púrpura, y sus paredes estaban revestidas con piedras preciosas y de muchos colores.
4 y también el techo de aquella cámara era de oro. Y dentro de aquella cámara estaban fijados los dioses de los egipcios, de los cuales no había número, oro y plata,
5 Y Asenat adoraba a todos aquellos, y ella los temía, y les ofrecía sacrificios todos los días.
6 Y en la segunda cámara también estaban todos los adornos y los cofres de Asenat,
7 y había en él oro, mucha plata y vestidos de oro sin límites, y piedras escogidas y preciosas,
8 y vestidos finos de lino y todos los adornos de su virginidad estaban allí.
9 Y la tercera cámara era el almacén de Asenat, que contenía todos los bienes de la tierra.
10 Y las siete cámaras restantes las ocuparon las siete vírgenes que servían a Asenat,
11 cada uno tenía una cámara, porque eran de la misma edad, nacieron la misma noche que Asenat, y ella los amaba mucho; y también eran extremadamente hermosas como las estrellas del cielo, y nunca ningún hombre conversó con ellas ni con un niño varón.
12 La gran cámara de Asenat, donde se preservaba su virginidad, tenía tres ventanas;
13 Y la primera ventana era muy grande y daba al atrio hacia el oriente; y el segundo miraba hacia el sur, y el tercero miraba hacia la calle.
14 Y en la cámara que miraba hacia el oriente había una cama de oro;
15 Y la cama estaba cubierta de tela de púrpura entretejida con oro, y la cama estaba tejida de tela escarlata, carmesí y lino fino.
16 En esta cama durmió sola Asenat, y nunca se sentó en ella ningún hombre ni ninguna mujer.
17 Y había también un gran atrio alrededor de la casa, y un muro muy alto alrededor del atrio, construido con grandes piedras rectangulares;
18 También había en el atrio cuatro puertas revestidas de hierro, cada una de las cuales estaba custodiada por dieciocho jóvenes fuertes y armados;
19 y también se plantaron a lo largo del muro árboles hermosos, de todas clases y de todos los que daban fruto, y sus frutos estaban maduros, porque era el tiempo de la cosecha;
20 y había también una rica fuente de agua que brotaba a la derecha del mismo atrio; y debajo de la fuente había una gran cisterna que recibía el agua de aquella fuente, de donde salía como un río por en medio del atrio y regaba todos los árboles de aquel atrio.