© 1982 Ronald D. Louie, Sally Schlundt
© 1982 The Urantia Book Fellowship (anteriormente Urantia Brotherhood)
Número de verano de 1982 — Índice | Reflexiones sobre la difusión de las enseñanzas del libro de Urantia |
«Urantia se estremece actualmente al borde mismo de una de sus épocas más asombrosas y apasionantes de reajuste social, de reanimación moral y de iluminación espiritual.» (LU 195:9.2)
Estas palabras presagian una nueva era por venir y subrayan la anticipación de que la civilización debe sufrir cambios importantes de alcance total. También se nos dice que la «…reorganización social, moral, económica y política del mundo» (LU 99:3.3) sólo puede tener lugar bajo el liderazgo y la inspiración de las almas nacidas del espíritu que habrán sido transformados por el renacimiento espiritual venidero.
Sin duda, las enseñanzas del Libro de URANTIA, la quinta revelación de época en este planeta, desempeñarán un papel fundamental en el aumento del desarrollo evolutivo progresivo que está teniendo lugar. Al examinar algunos de los problemas que enfrenta actualmente el desarrollo social evolutivo, podemos obtener una idea del papel de las enseñanzas a la hora de lograr de manera efectiva la transformación de la civilización.
— Ronald D. Louie
Vancouver occidental, Canadá
Al presentar El Libro de URANTIA a otras personas, otras culturas y otras religiones, la calidad de nuestra interfaz estará determinada en gran medida por cómo nos vemos a nosotros mismos y eso, a su vez, determinará cómo apareceremos ante los demás y, por lo tanto, cómo responderán a nosotros mismos. Todo lo demás: nuestros motivos, nuestras técnicas y nuestras metas quedan secundarios a este factor, porque la forma en que nos vemos a nosotros mismos en asociación con esta nueva revelación determina esos motivos, técnicas y metas.
Anticipo que muchos de los diversos problemas que encontraremos cuando nos acerquemos a otros pueblos con el libro se derivarán de nuestra apariencia religiosa. Aunque carecemos de muchas de las características que comúnmente caracterizan a las religiones y las iglesias, hay algunas similitudes principales que deben tenerse en cuenta y tal vez rectificarse en el proceso.
— Sally Schlundt
Fuerte Wayne, Indiana
«Os declaro a todos que el Padre ha abierto las puertas del reino celestial a todos los que tienen la fe necesaria para entrar, y ningún hombre o asociación de hombres podrán cerrar esas puertas ni siquiera al alma más humilde o al pecador supuestamente más flagrante de la Tierra, si sinceramente aspiran a entrar.» (LU 147:5.6)
Jesús a Simón, Pedro, Santiago y Juan en casa de Simón
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