© 1959 William S. Sadler
© 1961 Fundación Urantia
«La perfección de las criaturas del tiempo, cuando ésta queda al fin alcanzada, es completamente una adquisición, una genuina posesión de la personalidad. Aunque se agreguen generosamente los elementos de gracia, no obstante, los logros de la criatura son el resultado del esfuerzo individual, las vivencias verdaderas y la reacción de la personalidad al medio ambiente existente.
«El hecho del origen evolucionario animal no implica un estigma para ninguna personalidad a los ojos del universo, puesto que ése es el método exclusivo de producir uno de los dos tipos básicos de criaturas finitas inteligentes volitivas. Cuando se alcanzan las cimas de la perfección y la eternidad, hay mucho más motivo de orgullo en el caso de aquellos que comenzaron desde abajo y alegremente ascendieron en la escala de la vida, peldaño tras peldaño y que, cuando así llegan a las alturas gloriosas, habrán obtenido una experiencia personal que encierra un conocimiento real de cada fase de la vida desde abajo hacia arriba. » LU 32:3.9
«En esta donación universal de sí mismo tenemos abundantes pruebas tanto de la magnitud como de la magnanimidad de la esencia divina del Padre. Si Dios ha retenido alguna cosa de sí mismo de la creación universal, entonces de ese residuo generosamente concede los Ajustadores del Pensamiento a los mortales de los reinos, los Monitores Misteriosos del tiempo que tan pacientemente moran en los candidatos mortales por la vida eterna.
«El Padre Universal se ha esparcido de sí mismo, por decirlo así, para enriquecer a la entera creación en posesión de personalidad y potencial para el logro del estado espiritual. Dios nos ha dado de sí mismo para que nosotros podamos ser como él, y se ha reservado de su poder y gloria tan sólo lo necesario para el mantenimiento de aquellas cosas por cuyo amor se ha desposeído a sí mismo de todo lo demás.» LU 32:4.11
«Existe un gran y glorioso propósito en la marcha de los universos a través del espacio. Todas vuestras luchas mortales no son en vano. Todos nosotros somos parte de un plan inmenso, una empresa gigantesca, y es la vastedad de esa empresa la que convierte en imposible poder ver mucho de ello en un determinado tiempo y durante una vida cualquiera. Todos formamos parte de un proyecto eterno que los Dioses están supervisando y efectuando. Majestuosamente la totalidad del mecanismo universal sigue su marcha a través del espacio al compás de la música del pensamiento infinito y el propósito eterno de la Primera Gran Fuente y Centro.
«El propósito eterno del Dios eterno es un ideal altamente espiritual. Los acontecimientos del tiempo y las luchas de la existencia material no son otra cosa que el andamio transitorio que tiende un puente hacia el otro lado, hacia la tierra prometida de la realidad espiritual y la existencia celestial. Por supuesto que, vosotros mortales halláis difícil de captar la idea de un propósito eterno; vosotros sois virtualmente incapaces de comprender el pensamiento de la eternidad, algo que no tiene ni comienzo ni fin. Todo lo que os resulta familiar tiene un final.» LU 32:5.1 Ef 3:11.
«Hay en la mente de Dios un plan que involucra a cada criatura de todos sus vastos dominios, y este plan consiste en un propósito eterno de oportunidades ilimitadas, progreso sin límites, y una vida sin fin. ¡Y los tesoros infinitos de esa carrera tan inigualable son vuestros con solo luchar!
«¡El objetivo de la eternidad os aguarda! ¡La aventura del logro de la divinidad se encuentra frente a vosotros! ¡La carrera por la perfección está en marcha! Quienquiera lo desee puede correr, y la victoria certera coronará los esfuerzos de cada ser humano que participe en la carrera de la fe y la esperanza, dependiendo a cada paso de la dirección del Ajustador residente y de la guía de ese buen espíritu del Hijo del Universo, que generosamente ha sido derramado sobre toda la carne.» LU 32:5.7
«En la persona del Hijo Creador tenemos a un gobernante y padre divino que es tan poderoso, eficiente y benéfico como serían el Padre Universal y el Hijo Eterno si ambos estuviesen presentes en Salvington e involucrados en la administración de los asuntos del universo de Nebadon.» LU 33:1.5
«Desde las alturas de la gloria eterna desciende el Espíritu divino, a través de una larga serie de pasos, para encontrarse contigo así como eres y dondequiera que estés; y entonces, en asociación de fe, abraza con amor el alma de origen mortal para embarcarse en el seguro y certero camino de vuelta, de reascensión sin detenerse nunca hasta que el alma evolucionaria sea exaltada con seguridad hasta las mismas alturas de dicha de las cuales saliera originalmente el divino Espíritu en esta misión de misericordia y ministerio.
«Las fuerzas espirituales infaliblemente buscan y logran sus niveles originales. Habiendo salido de lo Eterno, con seguridad regresarán allí, llevando consigo a todos aquellos hijos del tiempo y el espacio que han adoptado la guía y la enseñanza del Ajustador residente, aquellos que verdaderamente han «nacido del Espíritu», los hijos Dios por la fe.» LU 34:6.3
«La difunta teoría de las más elevadas doctrinas religiosas no tiene poder para transformar el carácter humano ni para controlar la conducta de los mortales. Lo que el mundo de hoy necesita es lo que vuestro antiguo maestro declaró: «No en palabras solamente, sino también en el poder y en el Espíritu Santo». La semilla de la verdad teórica está muerta, los más altos conceptos morales no tienen vigencia, a menos que, y hasta que, el Espíritu divino infunda inspiración sobre las formas de la verdad y estimule las fórmulas de la rectitud.» LU 34:6.6
«Es la presencia del Espíritu divino, el agua de la vida, la que previene la sed devoradora del descontento mortal y el hambre indescriptible de la mente humana no espiritualizada. Los seres motivados por el espíritu «nunca están sedientos, pues el agua espiritual será en ellos un manantial de satisfacción que fluye eternamente hacia la vida». Estas almas divinamente regadas son prácticamente independientes del medio ambiente material en cuanto a los regocijos de vivir y las satisfacciones de la existencia terrenal. Están iluminadas y refrescadas espiritualmente, y moralmente fortalecidas y dotadas.» LU 34:6.8 Jn 4:13, 14.
«En todo mortal existe una naturaleza dual: la herencia de tendencias animales y el impulso elevado de la dotación espiritual. Durante la corta vida que vosotros vivís en Urantia, estos dos impulsos diversos y opuestos, difícilmente pueden reconciliarse plenamente; no pueden ser armonizados ni unificados, pero a lo largo de vuestra vida, el Espíritu combinado no cesa jamás de ministrar para ayudaros a someter cada vez más la carne a la guía del Espíritu. Aunque debes vivir toda tu vida material, y aunque no puedes escapar al cuerpo y sus necesidades, no obstante, en propósito e ideas, tú estás cada vez más imbuído de poder para someter la naturaleza animal a la supremacía del Espíritu. En verdad existe dentro de tí una conspiración de fuerzas espirituales, una confederación de poderes divinos, cuyo propósito exclusivo consiste en liberarte finalmente de la esclavitud material e impedimentos finitos.
«El propósito de todo esto es, «que podáis ser fortalecidos con el poder en el hombre interior por Su espíritu». Y todo esto tan sólo representa los pasos preliminares hacia el logro final de la perfección de la fe y el servicio, esa experiencia en la que os hallaréis «llenos de la entera plenitud de Dios», «porque todos los que son guiados por el espíritu de Dios son los hijos de Dios». » LU 34:6.9 Ef 3:16, 19. Ro 8:14.
«El Espíritu nunca impulsa, sólo guía. Si eres un aprendiz voluntarioso, si quieres lograr niveles espirituales y alcanzar las alturas divinas, si sinceramente deseas alcanzar el objetivo eterno, entonces el Espíritu divino te guiará suave y amorosamente por el camino de la filiación y el progreso espiritual. Cada paso que des debe ser de buena voluntad, cooperación inteligente y alegre. La dominación del Espíritu no está matizada jamás por la coerción ni comprometida por la compulsión.
«Y cuando esa vida de guía espiritual sea aceptada inteligentemente y sin reservas, se desarrolla gradualmente en la mente humana una conciencia positiva de contacto divino y seguridad de comunión espiritual; tarde o temprano «el Espíritu atestigua con tu espíritu (el Ajustador) que eres una criatura de Dios». Ya tu propio Ajustador del Pensamiento te ha hablado de tu parentesco con Dios de manera que la historia demuestra que el Espíritu atestigua «con tu espíritu», no para tu espíritu.» LU 34:6.11 Ro 8:16.
«La conciencia de la dominación del espíritu en una vida humana exhibe finalmente manifestaciones cada vez mayores de las características del Espíritu en las reacciones vitales de tales mortales guiados por el espíritu, «porque los frutos del espíritu son el amor, la alegría, la paz, la resignación, la dulzura, la bondad, la fe, la humildad, y la templanza». Tales mortales que son guidados por el espíritu y están divinamente iluminados, aun cuando caminan por los bajos senderos del sufrimiento y con lealtad humana cumplen con las obligaciones de sus deberes terrenales, han comenzado ya a discernir las luces de la vida eterna que centellean en las lejanas orillas de otro mundo. . .» LU 34:6.13
«Habiendo comenzado el camino de la vida eterna, habiendo aceptado el deber y recibido tus órdenes de avanzar, no temas los peligros del olvido humano e inestabilidad mortal, no te preocupes por el temor al fracaso, o por la confusión que te deja perplejo, no vaciles ni interrogues tu estado y situación porque en las horas sombrías, en cada encrucijada de la lucha por progresar, el Espíritu de la Verdad siempre hablará, diciendo: «Éste es el camino».» LU 34:7.8
«La progresión de la eternidad no consiste únicamente en el desarrollo espiritual. La adquisición intelectual es también parte de la educación universal. La experiencia de la mente se amplía paralelamente a la expansión del horizonte espiritual. A la mente y al espíritu se les dan oportunidades equivalentes para capacitarse y avanzar. Pero en toda esta capacitación magnífica de la mente y el espíritu, eres libre para siempre de los impedimentos de la carne mortal. Ya no tienes que arbitrar constantemente las opiniones conflictivas de tus divergentes naturalezas, espiritual y material. Finalmente estás calificado para disfrutar del impulso unificado de una mente glorificada, desde hace mucho tiempo despojada de las primitivas tendencias animalísticas hacia las cosas materiales.» LU 37:6.6
«Los serafines son creados para actuar tanto en el nivel espiritual como en el nivel concreto. Existen pocas fases de actividad morontial o espiritual que no estén abiertas a sus ministraciones. Aunque en condición personal los ángeles no están muy alejados de los seres humanos, en ciertas actuaciones funcionales los serafines los trascienden considerablemente. Poseen muchos poderes, mucho más allá de la comprensión humana. Por ejemplo: se os ha dicho que «hasta los cabellos de vuestra cabeza están contados», y es verdad que así es, pero un serafín no pasa el tiempo contándolos y manteniendo la contabilidad corregida y actualizada. Los ángeles poseen poderes inherentes y automáticos (es decir automáticos en cuanto a lo que vosotros podáis percibir) de saber estas cosas; vosotros en verdad consideraríais que los serafines son prodigios matemáticos. Por lo tanto, numerosos trabajos que serían tareas enormes para los mortales, son realizados por los serafines con gran facilidad.» LU 38:2.3 Lc 12:7.
«Dios el Padre no desciende, no puede descender, tanto él mismo como para hacer un contacto personal tan cercano con el número casi ilimitado de criaturas ascendentes a lo largo del universo de los universos. Pero el Padre no está privado de contacto personal con sus criaturas humildes; vosotros no estáis sin presencia divina. Aunque Dios el Padre no puede estar con vosotros mediante una manifestación directa de la personalidad, está en vosotros y es parte de vosotros en la identidad de los Ajustadores del Pensamiento residentes, los Monitores divinos. Así pues el Padre, que es quien más lejos está de vosotros en personalidad y en espíritu, se acerca más a vosotros en el circuito de personalidad y en el toque espiritual de la comunión interior con el alma misma de sus hijos e hijas mortales.» LU 40:5.3
«Es un hecho solemne y excelso que estas criaturas tan bajas y materiales como los seres humanos de Urantia son hijos de Dios, hijos por la fe del Altísimo. «Mirad, ¡cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios!». «A todos los que le recibieron les dio potestad de conocer que son hijos de Dios». Aunque «no parecería que fuéseis» aún ahora «sois los hijos de Dios por la fe»; «pues no habéis recibido el espíritu del cautiverio para temer nuevamente, sino que habéis recibido el espíritu de la filiación, por el cual exclamáis —Padre nuestro—». Dijo el profeta de la antigüedad en nombre del Dios eterno: «Yo les daré un lugar en mi casa, y nombre mejor que el de hijos; yo les daré un nombre perpetuo, que nunca perecerá». «Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el espíritu de su Hijo».» LU 40:6.2 Jn 3:1, 2. Jn 1:12. Ro 8:15. Is 56:5. Gl 4:6.
«Todos los mundos evolucionarios de habitación mortal albergan estos hijos de Dios por la fe, hijos de la gracia y la misericordia, seres humanos que pertenecen a la familia divina y por lo tanto son llamados hijos de Dios. Los mortales de Urantia tienen derecho a considerarse a sí mismos hijos de Dios porque:
«1. Vosotros sois hijos de la promesa espiritual, hijos de fe; vosotros habéis aceptado el estado de filiación. Creéis en la realidad de vuestra filiación, y por lo tanto vuestra filiación con Dios se torna eternamente real.
«2. Un Hijo Creador de Dios se ha vuelto uno de vosotros; es vuestro hermano mayor de hecho; y si en espíritu os volvéis hermanos verdaderamente emparentados con Cristo, el victorioso Micael, entonces en espíritu también debéis ser hijos de ese Padre que vosotros tenéis en común, aun el Padre Universal de todos.
«3. Sois hijos porque el espíritu de un Hijo ha sido derramado sobre vosotros, ha sido libre y certeramente otorgado a todas las razas urantianas. Este espíritu por siempre os atrae hacia el Hijo divino, que es la fuente, y hacia el Padre Paradisiaco, que es la fuente de ese Hijo divino.
«4. Por su divino libre albedrío, el Padre Universal os ha otorgado vuestra personalidad de criatura. Habéis sido dotados con una medida de esa espontaneidad divina de acción de libre albedrío que Dios comparte con todos aquellos que pueden volverse sus hijos.
«5. Dentro de vosotros mora un fragmento del Padre Universal, y por lo tanto vosotros estáis emparentados con el Padre divino de todos los Hijos de Dios.» LU 40:6.3
«Tal como lo han sospechado vuestros físicos, estos restos mutilados del calcio solar literalmente cabalgan en los rayos de luz por diversas distancias y de esta manera, se facilita enormemente su amplia diseminación por todo el espacio. El átomo de sodio, bajo ciertas modificaciones, también es capaz de locomoción en la luz y en la energía. El logro del calcio es aún más notable puesto que este elemento tiene una masa que es casi el doble que la del sodio. La permeación local del espacio por parte del calcio se debe al hecho de que escapa de la fotoesfera solar, en forma modificada, cabalgando literalmente los rayos del sol salientes. De todos los elementos solares, el calcio, a pesar de su masa comparativa, pues contiene veinte electrones giratorios, es el más triunfador en escapar del interior solar hacia los reinos del espacio. Esto explica por qué existe una capa de calcio, una superficie de piedra gaseosa, en el sol de un espesor de casi diez mil kilómetros; y esto a pesar del hecho de que diecinueve elementos más livianos, y numerosos otros más pesados, están por debajo de esta capa.» LU 41:6.3
«La agilidad de este acrobático electrón de calcio se refleja en el hecho de que, cuando es arrojado por las fuerzas solares de temperatura y de los rayos X al círculo de la órbita más alta, tan sólo permanece en esa órbita por un millonésimo de segundo, pero antes de que el poder de la gravedad eléctrica del núcleo atómico lo atraiga de vuelta a su vieja órbita, es capaz de completar un millón de revoluciones alrededor del centro atómico.» LU 41:6.5
«La energía es eterna pero no infinita; responde por siempre a la atracción del Infinito que todo lo comprende. La fuerza y la energía perduran para siempre; habiendo salido del Paraíso, deben regresar al mismo, aunque se requiera edad tras edad para que se complete el circuito que ha sido ordenado. Aquello que se origina en la Deidad Paradisiaca tan sólo puede tener como destino al Paraíso o a la Deidad.» LU 42:1.8
«No comprendemos plenamente los cambios casi infinitos que puede sufrir la energía física. En un universo, aparece como luz, en otro como luz y calor, en otro en formas de energía desconocidas en Urantia; en indecibles millones de años puede reaparecer en forma de energía eléctrica inquieta y emergente, o de poder magnético; aún más adelante puede volver a aparecer en otro universo en forma de materia variable pasando por una serie de metamorfosis, seguida luego por su desaparición física exterior en un gran cataclismo de los reinos. Y después de ello, después de edades incontables y de errar casi sin fin por los universos innumerables, nuevamente esta misma energía puede resurgir y cambiar muchas veces su forma y potencial; así pues continúan estas transformaciones a través de las edades sucesivas y por reinos incontables. Así sigue avanzando la materia, sufriendo las transmutaciones del tiempo pero girando por siempre fielmente en el círculo de la eternidad; aunque se le impida por mucho tiempo regresar a su fuente, responde a ella por siempre, y prosigue en el camino ordenado por la Personalidad Infinita que la enviara. » LU 42:4.2
«Si magnificáramos la masa de la materia hasta el punto en que un electrón equivaliese a un décimo de una onza [2,8 gramos], su tamaño se magnificaría proporcionalmente, llegando el volumen de dicho electrón a ser tan grande como el de la tierra. Si aumentáramos el volumen de un protón —mil ochocientas veces más pesado que un electrón— hasta el mismo tamaño de la cabeza de un alfiler, en comparación, la cabeza de un alfiler alcanzaría un diámetro igual al de la órbita de la tierra alrededor del sol.» LU 42:6.8
«Dentro del átomo, los electrones giran alrededor del protón central en un espacio comparativamente semejante al de los planetas que giran alrededor del sol en el espacio del sistema solar. Existe la misma distancia relativa, en comparación con el tamaño real, entre el núcleo atómico y el circuito electrónico interior, que entre el planeta interior, Mercurio, y vuestro sol. » LU 42:7.2
«Esta persistencia séptuple de la constitución creadora se presenta en los dominios químicos en forma de una repetición de propiedades físicas y químicas similares en períodos segregados de siete al ordenar los elementos básicos según sus pesos atómicos. Cuando los elementos químicos de Urantia se ordenan en fila de esta manera, las cualidades o propiedades específicas tienden a recurrir cada siete. Este cambio periódico de siete en siete ocurre cada vez menos y con variaciones en la entera tabla química, siendo más marcadamente observable en las agrupaciones primeras o más livianas. Comenzando con un elemento, después de notar una propiedad, dicha cualidad cambiará en los seis elementos consecutivos, pero al llegar al octavo tenderá a reaparecer, o sea, que el octavo elemento químicamente activo se asemeja al primero, el noveno al segundo y así sucesivamente. Este hecho del mundo físico indica sin lugar a dudas la constitución séptuple de la energía ancestral e indica la realidad fundamental de la diversidad séptuple de las creaciones espacio-temporales. El hombre también debería notar que existen siete colores en el espectro natural.» LU 42:9.3
«La mente domina universalmente a la materia, así como a su vez responde al supercontrol último del espíritu. Y en el hombre mortal, sólo la mente que se somete libremente a la dirección del espíritu puede esperar sobrevivir la existencia mortal espacio-temporal como hijo inmortal del mundo espiritual eterno del Supremo, el Último y el Absoluto: el Infinito.» LU 42:12.15
«El salmista sabía que Edentia estaba gobernada por tres Padres de la Constelación y por lo tanto habló de su morada en plural: «Hay un río, cuyos caudales alegrarán la ciudad de Dios, el lugar más sagrado de los tabernáculos de los Altísimos».
«A través de las edades ha habido gran confusión en Urantia sobre los distintos gobernadores del universo. Muchos maestros más recientes confundieron sus vagas e indefinidas deidades tribales con los Padres Altísimos. Aún más tarde, los hebreos mezclaron todos estos gobernantes celestiales en una Deidad compuesta. Un maestro comprendió que los Altísimos no eran los Gobernadores Supremos, pues dijo: «Aquél que mora en el lugar secreto del Altísimo vivirá a la sombra del Todopoderoso». En los registros de Urantia es muy difícil a veces saber exactamente a quien se refiere el término «Altísimo». Pero Daniel comprendió plenamente estos asuntos. Él dijo: «El Altísimo gobierna en el reino de los hombres y se lo otorga a quienquiera él desea».» LU 43:3.3 Sal 46:4; 91:1. Dn 4:17; 5:21.
«Si disfrutas de las flores, arbustos, y árboles de Urantia, será para tus ojos un verdadero festín contemplar la belleza botánica y la grandeza floral de los jardines excelsos de Edentia. Pero está más allá de mi poder de descripción emprender la tarea de transmitir a la mente mortal un concepto adecuado de estas bellezas de los mundos celestiales. En verdad, el ojo no ha visto glorias tales como las que aguardan tu llegada en estos mundos de la aventura de ascensión mortal.» LU 43:6.8
«La mejor música de Urantia es tan sólo un eco pasajero de los magníficos arpegios que escuchan los asociados celestiales de vuestros músicos, quienes no registraron más que jirones en forma de melodías musicales de armonizaciones de sonidos de las armonías de las fuerzas morontiales. La música espiritual y morontial emplea frecuentemente las siete modalidades de expresión y reproducción, de modo que la mente humana tiene una dificultad tremenda en traducir estas melodías de las esferas más elevadas a meras notas de sonidos musicales. Sería como tratar de reproducir los sonidos de una gran orquesta con un solo instrumento musical.
«Aunque habéis acumulado algunas melodías bellas en Urantia, no habéis progresado musicalmente tanto como vuestros planetas vecinos en Satania. Si Adán y Eva hubiesen sobrevivido, entonces habríais vosotros tenido música en verdad; pero el don de la armonía, tan importante en su naturaleza, ha sido tan diluido por las corrientes de tendencias no musicales que sólo una en mil vidas mortales aparece con apreciación considerable de las armonías. Pero no os desalentéis, algún día tal vez aparezca en Urantia un verdadero músico, y pueblos enteros se embelesarán con el caudal magnífico de sus melodías. Un solo ser humano podría así cambiar por siempre el curso de una entera nación, aún de todo el mundo civilizado. Es literalmente verdad que «la melodía tiene el poder de transformar a un mundo entero». Para siempre, la música seguirá siendo el lenguaje universal de los hombres, los ángeles y los espíritus. La armonía es el discurso de Havona.» LU 44:1.14
«La belleza, el ritmo, y la armonía están intelectualmente asociados y espiritualmente emparentados. La verdad, el hecho y la relación son intelectualmente inseparables y están asociados con los conceptos filosóficos de la belleza. La bondad, la rectitud y la justicia están filosóficamente interrelacionados y espiritualmente ligados con la verdad viviente y la belleza divina.» LU 44:7.2
«Estas cualidades divinas están perfecta y absolutamente unificadas en Dios. Y todo hombre o ángel que conoce a Dios posee el potencial de una autoexpresión ilimitada en niveles constantemente en progreso de autorrealización unificada mediante la técnica del logro sin fin de la semejanza con Dios —la combinación experiencial en la experiencia evolucionaria de la verdad eterna, la belleza universal y la bondad divina.» LU 44:7.4
«Esta guardería infantil probacional de Satania está mantenida por ciertas personalidades morontiales en el mundo de los finalistas, estando una mitad del planeta dedicada a esta tarea de crianza de niños. Así, algunos hijos de los mortales sobrevivientes se reciben y reensamblan, por ejemplo los vástagos que perecieron en los mundos evolucionarios antes de adquirir estado espiritual como individuos. La ascensión de cualquiera de los dos progenitores naturales asegura que a este hijo mortal de los reinos se le otorgará la repersonalización en el planeta finalista del sistema, y allí se le permitirá demostrar, mediante su elección subsiguiente por libre albedrío, si elige seguir el camino paterno de ascensión mortal. Aquí los niños aparecen como en el mundo de su natalidad excepto que no hay diferenciación sexual. No existe reproducción del tipo mortal después de la experiencia de vida en los mundos habitados.» LU 45:6.7
«En el primer mundo de estancia todos los sobrevivientes deben pasar los requisitos de la comisión de progenitores de sus planetas nativos. La presente comisión de Urantia consiste en doce parejas de progenitores, recientemente llegadas, que han tenido la experiencia mortal de criar a tres o más hijos hasta la pubertad. El servicio en esta comisión es rotativo y en general tan sólo de diez años. Aquellos que no satisfacen a estos comisionados en cuanto a su experiencia de progenitor deben calificar ulteriormente sirviendo en los hogares de los Hijos Materiales de Jerusem o en parte en la guardería probatoria en el mundo de los finalistas.
«Pero sea cual fuere la experiencia de progenitor, los padres y las madres de los mundos de estancia que tienen hijos en la guardería probatoria, tienen toda la oportunidad de colaborar con los custodios morontiales de dichos niños en cuanto a su instrucción y capacitación. Estos padres tienen permiso para viajar allí y visitar hasta cuatro veces por año. Y una de las escenas más emocionantemente hermosas de toda la carrera ascendente es observar a los padres de los mundos de estancia abrazar a sus vástagos materiales en la ocasión de sus peregrinajes periódicos al mundo de los finalistas. Aunque uno de los progenitores o los dos puedan abandonar el mundo de estancia antes que el hijo, muy a menudo son contemporáneos durante una temporada.
«Ningún mortal ascendente puede escapar a la experiencia de criar hijos —los propios o los de otros— sea en los mundos materiales o posteriormente en el mundo de los finalistas en Jerusem. Los padres deben pasar por esta experiencia esencial tan ciertamente como las madres. Es una idea desafortunada y errónea de los pueblos modernos de Urantia que la crianza de los hijos sea en gran parte tarea de las madres. Los niños necesitan a sus padres tanto como a sus madres, y los padres necesitan de esta experiencia paternal tanto como las madres.» LU 47:1.4
«En los mundos de estancia los sobrevivientes mortales resurgidos reanudan su vida exactamente desde donde la interrumpieron cuando los sobrecogió la muerte. Cuando vas de Urantia al primer mundo de estancia, observarás un cambio considerable, pero si hubieras provenido de una esfera del tiempo más normal y progresiva, difícilmente notarías la diferencia excepto por el hecho de que poseerías un cuerpo diferente; el tabernáculo de carne y hueso se ha dejado atrás en el mundo de natividad.» LU 47:3.1
«Desde las salas de resurrección, procederás al sector Melquisedek, en el cual se te asigna residencia permanente. Luego se da comienzo a un período de diez días de libertad personal. Estás libre para explorar el vecindario inmediato de tu nuevo hogar y familiarizarte con el programa que te enfrenta. También tendrás tiempo de gratificar tu deseo de consultar el registro y de visitar a tus seres queridos y otros amigos terrestres que puedan haberte precedido a estos mundos. Al fin de tu período de diez días de tiempo libre comienzas el segundo paso en el viaje al Paraíso, porque los mundos de estancia son efectivamente esferas de capacitación, no meramente planetas de detención.» LU 47:3.6
«Aunque tengas cuerpo morontial, continúas, a través de todos estos siete mundos, comiendo, bebiendo y descansando. Compartes de la orden morontial de alimento, un reino de energía viviente desconocido en los mundos materiales. El cuerpo morontial utiliza plenamente tanto el alimento como el agua; no existe residuo de deshecho. Considera: el mundo de estancia número uno es una esfera muy material, que presenta los comienzos iniciales del régimen morontial. Aún estás muy cerca de la condición humana y no muy lejos de los puntos de vista limitados de la vida mortal, pero cada mundo revela un progreso definido. De esfera en esfera te vuelves menos material, más intelectual, y ligeramente más espiritual. El progreso espiritual es mayor en los últimos tres de estos siete mundos progresivos.» LU 47:4.6
«Un verdadero nacimiento de la conciencia cósmica toma lugar en el mundo de estancia número cinco; estás evolucionando un punto de vista universal. Éste es realmente un período de horizontes en expansión. La mente en expansión de los mortales ascendentes comienza a darse cuenta de que un destino estupendo y magnífico, excelso y divino, aguarda a todos los que completan la ascensión progresiva al Paraíso, que tan laboriosamente pero tan regocijada y auspiciosamente ha comenzado. Aproximadamente en este momento el mortal ascendente promedio comienza a manifestar un entusiasmo experiencial sincero por la ascensión a Havona. El estudio se está volviendo voluntario, el servicio altruista se torna natural, y la adoración, espontánea. Está naciendo un verdadero carácter morontial; una verdadera criatura morontial está evolucionando.» LU 47:7.5
«Ésta es una edad brillante para los mortales ascendentes y generalmente presencia la fusión perfecta de la mente humana con el Ajustador divino. En potencia, esta fusión puede haber ocurrido anteriormente, pero la identidad real y funcional muchas veces no se consigue hasta el tiempo de la estadía en el quinto mundo de estancia o aun en el sexto.
«La unión de la mente inmortal evolutiva con el Ajustador eterno y divino está señalada por la convocación seráfica del superángel supervisor para los sobrevivientes resucitados y del arcángel de registro para los que van al juicio el tercer día, y luego, en presencia de los asociados morontiales de dicho sobreviviente, estos mensajeros de confirmación dicen: «Éste es un hijo amado en quien tengo complacencia». Esta sencilla ceremonia marca el ingreso de un mortal ascendente a la carrera eterna de servicio al Paraíso.
«Inmediatamente en cuanto se confirma la fusión con el Ajustador, el nuevo ser morontial se presenta a sus semejantes por primera vez con su nuevo nombre y se le otorgan cuarenta días de retiro espiritual de toda actividad rutinaria para que comulgue con sí mismo y elija una de las rutas optativas para dirigirse a Havona, y seleccionar entre las técnicas diferenciales del logro del Paraíso.» LU 47:8.3 Lc 3:22. Ap 2:17.
«El personal del séptimo mundo de estancia se reúne en el mar de cristal para presenciar tu partida hacia Jerusem con estado de residente. Cientos o miles de veces puedes haber visitado Jerusem, pero siempre como huésped; nunca antes has procedido hacia la capital del sistema en compañía de un grupo de tus semejantes que se estuviesen despidiendo eternamente de la entera carrera en los mundos de estancia como mortales ascendentes. Pronto se os dará la bienvenida en el campo de recepción del mundo sede central como ciudadanos de Jerusem.» LU 47:9.4
«Juan el Revelador vio una visión de la llegada de una clase de mortales en avance desde el séptimo mundo de estancia a su primer cielo, las glorias de Jerusem. Registró: «Y vi como si fuese un mar de cristal entremezclado con fuego, y vi a aquellos que habían logrado la victoria sobre la bestia que originalmente los habitaba y sobre la imagen que persistía a través de los mundos de estancia y finalmente sobre la última marca y huella, de pie en el mar de cristal, con las arpas de Dios, cantando la canción de la liberación del temor y de la muerte». (Hay una comunicación espacial perfeccionada en todos estos mundos; y recibes estas comunicaciones en cualquier parte mediante el «arpa de Dios», un dispositivo morontial que compensa la inhabilidad de ajustar directamente el mecanismo sensorial morontial inmaduro a la recepción de las comunicaciones espaciales).
«Pablo también tuvo un visión del cuerpo de ciudadanos ascendentes de mortales en perfeccionamiento en Jerusem, pues escribió: «Pero vendréis al Monte Sion y a la ciudad del Dios vivo, la celestial Jerusalén, y a una innumerable multitud de ángeles, a la gran asamblea de Micael, y a los espíritus de los hombres justos que se están perfeccionando».» LU 47:10.2 Ap 15:2. Heb 12:22, 23.
«En los días de la carne mortal el espíritu divino reside en ti, casi como una cosa aparte —en realidad una invasión del hombre por el espíritu otorgado del Padre Universal. Pero en la vida morontial el espíritu se volverá una parte real de tu personalidad, y a medida que pasas sucesivamente a través de las 570 transformaciones progresivas, asciendes del estado material al estado espiritual de la vida de la criatura.
«Pablo supo de la existencia de los mundos morontiales y de la realidad del material morontial, pues escribió: «Poseen en los cielos una sustancia mejor y más duradera». Y estos materiales morontiales son reales, concretos, tal como «la ciudad tiene sus cimientos, cuyo constructor es Dios». Cada una de estas esferas maravillosas es «un país mejor, o sea, un país celestial».» LU 48:1.6 Heb 10:34; 11:10.
«La hilaridad del regocijo y el equivalente de la sonrisa son tan universales como la música. Existe un equivalente morontial y espiritual de la hilaridad y de la risa. La vida ascendente se divide aproximadamente por igual entre trabajo y recreación — suspensión de las tareas.
«La recreación celestial y el humor superhumano son muy diferentes de sus análogos humanos, pero todos nos permitimos en verdad alguna forma de ambos; y realmente hacen por nosotros, en nuestro estado, más o menos lo que el humor ideal es capaz de hacer por vosotros en Urantia. Los Compañeros Morontiales son patrocinadores hábiles de la recreación, y los ayudan con gran pericia los directores de reversión.» LU 48:4.1
«Tal vez entenderíais mejor el trabajo de los directores de reversión si los comparáramos con los tipos más elevados de los humoristas en Urantia, aunque sería una forma enormemente burda y un tanto desafortunada de intentar transmitir la idea de la función de estos directores de cambio y recreación, estos ministros del humor excelso de los reinos morontiales y los de espíritu.
«Al hablar del humorismo espiritual, dejadme deciros primero lo que no es. El humorismo espiritual no está nunca teñido de una acentuación de los infortunios de los seres débiles y falibles. Tampoco es jamás blasfemo de la rectitud y gloria de la divinidad. Nuestro humor comprende tres niveles generales de apreciación:
«1. Bromas de reminiscencias. Ocurrencias que nacen de los recuerdos de episodios basados en la propia experiencia de combate, lucha, y a veces temor, y frecuentemente tonta ansiedad infantil. Para nosotros, esta fase del humor deriva de la capacidad profunda y constante de extraer material de recuerdo del pasado para sazonar placenteramente y aligerar de otras maneras las pesadas cargas del presente.
«2. Humorismo corriente. La falta de sentido de mucho de lo que tan frecuentemente nos produce preocupaciones serias, el regocijo de descubrir la falta de importancia de muchas de nuestras ansiedades personales graves. Apreciamos mejor esta fase del humorismo cuando somos capaces de abandonar las ansiedades del presente en favor de las certezas del futuro.
«3. Regocijo profético. Tal vez sea difícil para los mortales visualizar esta fase del humorismo, pero obtenemos una satisfacción específica de la certeza de que «todas las cosas funcionan para el bien» —para los espíritus y los seres morontiales así como también para los mortales. Este aspecto del humorismo celestial nace de nuestra fe en la protección amante de nuestros superiores y en la estabilidad divina de nuestros Directores Supremos.» LU 48:4.3
«Cuando tenemos la tentación de magnificar nuestra propia importancia, si nos detenemos para contemplar la infinitud de la grandeza y magnitud de nuestros Hacedores, nuestra propia autoglorificación se torna sublimemente ridícula, lindando aun con lo cómico. Una de las funciones del humorismo consiste en ayudarnos a todos a que nos tomemos menos en serio. El humorismo es el antídoto divino contra la exaltación del ego.
«La necesidad de la recreación y diversión del humorismo es mayor en aquellas órdenes de seres ascendentes sometidas a una tensión sostenida en sus luchas hacia arriba. Los dos extremos de la vida tienen poca necesidad de recreación humorística. Los hombres primitivos no tienen capacidad para el humorismo, y los seres de perfección paradisiaca no tienen necesidad del mismo. Las huestes de Havona constituyen por naturaleza una agrupación regocijada y alegre de personalidades supremamente felices. En el Paraíso la calidad de la adoración elimina la necesidad de las actividades de reversión. Pero entre aquellos que comienzan sus carreras muy por debajo del objetivo de la perfección paradisiaca, hay amplio lugar para el ministerio de los directores de reversión.» LU 48:4.15
«El humorismo debe funcionar como válvula automática de seguridad para prevenir la acumulación de presiones excesivas debidas a la monotonía de una autocontemplación sostenida y grave asociada con la intensa lucha por el progreso evolucionario y el logro elevado. El humor funciona también para disminuir la impresión del impacto inesperado del hecho o de la verdad, del hecho rígido y de la verdad flexible y eternamente viva. La personalidad mortal, que no está nunca segura de lo que encontrará en lo próximo, capta rápidamente a través del humorismo —llega al objetivo y logra el esclarecimiento— la naturaleza inesperada de la situación, sea ésta hecho o verdad.
«Aunque el humor de Urantia es excesivamente burdo y casi sin arte, sirve un propósito valioso tanto como seguro de salud como en calidad de liberador de la presión emocional, previniendo de este modo una tensión nerviosa dañina y una autocontemplación excesivamente seria. El humor y el juego —la relajación— no son nunca reacciones del esfuerzo progresivo; son siempre los ecos de una mirada hacia atrás, un recuerdo del pasado. Aun en Urantia y así como sois ahora, siempre halláis una sensación rejuvenecedora cuando podéis suspender por un corto período los esfuerzos de las luchas más nuevas y elevadas intelectuales y revertir a las ocupaciones más simples de vuestros antepasados.» LU 48:4.18
«Aun en Urantia aconsejan a los maestros humanos de la verdad y la rectitud que adhieran a la predicación de «la bondad de Dios, que lleva al arrepentimiento», para proclamar «el amor de Dios, que elimina todo temor». Aun así se han declarado estas verdades en vuestro mundo:
«Los Dioses son mis pastores; no me descarriaré;
«De la mano me conducirán por los bellos y gloriosos senderos refrescantes de la vida eterna.
«Ante esta presencia divina no careceré de alimento ni tendré sed de agua.
«Aunque descienda al valle de la incertidumbre o ascienda a los mundos de la duda,
«Aunque camine en soledad o con los semejantes de mi clase,
«Aunque triunfe en los coros de la luz o trastabille en los ámbitos solitarios de las esferas,
«Tu buen espíritu me ministrará, y tu ángel glorioso me confortará.
«Aunque descienda a las profundidades de la obscuridad y de la muerte misma,
«No dudare de ti, ni te temeré,
«Porque sé que en la plenitud del tiempo y en la gloria de tu nombre
«Me elevarás hasta sentarme junto a ti en los almenajes de las alturas.» LU 48:6.8
«No hace mucho tiempo, mientras me hallaba ejecutando una asignación en el primer mundo de estancia de Satania, tuve ocasión de observar este método de enseñanza; y aunque no es permisible que presente el contenido mota de la lección, se me permite registrar las veintiocho declaraciones de la filosofía humana que este instructor morontial estaba utilizando como material de ilustración designado para ayudar a estos nuevos habitantes del mundo de estancia en sus primeros esfuerzos por captar el significado y el sentido de mota. Estas ilustraciones de la filosofía humana fueron:
«1. La exhibición de pericia especializada no significa posesión de capacidad espiritual. El ingenio no es un sustituto del carácter auténtico.
«2. Pocas personas viven a la altura de la fe que realmente tienen. El temor sin raciocinio es un poderoso fraude intelectual practicado sobre el alma mortal en evolución.
«3. No se pueden exceder las capacidades inherentes; una botella de medio litro no podrá contener jamás un litro. El concepto espiritual no puede ser forzado en forma mecánica dentro del molde de la memoria material.
«4. Pocos mortales se atreven jamás a sumar los créditos de la personalidad establecidos por el ministerio combinado de la naturaleza y de la gracia. La mayoría de las almas empobrecidas son en verdad ricas, pero se niegan a creerlo.
«5. Las dificultades pueden desafiar la mediocridad y derrotar al temeroso, pero sirven de estímulo para los verdaderos hijos de los Altísimos.
«6. Disfrutar de privilegio sin abuso, contar con libertad sin libertinaje, poseer poder y no utilizarlo nunca para el propio engrandecimiento —estas son las señas de la civilización elevada.
«7. No ocurren accidentes ciegos e impredecibles en el cosmos. Tampoco ayudan los seres celestiales a los seres inferiores que se niegan a guiarse por su luz de la verdad.
«8. El esfuerzo no siempre produce el deleite, pero no hay felicidad sin esfuerzo inteligente.
«9. La acción logra la fuerza; la moderación resulta en el encanto.
«10. La rectitud hace sonar las cuerdas armónicas de la verdad, y la melodía vibra a través del cosmos hasta el reconocimiento del Infinito.
«11. Los débiles se permiten resoluciones, pero los fuertes actúan. La vida no es sino un día de trabajo —hacedlo bien. La acción es nuestra; las consecuencias, de Dios.
«12. La mayor aflicción del cosmos consiste en jamás haber tenido aflicciones. Los mortales tan sólo aprenden la sabiduría a través de la experiencia de las tribulaciones.
«13. Las estrellas se disciernen mejor en el aislamiento solitario de las profundidades experienciales, y no desde las cimas iluminadas y estáticas de las montañas.
«14. Estimulad el apetito por la verdad de vuestros asociados; ofreced consejo tan sólo cuando se os pide.
«15. La afectación es el esfuerzo ridículo de los ignorantes por parecer sabios, el intento del alma estéril por parecer rica.
«16. No podéis percibir la verdad espiritual hasta tanto no la experimentéis con los sentimientos, y muchas verdades no son realmente sentidas excepto en las adversidades.
«17. La ambición es peligrosa hasta que no se la socializa plenamente. No habréis adquirido en verdad virtud alguna hasta tanto vuestras acciones no os hagan merecedores de ella.
«18. La impaciencia es un veneno del espíritu; la ira es como una piedra arrojada en un nido de avispas.
«19. Abandonad toda ansiedad. Los desencantos más difíciles de soportar son los que no llegan nunca.
«20. Sólo un poeta puede discernir poesía en la prosa común de la existencia rutinaria.
«21. La misión elevada de todo arte es, mediante sus ilusiones, anticipar una realidad universal más elevada, cristalizar las emociones del tiempo en el pensamiento de la eternidad.
«22. El alma en evolución no se vuelve divina por lo que haga, sino por lo que trata de hacer.
«23. La muerte nada agregó a la posesión intelectual ni a la dote espiritual, pero agregó al estado experiencial la conciencia de la supervivencia.
«24. El destino de la eternidad está determinado de momento en momento por los logros del vivir de día en día. Las acciones de hoy son el destino de mañana.
«25. La grandeza yace no tanto en poseer fuerza como en hacer un uso sabio y divino de dicha fuerza.
«26. El conocimiento tan sólo se posee si se lo comparte; está protegido por la sabiduría y es socializado por el amor.
«27. El progreso exige el desarrollo de la individualidad; la mediocridad busca la perpetuación en la estandarización.
«28. La defensa argumentativa de cualquier posición es inversamente proporcional a la verdad que contiene.
«Ésta es la tarea de los principiantes en el primer mundo de estancia, mientras que otros alumnos más avanzados en los mundos siguientes comienzan a dominar los niveles más elevados del discernimiento cósmico y de la mota morontial.» LU 48:7.2
«Las etapas iniciales de la evolución de la vida no están totalmente en conformidad con vuestros puntos de vista de hoy en día. El hombre mortal no es un accidente evolucionario. Existe un sistema preciso, una ley universal, que determina el desarrollo del plan de vida planetario en las esferas del espacio. El tiempo y la producción de grandes números de especies no constituyen las influencias controladoras. Los ratones se reproducen mucho más rápidamente que los elefantes, sin embargo los elefantes evolucionan más rápidamente que los ratones.» LU 49:1.6
«A primera vista parecería que Urantia y los mundos aislados asociados fueran altamente desafortunados por haber sido privados de la presencia y la influencia benéficas de personalidades superhumanas tales como el Príncipe Planetario y un Hijo e Hija Materiales. Pero el aislamiento de estas esferas ofrece a sus razas una oportunidad única para ejercer la fe y para desarrollar una calidad peculiar de confianza en la confiabilidad cósmica que no depende de la vista ni de otras consideraciones materiales. Es posible que resulte, finalmente, que las criaturas mortales que provienen de los mundos en cuarentena debido a la rebelión sean extremadamente afortunados. Hemos descubierto que muy pronto se confía a estos seres ascendentes numerosas asignaciones especiales en empresas cósmicas en las que una fe incuestionable y una confianza sublime son esenciales para su logro.» LU 50:7.1
«En Jerusem los seres ascendentes de estos mundos aislados ocupan un sector residencial propio y se les conoce con el nombre de agondonters, lo cual significa criaturas volitivas evolucionarias que pueden creer sin ver, perseverar cuando están aisladas, y triunfar sobre dificultades insuperables aun cuando están a solas. Este grupo funcional de los agondonteros persiste a través de la ascensión en el universo local y la travesía del superuniverso; desaparece durante la estadía en Havona, pero vuelve a reaparecer prontamente en el momento del logro del Paraíso y persiste definitivamente en el Cuerpo de la Finalidad Mortal. Tabamantia es un agondonter de estado finalista, habiendo sobrevivido de una de las esferas en cuarentena, comprendidas en la primera rebelión que sucedió en los universos del tiempo y del espacio.» LU 50:7.2
«Uno de los grandes logros de la edad del príncipe es esta restricción de la multiplicación de los individuos mentalmente defectuosos y socialmente ineptos. Mucho antes de la época de la llegada de los segundos hijos, los Adanes, la mayoría de los mundos se dedican seriamente a la tarea de la purificación de la raza, cosa que los pueblos de Urantia aún no han emprendido seriamente.
«Este problema del mejoramiento de la raza no es una empresa tan extensa si se lo ataca en esta edad inicial de la evolución humana. El período precedente de luchas tribales y dura competencia en la supervivencia racial ha eliminado la mayoría de las cepas anormales y defectuosas. Un idiota no tiene mucha oportunidad de supervivencia en una organización social tribal primitiva y guerrera. Es el falso sentimiento de vuestras civilizaciones parcialmente perfeccionadas el que fomenta, protege y perpetúa los linajes completamente defectuosos de las razas humanas evolucionarias.
«No es ternura ni altruismo prodigar compasión inútil a seres humanos degenerados, mortales anormales e inferiores insalvables. Existen aun en el más normal de los mundos evolucionarios suficientes diferencias entre los individuos y entre los numerosos grupos sociales como para proveer el ejercicio pleno de todos aquellos nobles rasgos de sentimiento altruista y ministerio mortal sin egoísmos, sin perpetuar a las cepas socialmente inadecuadas y moralmente degeneradas de la humanidad en evolución. Existe abundante oportunidad para el ejercicio de la tolerancia y la función del altruismo a favor de aquellos individuos desafortunados y necesitados que no han perdido irreparablemente su herencia moral ni destruido para siempre su derecho espiritual de nacimiento.» LU 52:2.10
«La progenie adánica no se amalgama nunca con los linajes inferiores de las razas evolucionarias. Tampoco consiste el plan divino en que se amalgamen los Adanes y Evas planetarios personalmente con los pueblos evolucionarios. Este proyecto de mejoramiento racial es tarea de su progenie. Pero la progenie del Hijo e Hija Materiales es movilizada por generaciones antes de que se inaugure el ministerio de amalgama racial.» LU 52:3.5
«En Urantia el establecimiento de este «camino nuevo viviente» fue asunto de hecho así como también de verdad. Por el aislamiento de Urantia en la rebelión de Lucifer se había suspendido el procedimiento por el cual los mortales pueden pasar, cuando mueren, directamente a las orillas de los mundos de estancia. Antes de los días de Cristo Micael en Urantia todas las almas dormían hasta las resurrecciones dispensionales o milenarias especiales.
Aun Moisés no tuvo el permiso para ir al otro lado hasta la ocasión de una resurrección especial, pues el Príncipe Planetario caído, Caligastia, estaba en contra de dicha liberación. Pero desde el día de Pentecostés, los mortales de Urantia nuevamente pueden proceder directamente a las esferas morontiales… LU 52:5.5 Heb 10:20.
«Si pudieras ser trasplantado de vuestro mundo atrasado y confuso a un planeta normal que vive ahora la edad después del autootorgamiento de un Hijo, pensarías que has sido trasladado al cielo de vuestras tradiciones. Difícilmente podrías creer que estás observando la evolución normal de una esfera mortal habitada por los seres humanos. Estos mundos están dentro de los circuitos espirituales de su reino, y disfrutan de todas las ventajas de las emisiones universales y de los servicios de reflexividad del superuniverso.» LU 52:6.8
«La administración física de un mundo durante esta edad requiere tan sólo una hora diaria por parte de todo individuo adulto; o sea, el equivalente de una hora urantiana. El planeta está en estrecho contacto con los asuntos universales, y su pueblo escucha las últimas emisiones con el mismo profundo interés que vosotros manifestáis ahora para con la última edición de vuestros periódicos diarios. Estas razas se ocupan de mil cosas de interés desconocido en vuestro mundo.
«Cada vez más, crece la lealtad planetaria auténtica al Ser Supremo. Generación tras generación, una proporción cada vez mayor de la raza sigue las reglas de los que practican la justicia y viven en la misericordia. Lentamente pero con seguridad el mundo está siendo ganado para el servicio regocijante de los Hijos de Dios. Las dificultades físicas y los problemas materiales se han solucionado en gran parte; el planeta está madurando para una vida avanzada y una existencia más establecida.» LU 52:7.6
«Ésta es la misma tierra renovada, la etapa avanzada planetaria, que el antiguo visionario visualizó cuando escribió: «‘Pues así como los nuevos cielos y la nueva tierra que yo crearé durarán ante mí, así también vosotros y vuestros hijos perduraréis; y sucederá que de una luna nueva a otra y de un sábado a otro, toda la carne adorará ante mí’, dice el Señor».» LU 52:7.12 Is 65:17; 66:22.
«No hace mucho tiempo, al describir las experiencias asociadas con el comienzo de la rebelión de Lucifer, Manotia dijo: «Pero el momento más embriagante fue la emocionante aventura relacionada con la rebelión de Lucifer cuando, en mi calidad de segundo comandante seráfico, me negué a participar en el proyecto de agravio a Micael; y los poderosos rebeldes intentaron destruirme por medio de las fuerzas de enlace que habían formado. Hubo un tremendo levantamiento en Jerusem, pero ni uno de los serafines leales sufrió daño.
««Cuando se produjo la falta de mi superior inmediato, a mí me tocó asumir el mando de las huestes angélicas de Jerusem como director titular de los confusos asuntos seráficos del sistema. Los Melquisedek me apoyaron moralmente, una mayoría de los Hijos Materiales me asistió hábilmente. Un enorme grupo de mi propia orden, me desertaron, pero los mortales ascendentes en Jerusem me apoyaron magníficamente.
««Habiendo sido automáticamente despedidos de los circuitos de la constelación por la secesión de Lucifer, dependíamos de la lealtad de nuestro cuerpo de información, que trasmitía los llamados de ayuda a Edentia desde el sistema cercano de Rantulia; y hallamos que el reino del orden, el intelecto de la lealtad, y el espíritu de la verdad eran inherentemente triunfadores sobre la rebelión, la autoaserción, y la así llamada libertad personal; pudimos proseguir hasta la llegada del nuevo Soberano del Sistema, el valioso sucesor de Lucifer. Inmediatamente después de ello, fui asignado al cuerpo de los síndicos Melquisedek de Urantia, tomando jurisdicción sobre las órdenes seráficas leales en el mundo del traicionero Caligastia, que había proclamado que su esfera formaba parte del sistema de nuevo proyecto de ‘mundos liberados y personalidades emancipadas’ propuesto en la infame Declaración de Libertad emitida por Lucifer en su llamado a las ‘inteligencias amantes de la libertad, librepensadoras, y visionarias, en los mundos mal gobernados y mal administrados de Satania’. »
«Este ángel aún sirve en Urantia, actuando como jefe asociado de los serafines.» LU 53:6.3
«Pasaron más de dos años de tiempo del sistema entre el comienzo de la «guerra en los cielos» y la instalación del sucesor de Lucifer. Pero finalmente llegó el nuevo Soberano al mar de cristal con su séquito. Me encontraba entre las reservas movilizadas en Edentia por Gabriel, y recuerdo bien el primer mensaje de Lanaforge al Padre de la Constelación de Norlatiadek. Decía: «No se ha perdido un solo ciudadano de Jerusem. Todos los mortales ascendentes sobrevivieron la dura prueba y surgieron de la comprueba crucial triunfadores y victoriosos». Y este mensaje llegó a Salvington, Uversa y el Paraíso, transmitiendo la certidumbre de que la experiencia de sobrevivir en la ascensión mortal es la mayor protección contra la rebelión y la salvaguardia más segura contra el pecado. Este noble grupo de mortales fieles de Jerusem sumaba 187.432.811.» LU 53:7.12
«De todos los problemas confusos que surgieron de la rebelión de Lucifer, ninguno ha ocasionado más dificultad que el fracaso de los mortales evolucionarios inmaduros para distinguir entre la verdadera libertad y la falsa libertad.
«La libertad verdadera es la búsqueda de las edades y la recompensa del progreso evolucionario. La libertad falsa es la decepción sutil del error del tiempo y del mal del espacio. La libertad duradera se basa en la realidad de la justicia —inteligencia, madurez, fraternidad y equidad.
«La libertad es una técnica autodestructora de la existencia cósmica cuando su motivación no es inteligente, es incondicionada, e incontrolada. La verdadera libertad está progresivamente relacionada con la realidad y es por siempre respetuosa de la equidad social, la justicia cósmica, la fraternidad universal, y las obligaciones divinas.
«La libertad es suicidio cuando se divorcia de la justicia material, la rectitud intelectual, la paciencia social, el deber moral, y los valores espirituales. La libertad no existe fuera de la realidad cósmica, y toda realidad de la personalidad es proporcional a sus relaciones con la divinidad.
«La autovoluntad sin frenos y la autoexpresión no regulada se igualan al egoísmo sin mitigación, la ausencia máxima de santidad. La libertad sin una conquista asociada y creciente del yo es una invención de la imaginación mortal egoísta. La libertad automotivada es una ilusión conceptual, una cruel decepción. El libertinaje que se enmascara en el manto de la libertad es el precursor de la esclavitud abyecta. » LU 54:1.1
«La locura de Lucifer fue tratar de hacer lo que no se puede hacer: saltarse el tiempo en un universo experiencial. El crimen de Lucifer fue el intento de privar a todas las personalidades en Satania de los derechos creativos, el acortamiento no reconocido de la participación personal de la criatura —participación de libre albedrío— en la larga lucha evolucionaria para lograr el estado de luz y vida tanto individual como colectivamente. Al hacer esto, este Soberano de antaño de vuestro sistema colocó el propósito temporal de su propia voluntad directamente en oposición al eterno propósito de la voluntad de Dios tal como se lo revela en el otorgamiento del libre albedrío para todas las criaturas personales. La rebelión de Lucifer amenazó así la usurpación máxima posible de la facultad del libre albedrío propia de los ascendenteros y los servidores del sistema de Satania —la amenaza de privar por siempre a cada uno de estos seres de la experiencia emocionante de contribuir algo personal y único al monumento de lenta construcción a la sabiduría experiencial que algún día existirá como sistema perfeccionado de Satania. Así pues el manifiesto de Lucifer, enmascarado en los mantos de la libertad, se presenta a la luz clara de la razón como una amenaza monumental, en consumación del hurto de la libertad personal, y hecho en una escala que tan sólo dos veces se ha visto en toda la historia de Nebadon.» LU 54:2.3
«Las criaturas volitivas morales de los mundos evolucionarios siempre se han preocupado por la pregunta irreflexiva de por qué los Creadores omnisapientes permiten el mal y el pecado. No comprenden que ambos son inevitables si la criatura ha de ser verdaderamente libre. El libre albedrío del hombre en evolución o del ángel exquisito no es un mero concepto filosófico, un ideal simbólico. La habilidad del hombre para elegir el bien y el mal es una realidad del universo. Esta libertad de elegir por sí mismo es una dote de los Gobernantes Supremos, y ellos no permitirán que ningún ser o grupo de seres prive a una sola personalidad en el vasto universo de esta libertad de otorgamiento divino —ni siquiera para satisfacer a estos seres desviados e ignorantes en el disfrutar de esta mal llamada libertad personal.
«Aunque la identificación consciente e incondicionada con el mal (pecado) es el equivalente de la no existencia (aniquilación), siempre debe intervenir entre el momento de dicha identificación personal con el pecado y la ejecución de la pena —el resultado automático de dicho abrazo volitivo del mal— un período de tiempo de suficiente longitud como para permitir que la adjudicación del estado universal de dicho individuo se compruebe enteramente satisfactoria para todas las personalidades universales relacionadas, y que sea tan justa y recta como para ganar la aprobación del pecador mismo.» LU 54:3.1
«Otro problema un tanto difícil de explicar en la constelación de Norlatiadek pertenece a las razones que permitieron que Lucifer, Satanás y los príncipes caídos hicieran el mal por tanto tiempo antes de que se les arrestara, internara y juzgara.
«Los padres, aquellos que han engendrado y criado a hijos, son capaces de comprender mejor por qué Micael, un padre Creador, pueda ser lento en la condena y destrucción de sus propios Hijos. La historia del hijo pródigo que narrara Jesús ilustra muy bien de qué manera un padre amante puede esperar por mucho tiempo hasta que el hijo descarriado se arrepienta.
«El hecho mismo de que una criatura que hace el mal pueda verdaderamente elegir hacer el error —cometer pecado— establece el hecho del libre albedrío y justifica plenamente la demora de cualquier longitud en la ejecución de la justicia siempre y cuando la misericordia extendida pueda conducir al arrepentimiento y la rehabilitación.
«Lucifer ya poseía la mayor parte de las libertades que buscó; otras las recibiría en el futuro. Perdió todos estos dones preciosos por dar paso a la impaciencia y some-terse al deseo de poseer lo que uno anhela ahora y poseerlo en desafío de toda obligación de respeto de los derechos y libertades de todos los demás seres que componen el universo de los universos. Las obligaciones éticas son innatas, divinas y universales.» LU 54:4.1
«El tiempo, aun en un universo temporal, es relativo: si un mortal de Urantia de una vida de longitud promedio cometiese un crimen que precipitara un pandemonio mundial, y si se le arrestara, se le llevara ante los tribunales, se le juzgara y se le ejecutara a los dos o tres días de cometer el crimen, ¿os parecería a vosotros mucho tiempo? Y sin embargo eso se acercaría más, comparativamente, a la duración de la vida de Lucifer, aun si su juicio, ya iniciado, no se completara en cien mil años urantianos. El valor relativo del período de tiempo desde el punto de vista de Uversa, en donde la causa está pendiente, podría ilustrarse diciendo que el crimen de Lucifer fue llevado a tribunales dentro de dos segundos y medio de haberlo cometido. Desde el punto de vista del Paraíso, el juicio es simultáneo al acto.» LU 54:5.13
«Pero debemos aclarar una cosa: si se te obliga a sufrir las consecuencias dañinas del pecado de un integrante de tu familia, un conciudadano o un semejante mortal, aun de la rebelión en el sistema o en otra parte —sea lo que fuere lo que te veas obligado a soportar debido a la maldad de tus asociados, semejantes o superiores— puedes estar seguro de la certidumbre eterna de que dichas tribulaciones son aflicciones transitorias. Ninguna de estas consecuencias relacionadas de la mala conducta en el grupo puede poner jamás en peligro tu futuro eterno ni privarte en lo más mínimo de tu derecho divino a la ascensión al Paraíso y al logro de Dios.» LU 54:6.4
«Y existe una compensación para estas tribulaciones, demoras y desencantos que invariablemente acompañan al pecado de la rebelión. De las muchas repercusiones valiosas de la rebelión de Lucifer que podrían mencionarse, tan sólo llamaré la atención sobre las carreras enaltecidas de aquellos mortales ascendentes, los ciudadanos de Jerusem, que, por resistir a los sofismas del pecado, se colocaron en línea para volverse futuros Mensajeros Poderosos, semejantes a mi propia orden. Todo ser que pudo resistir ese episodio malvado inmediatamente avanzó su estado administrativo y elevó su valor espiritual.» LU 54:6.5
«Al principio, el sublevamiento de Lucifer pareció una calamidad sin mitigaciones para el sistema y para el universo. Gradualmente comenzaron a acumularse los beneficios. Con el paso de veinticinco mil años de tiempo del sistema (veinte mil años de tiempo de Urantia), los Melquisedek comenzaron a enseñar que la bondad resultante de la locura de Lucifer había comenzado a igualar el mal incurrido. La suma del mal se había vuelto en esa época casi estacionaria, continuando a aumentar sólo en ciertos mundos aislados, mientras que las repercusiones beneficiosas continuaban multiplicándose y extendiéndose a través del universo y del superuniverso, aun hasta Havona. Los Melquisedek enseñan ahora que lo bueno que resultó de la rebelión de Satania es más de mil veces la suma de todo lo malo.» LU 54:6.6
«La presencia del templo morontial en la capital de un mundo habitado es el certificado de admisión de dicha esfera a las edades establecidas de luz y vida. Antes de que los Hijos Instructores abandonen un mundo, cuando concluye su misión terminal, inauguran esta época final de logro evolucionario; presiden ese día en que «el templo sagrado desciende a la tierra». Este acontecimiento, que señala los albores de la era de luz y vida, se ve siempre honrado con la presencia personal del Hijo Paradisiaco autootorgador en ese planeta, que concurre para presenciar este gran día. Ahí, en este templo de belleza incomparable, este Hijo autootorgador Paradisiaco proclama al antiguo Príncipe Planetario como el nuevo Soberano Planetario, otorgando a ese fiel Hijo Lanonandek nuevos poderes y mayor autoridad sobre los asuntos planetarios. El Soberano del Sistema también está presente y confirma estas declaraciones.
«Un templo morontial está constituido de tres partes: en la parte central está el santuario del Hijo Paradisiaco autootorgador. A la derecha se encuentra el asiento del ex-Príncipe Planetario, ahora Soberano Planetario; y cuando se encuentra presente en el templo, este Hijo Lanonandek es visible para los individuos más espirituales del reino. A la izquierda se encuentra el asiento del jefe interino de los finalistas vinculados al planeta.» LU 55:1.2
«Estos templos morontiales también sirven como sitios de congregación para presenciar el traslado de los mortales vivientes a la existencia morontial. Precisamente debido al hecho de que el templo de traslado está compuesto de material morontial, no se desintegra en la gloria flameante del fuego devorador que oblitera tan completamente los cuerpos físicos de aquellos mortales que ahí experimentan la fusión final con sus Ajustadores divinos. En un mundo grande, estas llamas de traslado son casi continuas, y a medida que aumenta el número de traslados, se proveen santuarios subsidiarios de vida morontial en diferentes zonas del planeta. No hace mucho tiempo estuve en un mundo en el lejano norte en el cual funcionaban veinticinco santuarios morontiales.
«En los mundos todavía no establecidos, planetas sin templos morontiales, estas llamas de fusión muchas veces ocurren en la atmósfera planetaria, en la que el cuerpo material de un candidato para el traslado es elevado por los seres intermedios y los controladores físicos.» LU 55:1.1
«La muerte física natural no es una inevitabilidad mortal. La mayoría de los seres evolucionarios avanzados, ciudadanos de mundos que existen en la era final de luz y vida, no mueren; son trasladados directamente de la vida en la carne a la existencia morontial.
«Esta experiencia de traslado desde la vida material al estado morontial —fusión del alma inmortal con el Ajustador residente— aumenta en frecuencia paralelamente al progreso evolucionario del planeta. Al principio, sólo unos pocos mortales en cada edad logran los niveles de traslado espiritual, pero con la llegada de las edades sucesivas de los Hijos Instructores, ocurren más y más fusiones con el Ajustador antes de la terminación de las vidas cada vez más prolongadas de estos mortales progresores; y al tiempo de la misión terminal de los Hijos Instructores, aproximadamente un cuarto de estos magníficos mortales está exento de la muerte natural.» LU 55:2.1
«Una vez que la familia, los amigos y el grupo de trabajo de dicho candidato para la fusión se han congregado en el templo morontial, se los distribuye alrededor del escenario central en el que descansan los candidatos para la fusión, quienes departen libremente con sus amigos reunidos. Se forma un círculo intermedio de personalidades celestiales para proteger a los mortales materiales de la acción de las energías que se manifiestan en el instante del «destello de vida» que libera al candidato para la ascensión de las cadenas de la carne material, haciendo de este modo para dicho mortal evolucionario todo lo que la muerte natural hace para los que así son liberados de la carne.
«Se pueden congregar al mismo tiempo muchos candidatos para la fusión en el espacioso templo. ¡Qué bella ocasión cuando los mortales se reúnen así para presenciar la ascensión en llamas espirituales de sus seres queridos!, y ¡qué contraste con aquellas edades previas en las que los mortales deben entregar sus muertos al abrazo de los elementos terrestres! Las escenas de llantos y lamentos características de las épocas más primitivas de la evolución humana son reemplazadas ahora por la felicidad estática y el más sublime entusiasmo, mientras estos mortales que conocen a Dios se despiden temporalmente de sus seres queridos que al liberarse de sus asociaciones materiales mediante los fuegos espirituales de consumidora grandeza y gloria ascendente. En los mundos establecidos en luz y vida, «los funerales» son ocasiones de felicidad suprema, satisfacción profunda, y esperanza inexpresable.» LU 55:2.4 Ap 21:2-4.
«A medida que los mundos avanzan en el estado establecido de luz y vida, la sociedad se vuelve cada vez más pacífica. El individuo, aunque no menos independiente y dedicado a su familia, se ha vuelto más altruista y fraternal.
«En Urantia, y tal como sois, poco podéis apreciar del estado avanzado y la naturaleza progresiva de las razas esclarecidas de estos mundos perfeccionados. Estos pueblos son el florecimiento de las razas evolucionarias. Pero estos seres siguen siendo mortales; siguen respirando, comiendo, durmiendo y bebiendo. Esta gran evolución no es el cielo, pero es un sublime presagio de los mundos divinos de la ascensión al Paraíso.
«En un mundo normal, la idoneidad biológica de la raza mortal se ha llevado desde hace mucho tiempo a un nivel elevado durante las épocas postadánicas; y ahora, de edad en edad a través de las eras establecidas la evolución física del hombre continúa. Se amplían tanto la agudeza visual como la auditiva. Para esta época la población se ha vuelto estacionaria en número. La reproducción está regulada de acuerdo con los requisitos planetarios y las dotes hereditarias innatas: los mortales del planeta durante esta edad están divididos en cinco a diez grupos, y los grupos más bajos tan sólo tienen permiso para producir la mitad de los hijos que pueden producir los más elevados. El mejoramiento continuado de tan magnífica raza a lo largo de la era de luz y vida es en gran parte asunto de reproducción selectiva de aquellas cepas raciales que exhiben calidades superiores de naturaleza social, filosófica, cósmica y espiritual.» LU 55:6.1
«Éste es el relato del magnífico objetivo de la lucha mortal en los mundos evolucionarios; y todo ello ocurre aún antes de que los seres humanos entren en sus carreras morontiales; todo este espléndido desarrollo es lograble por parte de los mortales materiales en los mundos habitados, que constituyen la primera etapa de esa carrera sin fin e incomprensible de ascensión al Paraíso y logro de la divinidad.
«Pero ¿es que puedes imaginar qué clase de mortales evolucionarios aparecen ahora provenientes de los mundos que desde hace mucho tiempo existen en la séptima época de establecimiento de luz y vida? Son tales como éstos que concurren a los mundos morontiales de la capital del universo local para comenzar sus carreras de ascensión.
«Si los mortales de la perturbada Urantia tan sólo pudieran visualizar uno de estos mundos más avanzados largamente establecido en luz y vida, jamás volverían a dudar de la sabiduría del esquema evolucionario de creación. Aunque no existiese un futuro de progresión eterna para la criatura, aun entonces los soberbios logros evolucionarios de las razas mortales en dichos mundos establecidos de logro perfeccionado justificarían ampliamente la creación del hombre en los mundos del tiempo y del espacio.» LU 55:6.7
«Ninguno de nosotros tiene un concepto satisfactorio de qué ocurrirá cuando el gran universo (los siete superuniversos que dependen de Havona) se vuelva enteramente establecido en luz y vida. Ese acontecimiento indudablemente será el acontecimiento más profundo en los anales de la eternidad desde la aparición del universo central. Existen los que sostienen que el Ser Supremo mismo emergerá del misterio de Havona que envuelve su persona espiritual y residirá en la sede central del séptimo superuniverso como soberano todopoderoso y experiencial de las creaciones perfeccionadas del tiempo y del espacio. Pero realmente no lo sabemos.» LU 55:12.5
«DIOS es unidad. La Deidad está coordinada universalmente. El universo de universos es un vasto mecanismo integrado que está bajo el control absoluto de una mente infinita. Los dominios físico, intelectual y espiritual de la creación universal están divinamente correlacionados. Lo perfecto y lo imperfecto están verdaderamente interrelacionados, y por lo tanto la criatura evolucionaria finita asciende al Paraíso en obediencia al mandato del Padre Universal: «Sed perfectos, así como yo soy perfecto».» LU 56:0.1 Mt 5:48.
«La marcha incesante y expansiva de las fuerzas creadoras Paradisiacas a través del espacio parece presagiar el dominio en constante ampliación de la atracción gravitacionaria del Padre Universal y la multiplicación sin fin de los distintos tipos de criaturas inteligentes que son capaces de amar a Dios y ser amadas por él y que, al volverse así conocedoras de Dios, pueden elegir ser como él, pueden elegir alcanzar el Paraíso y encontrar a Dios.» LU 56:9.13
«A lo largo de esta gloriosa edad el anhelo principal de los mortales en constante avance es la búsqueda de una mejor comprensión y una realización más plena de los elementos comprensibles de la Deidad —verdad, belleza y bondad. Esto representa el esfuerzo del hombre por discernir a Dios en la mente, en la materia y en el espíritu. Y a medida que el mortal persigue esta búsqueda, se encuentra cada vez más sumergido en el estudio experiencial de la filosofía, la cosmología y la divinidad.
«Tal vez comprendéis algo de la filosofía, y la divinidad la comprendéis en la adoración, el servicio social, y la experiencia espiritual personal, pero la búsqueda de la belleza —cosmología— demasiado frecuentemente la limitáis al estudio de los burdos esfuerzos artísticos del hombre. La belleza, el arte, es en gran parte asunto de unificación de contrastes. La variedad es esencial para el concepto de la belleza. La belleza suprema, la cumbre del arte finito, es el drama de la unificación de la vastedad de los extremos cósmicos de Creador y criatura. El hombre en vías de encontrar a Dios y Dios en vías de encontrar al hombre —la criatura que se vuelve perfecta como su Creador— ése es el logro excelso de lo supremamente bello, el logro de la cúspide del arte cósmico.
«De aquí que el materialismo, el ateísmo, sea la maximación de la fealdad, la cúspide de la antítesis finita de lo bello. La belleza más elevada consiste en el panorama de la unificación de las variaciones que han nacido de la realidad armoniosa pre-existente.» LU 56:10.2
«La verdad es la base de la ciencia y la filosofía, y ofrece el cimiento intelectual para la religión. La belleza patrocina el arte, la música y los ritmos significativos de toda experiencia humana. La bondad comprende el sentido de la ética, moralidad y religión —hambre de perfección experiencial.» LU 56:10.10
«Aun la verdad, la belleza y la bondad —el acercamiento intelectual del hombre al universo de mente, materia y espíritu— deben estar combinados en un concepto unificado de un ideal divino y supremo. Así como la personalidad mortal unifica la experiencia humana con la materia, mente y espíritu, del mismo modo este ideal divino y supremo se vuelve poder-unificado en la Supremacía y luego personalizado como Dios de amor paterno.» LU 56:10.15