1. Entre los Dâmdâd [1] se encuentran detalles sobre el mantenimiento de la acción y la producción de las [ p. 14 ] criaturas benéficas. 2. Primero, en cuanto a la existencia espiritual, y cuánto y cómo se mantiene en la existencia espiritual; y la producción de la existencia mundana a partir de ella, cualificada y construida para descender (fitôdanŏ) al combate con el destructor, y cumplir con la necesidad asociada para el fin y la elusión (garang) de la destructividad.
3. La manera y especie de la creación de las criaturas; también su existencia material, y el carácter y uso de las razas y especies; y todo lo que se refiere al mismo tema. 4. La razón de su creación, y de su perfección final. 5. Sobre la adversidad, daño y miseria de esas criaturas, y sus recursos secretos (nîhônŏ) y medios para atacarlas y aniquilarlas; con_ la preservación o incapacitación (apîkârînîdanŏ) de las criaturas por medio de ello [2].
6. De la justicia la excelencia es la excelencia perfecta.
(13:6) Corresponde a la cuarta palabra, athâ, en el Ahunavair, pág. 14 según la Riv. BP; pero es el quinto Nask en otros Rivâyats. Dâmdâd significa «las criaturas producidas» y se le llama Dvâzdah-hâmâst (o humâst) en los Rivâyats, que también afirman que contenía treinta y dos kardah, o subdivisiones. El Dinkard no proporciona más detalles sobre este y los Nasks subsiguientes, más allá del contenido de este octavo Libro. ↩︎
(14:1) En cuanto a este breve relato del Dâmdâd, se corresponde muy bien con gran parte del contenido de los Bundahis. Zâd-sparam, en sus Selecciones, IX, 1, 16, también cita al Dâmdâd como la autoridad para ciertos detalles contenidos en el Bundahish, obra que, por lo tanto, debe considerarse derivada de este Nask. Sin embargo, es muy probable que el Nask contuviera mucha más información de la que aquí se insinúa, ya que el plan habitual del autor, en estos breves resúmenes, es evidentemente limitar sus comentarios a algunos detalles cerca del comienzo de cada Nask. ↩︎