Dos pesos atómicos indican la existencia de formas preelectrónicas de plomo, y la formación original pesaba un poco más que la producida por la desintegración del uranio. [1] Los primeros flujos de lava trajeron plomo, cobre y hierro a la superficie, arrugando el estrato fósil más antiguo de la Tierra. [2] El plomo se encuentra en depósitos silúricos junto con gas, petróleo y cinc, lo que representa la sedimentación de cuerpos de agua estancados. [3]