1. Oh bán árbol del valle, en la orilla del río de Bagdad!
2. Una paloma triste que arrullaba en una rama que se balanceaba me llenó de dolor por ti.
3. Su canto lastimero me recuerda al canto lastimero de la dama de la cámara.
4. Siempre que ella afine sus triples acordes, debes olvidar al hermano de al-Hádí.
5. Y si ella prodiga su melodía, ¿quién es Anjasha, el camellero?
6. Juro por Dhu ’l-Khaḍimát y luego por Sindád
7. Que estoy apasionadamente enamorado de Salmá, que habita en Ajyád.
8. No, me equivoco: ella habita en el coágulo negro de sangre en la membrana de mi hígado.
9. La belleza se confunde con ella, y los olores de almizcle y azafrán se esparcen por todas partes.
[p. 149]
1. ‘Oh bán árbol’, etc., es decir, el árbol de la luz en la estación del Quṭb.
2. ‘Una paloma triste’, es decir, un espíritu exaltado.
‘En una rama oscilante’, es decir, el organismo humano en la posición de autosubsistencia (###).
3. ‘La dama de la cámara’, es decir, toda realidad que ejerce dominio en su propio mundo.
4. ‘Sus cuerdas triples’, es decir, el cuerpo, con sus tres dimensiones, a saber, longitud, anchura y profundidad. Las ‘cuerdas triples’ también pueden referirse a los grados de los tres Nombres, que son la morada de los dos Imáms y el Quṭb.
‘Al-Hádí’, el califa abbásida. Su hermano era un buen músico.
5. ‘Anjasha’, un camellero contemporáneo del Profeta. Solía cantar tan dulcemente que los camellos morían. (Véase Nawawí, ed. por Wüstenfeld, 164.)
7. ‘Salmá’ (nombre de mujer), es decir, estación salomónica.
‘Ajyád’ (plural de ###, cuello), un lugar de La Meca. Aquí se refiere a la garganta por donde pasa el aliento.