El gobernante en funciones de Urantia está asistido por mil de ellos. [1]
Forman la cuarta orden de los Serafines y están asignados a las tareas administrativas de los sistemas locales. Son nativos de las capitales de los sistemas pero también se encuentran en las esferas arquitectónicas y en los mundos habitados. [2]
Se perdió a muchos de esta orden en la rebelión de Lucifer. Fue la orden más perjudicada. Manotia fue un ángel leal que logró salvar a dos tercios de ellos, pero un tercio se perdió. En Urantia la situación fue más desastrosa pues cerca de la mitad de los Serafines administradores apoyaron la causa de Lucifer. [3] Su residencia se encuentra en los círculos de Jerusem, en concreto en el cuarto círculo, y constituyen un grupo muy numeroso. [4]
Están organizados para el servicio de la manera siguiente:
Véase también: LU 39:4; LU 39:4.2.