La religión de Salem, reverenciada por los ceneos y otras tribus cananeas, preparó el terreno para la dádiva terrenal de un Hijo del único Dios. [1]
Moisés, educado como elshaddaísta, se convirtió en elelionista por medio de su suegro, mezclando las tradiciones de Melquisedec para crear un concepto ampliado de la Deidad para los hebreos. [2] Los ceneos, calebitas, jebuseos y otros cananeos —palestinos nómadas— se unieron al nuevo reino de David, Judá, en Hebrón. [3]
La descendencia de Abraham a través de Isaac, que se casó con los ceneos, fue la única que mantuvo un concepto claro de las enseñanzas de Salem, en las que Maquiventa Melquisedec siguió teniendo gran interés. [4]