Se llama generalmente gran universo a los siete superuniversos en evolución en asociación con el universo central y divino de Havona; éstas son las creaciones organizadas y habitadas actualmente. Todas forman parte del universo maestro, que engloba también a los universos del espacio exterior, deshabitados pero en vías de movilización. El gran universo tiene un potencial evolutivo total de unos siete billones de planetas habitados, sin incluir los mil millones de esferas eternas de la creación central ni las esferas arquitectónicas administrativas. [1] Los Ancianos de los Días y los Siete Espíritus Rectores están eternamente establecidos como administradores del gran universo. [2] Los siete grupos de Espíritus Supremos son los directores universales que coordinan la administración de los siete segmentos del gran universo. [3]
Los Supervisores Centrales Supremos, los siete coordinados y asociados de los Directores Supremos del Poder, son los reguladores de los circuitos energéticos maestros del gran universo. [4]
Havona y los siete superuniversos se necesitan mutuamente para alcanzar el máximo de consecución finita; y algún día los universos futuros del espacio exterior dependerán también del gran universo para trascender lo finito. [5]
Al igual que los mortales cuentan con la energía solar para mantenerse con vida, el gran universo depende de las energías inagotables que emanan del bajo Paraíso para sostener las actividades materiales y los movimientos cósmicos del espacio. [6]
El gran universo contiene la posibilidad de unificarse por completo, siendo algo que busca constantemente, y esto se deriva del hecho de que esta existencia cósmica es una consecuencia de los actos creativos y de los mandatos de poder de la Trinidad del Paraíso, que es la unidad incalificada. [7]
Su borde actual es irregular, su periferia es desigual y sin acabar, y todo el terreno astronómico es enormemente inestable. Los siete superuniversos están todavía por terminarse. [8]
El gran universo no es solamente una creación material de grandiosidad física, de sublimidad espiritual y de magnitud intelectual, sino que es también un organismo viviente magnífico y sensible. Igual que nosotros estamos atravesados por una red de nervios, el universo físico está impregnado de canales de energía que lo activan. El gran universo reacciona a la extensa atracción de la gravedad espiritual del Hijo Eterno. [9]
El número de nuestro mundo Urantia en el gran universo es el 5.342.482.337.666. Éste es el número con el que está registrado en Uversa y en el Paraíso, nuestro número en el catálogo de los mundos habitados. [10] El gran universo actual usa solo el 5% de la gravedad de la que es capaz el Paraíso. [11]