La primera operación paradisiaca que se registró en el Paraíso es la personificación del Espíritu Infinito. [1]
La primer inscripción que aparece en la sección sobre la personalidad en el Paraíso es el relato de la trinitización de los veintiún Ancianos de los Días. [2]
En un momento hipotético de la eternidad no existía ninguna diferenciación en toda la infinidad. Entonces El Uno Infinito se diferenció de La Infinidad incluso continuando como el continuum eterno YO SOY. Esto culmina en la múltiple diferenciación de la realidad a través de una relación séptuble de YO SOY consigo mismo. [3] Los filósofos del universo dan por sentado que la existencia del YO SOY en la eternidad es la fuente primordial de toda la realidad. [4]
Al igual que la diversificación original del YO SOY debe atribuirse a una volición inherente y autónoma, la promulgación de la realidad finita debe imputarse a los actos volitivos de la Deidad del Paraíso y a los ajustes repercusivos de las triunidades funcionales. [5]
El Hijo Eterno es la expresión perfecta y final del «primer» concepto personal y absoluto del Padre Universal. Se habla del «primer» pensamiento de Dios y se alude a un imposible origen del Hijo Eterno en el tiempo pero estos sucesos nunca ocurrieron en secuencia. [6]
En los albores de la eternidad, tanto el Padre como el Hijo se vuelven infinitamente conscientes de su mutua interdependencia, de su unidad eterna y absoluta; por consiguiente, establecen una alianza infinita y perpetua de asociación divina. Nos encontramos ahora frente a frente con el origen en la eternidad del Espíritu Infinito, la Tercera Persona de la Deidad. [7]
El Espíritu Infinito actúa y las bóvedas inertes del espacio se ponen en movimiento. Mil millones de esferas perfectas surgen de inmediato a la existencia. Antes de este momento hipotético de la eternidad, las energías espaciales inherentes al Paraíso ya existen y están potencialmente operativas, pero aún no se han manifestado. [8]
Urantia tiene su origen en nuestro Sol, y nuestro Sol es uno de los múltiples frutos de la nebulosa de Andronover, que en otro tiempo fue organizada como parte componente del poder físico y de la sustancia material del universo local de Nebadon. Andronover fue iniciado hace 875.000 millones de años. Hace 6.000 millones de años se desintegra Andronover y nace nuestro Sol. [9]
La historia de la creación de Urantia en seis días estaba basada en la tradición de Adán y Eva. Muchos grupos aceptaron esta historia de que el hombre había surgido del barro mediante alguna forma de creación especial. [10]
A causa de su contacto directo con los restos de la civilización de los adamitas, los babilonios ampliaron y embellecieron la historia de la creación del hombre, y enseñaron que el hombre había descendido directamente de los dioses. [11]
El relato de la creación en el Antiguo Testamento data de mucho tiempo después de la época de Moisés; éste nunca enseñó a los hebreos una historia tan deformada. [12]
En sus primeras enseñanzas, Moisés no intentó, con mucho juicio, remontarse más atrás de la época de Adán, y puesto que Moisés era el instructor supremo de los hebreos, las historias de Adán se asociaron íntimamente con las de la creación. [13]