Los maestros-registradores demuestran una maestría en la recopilación y coordinación inteligente de datos relacionados, colaborando con los artesanos celestiales e incluso con los mortales ascendentes. [1]
Los registros son esenciales para la dirección de los universos, permitiendo a los Ancianos de los Días mirar instantáneamente en ambos sentidos, oír en ambos sentidos y conocer en ambos sentidos. [2]
Los registros vivos de la ministración de misericordia, recopilados por la reflexividad, son los verdaderos registros espirituales preservados en las mentes vivientes de personalidades adecuadas. [3]
La historia comienza con la creación de Havona, el punto de partida tradicional del universo central eterno, sin que existieran registros antes de este acontecimiento de energía creativa y sabiduría. [4]
Los registros de las acciones de la vida humana son meticulosamente guardados por un par de querubines, en colaboración con sus guardianes seráficos. [5] Los registros vivientes que llevan los seconafines terciarios son cruciales para los juicios en los tribunales de Uversa. [6]
Los registros de la personalidad de los mortales se guardan en los mundos de los arcángeles para su conservación y clasificación hasta la hora de la repersonalización. [7] Los registros de las empresas mortales son patrocinados por uno de los miembros de la pareja de guardianes del destino. [8]
Los registros celestiales son verificados meticulosamente mediante una doble inspección por parte de individuos exaltados de Uversa y de Mensajeros Poderosos. [9] Los registradores celestiales pueden traducir más de medio millón de símbolos de pensamiento en un registro permanente en tan sólo un minuto. [10]
Todo suceso significativo del universo se registra meticulosamente, desde los acontecimientos locales hasta los de mayor importancia, y se almacena en los archivos cósmicos de Salvington, Uversa y el Paraíso, resguardados por seres celestiales. [11] Los registros están siempre abiertos a la consulta de todos los seres del universo. [12] Los registros de personalidad del universo comenzaron con la trinidización de los Ancianos de los Días en el Paraíso. [13] Los ángeles registradores planetarios son la fuente última de todos los registros individuales del vasto universo. [14] Todos los registros angélicos se conservan por triplicado en la sala de archivos de Jerusalén. [15]
Los registros espirituales vivos, reunidos por la reflexividad y preservados en las mentes, son el legado de los Espíritus Reflectantes y su prole, los seconafines. [16] El triple sistema seráfico de registros es mantenido por los Registradores en el templo de los registros en la capital del sistema. [17]