Los Organizadores de la Fuerza Maestra Primaria transmutan la potencia espacial en segregata, la fuerza primordial esencial para la creación y organización del gran universo. [1]
La fuerza primordial, también conocida como segregata, es la energía pura focalizada en el vasto centro de fuerza elíptico en los márgenes exteriores, relacionada con la potencia espacial y la fuerza-energía. [2] Las impredecibles libertades de reacción en las realidades emergentes del universo sugieren la presencia del Último y los Absolutos. [3]
La energía pura, antecesora de todas las realidades funcionales relativas y no espirituales, está unificada en la persona del Padre del Paraíso, demostrando la unidad absoluta de la personalidad de Dios. [4]
Los Organizadores de la Fuerza Primaria transmutan la energía primordial en energía poderosa, transfiriéndola del Absoluto No Cualificado a la Isla del Paraíso, donde la unificación de la gravedad es universal y la energía pura responde al control personal del Padre Universal. [5] La energía, formada a semejanza de 3 Dioses en 1, procede del orden divino del Paraíso. [6] La primera etapa de individuación de la absoluta en la forma pre-energética de la fuerza cósmica es análoga a las etapas pre-gravedad (fuerza). [7] El centro de fuerza elíptico en el Paraíso inferior está focalizado en la potencia espacial y la fuerza-energía. [8]
La excitación del contenido del espacio provoca reacciones ondulatorias en partículas que se mueven rápidamente, de manera similar a cómo un barco que pasa a través del agua crea olas, lo que sugiere un fenómeno similar al éter postulado. [9]
Las fases de transmutación al poder del universo involucran energías emergentes que transforman la potencia del espacio en fuerza primordial antes de aparecer como energía de gravedad. [10]
La pre-energía, inherente a los Absolutos, es transformada por los Organizadores de la Fuerza Maestra Primaria en energía primaria, que responde a la gravedad del Paraíso. [11] La fuerza primordial se vuelve activa y responde a la causalidad trascendental en correlación directa con la absolutez. [12]
Las realidades emergentes del universo reaccionan con una libertad impredecible de acuerdo con leyes estables desconocidas, posiblemente revelando la presencia del Último y los Absolutos. [13] La respuesta de energía pura, inherente a los Absolutos, está controlada universal e ineludiblemente por el Padre Personal en su morada supermaterial. [14]
Toda la fuerza-energía del universo está bajo el control personal del Padre Universal, lo que demuestra y prueba la existencia y presencia del Absoluto Universal. [15]