Una de las lecciones más importantes que tenéis que aprender durante vuestra carrera mortal es la del trabajo en equipo. [1]
El personal del Príncipe enseñó el trabajo en equipo. [2]
Una de las lecciones más importantes que tenemos que aprender durante nuestra carrera mortal es la del trabajo en equipo. En el universo hay pocas obligaciones para el servidor solitario. [3] En Jerusem aprenderemos a cooperar y planificar con otros seres más sabios ayudados por los serafines Estimuladores de la Moralidad. [4]
En Edentia adquiriremos la capacidad de cooperar voluntaria y eficazmente con vuestra propia orden de seres, en estrecha asociación de trabajo con un grupo de criaturas inteligentes un poco diferentes. [5]
La civilización depende mucho, muchísimo, de un espíritu de cooperación entusiasta y eficaz. [6]
No solamente los espíritus afines se sienten atraídos los unos hacia los otros, sino que las mentes afines son también muy fraternales y tienden a cooperar las unas con las otras. [7]
El matrimonio, la base para formar un hogar, es la manifestación más elevada de esa cooperación antagonista que caracteriza con tanta frecuencia los contactos entre la naturaleza y la sociedad. [8] En las civilizaciones avanzadas, la cooperación es más eficaz que la competencia. [9] Los mortales deberían cooperar con los administradores del universo. [10] La cooperación no es un rasgo natural del hombre. [11]
Las personas religiosas se unirán algún día y se pondrán a cooperar realmente sobre la base de la unidad de los ideales y los objetivos, en lugar de intentar hacerlo sobre la base de las opiniones psicológicas y de las creencias teológicas. [12] El trabajo en equipo, la cooperación social, depende de los dirigentes. [13]