A la cosmología hay que acercarse procediendo desde lo complejo y lo infinito a lo simple y finito. Si se hace al contrario se adquiere un conocimiento genético sobre el origen del hombre, pero no la sabiduría espiritual que revela el destino del hombre. [1]
La civilización está en peligro cuando la juventud deja de interesarse por la ética, la sociología, la eugenesia, la filosofía, las bellas artes, la religión y la cosmología. [2] La cosmología conduce a la búsqueda de los valores divinos de la realidad —a la conciencia de Dios. [3]
La cosmología que figura en las revelaciones de los documentos de Urantia no es inspirada. Está limitada por un permiso a los reveladores para coordinar y clasificar conocimiento ya existente, y está destinado a ser superado rápidamente. [4]