El bautismo era un ceremonial religioso en Babilonia. [1]
Debido a una sequía los anditas del sur y el este del mar Caspio se dirigieron hacia el sur, y su caballería de Babilonia empezó a entrar en Mesopotamia. [2]
La teología judía que sobrevivió era la que se interpretaba y se practicaba en Jerusalén, a pesar del hecho de que varias veces fue salvada del olvido gracias a la oportuna intervención de ciertos educadores de Babilonia. [3] En Babilonia, el dios Marduc era una perpetuación de la leyenda de Adán, la idea del hijo de Dios, el eslabón entre el hombre y Dios. [4] Pedro el apóstol viajó mucho visitando todas las iglesias desde Babilonia hasta Corinto. [5]
Véase también: LU 130:0.3; LU 134:1.1.