Las lealtades de los andonitas se limitaban a su clan inmediato. [1] Los clanes eran los grupos consanguíneos dentro de la tribu, y debían su existencia a ciertos intereses comunes, tales como: [2] Los clanes desempeñaron un valioso servicio en los gobiernos locales, pero retrasaron enormemente el desarrollo de naciones grandes y fuertes. [3] En épocas más tardías, muchos clanes tuvieron su origen en las asociaciones de profesionales y en otras asociaciones laborales. [4] Muchos clanes primitivos estuvieron a punto de exterminarse debido a la práctica conjunta del aborto y el infanticidio. [5] La idea antigua de la amistad significaba la adopción por parte del clan. [6] Los jefes pacíficos de los clanes gobernaban generalmente por la línea materna; los jefes guerreros de las tribus establecieron la línea paterna. [7] A pesar de su creencia en los espíritus, los australianos primitivos centran todavía su religión en el clan. [8]
Durante el feudalismo de la Edad Media europea el Estado territorial se desplomó y se produjo una reversión a los grupos pequeños de los castillos, a la reaparición de las etapas de desarrollo del clan y de la tribu. [9]
El hombre primitivo fortificaba sus viviendas y los clanes se solidificaban mediante el miedo mutuo y la inculcación del odio hacia los grupos exteriores. [10] Los Estados territoriales más grandes sostuvieron una larga lucha encarnizada contra los clanes consanguíneos más pequeños. [11]
Véase también: LU 70:4.