La era anterior al Príncipe Planetario marca el momento en que los hombres primitivos, evolucionando a través de diferentes razas, se dedican a la supervivencia física y al gobierno tribal, antes de la llegada de la guía divina y el desarrollo espiritual superior. [1]
A medida que se desarrolla el lenguaje, aparecen seis razas de color desde el momento en que los hombres primitivos surgen y eligen adorar al Creador hasta la llegada del Príncipe Planetario. [2] Los hombres primitivos surgen del nivel animal, y duran de 150.000 a 1.000.000 de años antes de la llegada del Príncipe Planetario. [3] La era del hombre primitivo es un capítulo largo, oscuro y sangriento en los anales de las épocas planetarias. [4]
Todos los mortales son adoradores potenciales, que poseen la capacidad de buscar el contacto con la divinidad, a pesar de la persistencia del miedo, el asombro y la superstición en las religiones primitivas. [5]
La época planetaria de Urantia terminó con el primer pase de lista dispensacional a la llegada del Príncipe, lo que marcó un nuevo comienzo para la vida en la Tierra. [6]
Las razas evolutivas de Urantia han durado casi un millón de años, desde los días de Andón y Fonta hasta el fin de la edad de hielo, y la raza humana tiene casi un millón de años. [7]
La era post Príncipe Planetario marca un período de progreso social significativo y el establecimiento de la vida familiar en un mundo habitado, conduciendo al amanecer de la edad de oro del hogar. [8] Durante las épocas planetarias, los Ajustadores llegan en cantidades cada vez mayores para la administración y supervisión de los mortales. [9]
La agricultura aparece durante el crecimiento de las viviendas sedentarias, conduciendo al establecimiento de la domesticación y las artes domésticas, culminando finalmente en un alto nivel de civilización antes de la era de la invención. [10]
Con la llegada del Príncipe Planetario, el gobierno aparece en la Tierra, marcando el logro de la época tribal avanzada y conduciendo a grandes avances sociales y a un alto estado de civilización en unos pocos miles de años. [11] Mansant fue un gran maestro de resurgimientos culturales y espirituales durante los días post Príncipe Planetario. [12]
Durante la dispensación de un Príncipe Planetario, las razas son llevadas a la perfección física antes de la llegada de la segunda orden de filiación, los elevadores biológicos. [13]
La gran era de dispersión racial culmina en un período de intenso nacionalismo, alimentado por agrupaciones tribales y nacionales basadas en el color y el desarrollo de idiomas separados, que conducen a la segregación y a la extinción ocasional de pueblos enteros. [14] La segunda época planetaria de Urantia comenzó con la resurrección de los sobrevivientes durmientes en el año 606 de Satania. [15]
Las razas evolutivas de Urantia comenzaron hace casi un millón de años, con la aparición de las razas de color, consideradas como la antigua edad de piedra. [16] La época planetaria normalmente dura 500.000 años, durante los cuales los ayudantes celestiales guían y supervisan el progreso mortal. [17]
La era post-adánica marca la finalización de la dispensación de los elevadores biológicos y el inicio de una nueva era de progreso intelectual y espiritual en los mundos evolutivos. [18]
La 1ª Mansonia está diseñada para desarrollar a los sobrevivientes mortales hasta el nivel de la dispensación post-adánica, con un avance espiritual significativo más allá del mero desarrollo humano. [19]
El plasma vital adánico eleva inmediatamente la capacidad intelectual del hombre, acelerando el progreso espiritual y conduciendo a una gran invención y control de la energía durante la dispensación post-adánica. [20]
Se otorgan cada vez más Ajustadores a los hombres post-adánicos, permitiéndoles alcanzar la capacidad de fusión con los Monitores Misteriosos al final de la era post-adánica. [21]
La dispensación post-adánica es una era de gran invención, exploración e iluminación intelectual, que marca el comienzo de una era dorada de progreso y descubrimiento en un planeta normal. [22]
La época postadánica anuncia la dispensación del internacionalismo, en la que el nacionalismo se desvanece a medida que el gobierno representativo y un sistema educativo global preparan el terreno para la paz y la cooperación universales mediante un lenguaje común. [23]
El régimen adánico guía a la humanidad desde la caza y la ganadería hasta la agricultura, el urbanismo y la industria, durante milenios bajo la supervisión de seres celestiales. [24] Cuando Jesús se encontraba ante ellos en ese momento, percibió el fin de una dispensación y el comienzo de otra. [25]
Al final de la dispensación adánica, las razas están prácticamente mezcladas hasta adquirir un tono violeta oliva, encarnando la unidad proclamada por Dios y Su Hijo. [26]
La época planetaria de Urantia terminó con el tercer pase de lista tras la resurrección de Jesús, lo que marcó un nuevo comienzo para los Seres Intermedios Unidos y el establecimiento de la dispensación del Espíritu de la Verdad otorgado. [27]
El régimen adánico guía la transición de la humanidad desde la civilización de cazadores-recolectores a la civilización agrícola a lo largo de 10.000 años, y se necesitan otros 25.000 años para la llegada de un Hijo Magisterial. [28] Durante las épocas planetarias, la eliminación de los no aptos conduce a la purificación de las cepas raciales. [29]
La era post-Hijo Magisterial en los planetas normales y leales es testigo del florecimiento de la hermandad del hombre, de la vida en paz de las naciones y de la culminación del desarrollo intelectual a medida que las razas alcanzan la liberación económica, el autogobierno y el avance social. [30]
El desarrollo en la 2.ª Mansonia se compara con la cultura post-Hijo Magisterial en lo que respecta a la curación de la desarmonía mental y el dominio de la mota morontial. [31]
A medida que la sociedad vuelve a la simplicidad, la era del arte, la música y el aprendizaje superior alcanza su apogeo antes de que un despertar espiritual global marque el comienzo de la siguiente época planetaria. [32]
En esta época planetaria, los Ajustadores de fusión aún no han sido otorgados universalmente a todas las criaturas volitivas, que aún deben elegir a los Monitores Misteriosos. [33]
Las épocas planetarias varían de 25.000 a 50.000 años, con la posibilidad de ser más cortas o más largas, culminando en el nacimiento de un Hijo Magisterial como donación paradisíaca. [34]
Muchas épocas planetarias están marcadas por múltiples misiones de Hijos Magisteriales que hacen avanzar a las razas de una dispensación a otra hasta que el planeta está listo para el Hijo otorgado. [35] La época planetaria comenzó con razas mezcladas y aptas, fomentando la paz y la unidad entre todas las naciones. [36]
Después de la visita del Hijo Magisterial, las razas alcanzan rápidamente la liberación económica mediante el trabajo diario sostenible, utilizando el tiempo libre para la autosuperación, en medio de más medidas de purificación racial. [37]
En las eras finales de una dispensación, la sociedad comienza a adoptar una forma de vida más sencilla, que culmina en un gran despertar espiritual y la llegada de la quinta época mortal. [38]
A medida que la sociedad vuelve a una vida más sencilla, las ciencias físicas han alcanzado su apogeo, allanando el camino para una era de iluminación artística y espiritual en las épocas planetarias. [39]
Durante las eras finales de esta dispensación, la sociedad vuelve a una vida más sencilla a medida que surge una iluminación espiritual mundial en la era del arte, la música y el conocimiento superior. [40]
La era post-Hijos Autootorgados significa una época de gran progreso ético y espiritual, donde el carácter humano experimenta tremendas transformaciones y un desarrollo fenomenal, que conduce a la aplicación práctica de las enseñanzas de Jesús en un mundo mortal. [41]
La tercera época de Mansonia inicia un profundo crecimiento personal y social, fomentando una comprensión más profunda de los conceptos cósmicos y las conexiones universales. [42] Durante esta época planetaria, las enfermedades y la delincuencia están casi erradicadas, ya que la esperanza de vida promedio sobrepasa los 300 años. [43]
En esta época planetaria, las enfermedades y la delincuencia están prácticamente eliminadas, gracias a los avances en la reproducción selectiva, la ciencia y la longevidad. [44]
La era post-Hijos Autootorgados, que dura de 10.000 a 100.000 años, es una época de progreso ético y espiritual donde el carácter humano experimenta tremendas transformaciones bajo la influencia espiritual de estas eras. [45]
En esta época de armonía internacional, donde las naciones se determinan por la distribución de la tierra, hay sólo una raza, un idioma y una religión, lo que marca el comienzo de una era casi utópica con un verdadero autogobierno y una mínima necesidad de leyes restrictivas. [46] La donación de Miguel en Urantia marcó un acontecimiento poco común y significativo en la espiritualización de los planetas. [47]
En Urantia, el Hijo autootorgador no trajo el reinado habitual de paz, sino que más bien advirtió contra «guerras y rumores de guerras» que perturbarían la procesión planetaria hacia la hermandad mundial. [48]
La llegada del Hijo autootorgador coincide con una era marcada por la búsqueda mundial de la cultura moral y la verdad espiritual, donde las enseñanzas avanzadas son asimiladas fácilmente por una raza espiritualmente entrenada. [49]
Durante la sexta era – posterior a los Hijos Instructores, el planeta evoluciona hacia una época de iluminación espiritual y transformación social bajo la influencia de los Hijos Instructores Trinitarios divinos. [50]
La cultura intelectual y social de la cuarta mansonia es comparable a la de la era posterior a los Hijos Instructores en los planetas de evolución normal, pero espiritualmente más avanzada. [51]
La conclusión de las misiones de los Hijos Instructores señala la entrada del planeta en la luz y la vida mientras el Príncipe Planetario asciende a Soberano Planetario y el Soberano del Sistema proclama la nueva era. [52]
La edad de oro se acerca a medida que el gobierno representativo desaparece, dando paso al autocontrol individual en una sociedad guiada por la hermandad social y la igualdad espiritual. [53]
Una época planetaria, que dura más de 1000 años, es una contribución de la Trinidad para la transición a la era de luz y vida, con los Hijos Instructores apoyados por un grupo de Hijos Dainales primarios, secundarios y supremos. [54]
En esta época, las duraciones de vida que se acercan a los 500 años conducen a una sociedad donde la degeneración y las conductas antisociales están casi erradicadas, allanando el camino para una nueva era de hermandad social e igualdad espiritual. [55]
Muchos mortales son trasladados a medida que la lealtad espiritual del tiempo progresa hacia la unidad universal en la era de los Hijos Instructores Trinitarios. [56] El Príncipe Planetario es elevado a Soberano Planetario mientras el Soberano del Sistema proclama la entrada del mundo en la era de luz y vida. [57]
Los Hijos Instructores Trinitarios regresan al mismo mundo múltiples veces, elevando al Príncipe Planetario a Soberano Planetario e inaugurando una era de luz y vida. [58]
Las épocas planetarias están determinadas por las misiones de los Hijos divinos, que se enumeran en orden desde el Hombre Pre-Príncipe Planetario hasta la Era de Luz y Vida, y los Hijos Avonales actúan como jueces planetarios antes de las experiencias magisteriales y de otorgamiento. [59] Los Hijos Magisteriales juzgan las dispensaciones planetarias finales, y actúan como magistrados superiores y terminadores de dispensaciones. [60] Los Hijos Magisteriales supervisan la reasignación de seres celestiales para tareas en cada nueva dispensación. [61] Los serafines supremos ayudan en la transición entre épocas planetarias junto con los Hijos y Espíritus superiores. [62] Mil millones de Censores Universales son parte integral de las decisiones de todas las épocas planetarias dentro de los siete superuniversos. [63]
Las eras del universo sirven como antecámaras para el crecimiento cósmico, y cada época determina el destino de las etapas anteriores y prepara el camino para la liberación de las limitaciones preevolutivas. [64]
Las épocas de desarrollo planetario guían a las razas mortales a través de las etapas de evolución, desde la supervivencia básica hasta la iluminación espiritual, culminando en la era de luz y vida. [65]
Al final de la dispensación, el Padre enviará otra dádiva. [73] No hay límites de tiempo arbitrarios en cuanto al progreso ético y espiritual experimentado en las épocas planetarias. [74]
El envío de grupos de avanzada para preparar el camino para las épocas subsiguientes asegura transiciones y expansiones suaves de la revelación funcional de la Deidad dentro de las unidades organizadas de la creación. [75] Los sobrevivientes durmientes ascenderán eternamente al final de cada dispensación, guiados por guardianes personales del destino. [76]
La encarnación de Miguel en Urantia alteró la secuencia normal de las épocas planetarias, impactando las futuras visitas de los Hijos del Paraíso al planeta. [77]
Acerca de las eras de luz y vida, véase el enlace a continuación.
Véase también: LU 52; LU 49:5.21-28.